Color, una nueva era
Somos muchos haciendo cosas similares, por eso es necesario crear la diferenciación de nuestros salones, para que la cuota de mercado correspondiente, se amplíe, y es aquí donde el color se convierte en fundamental.
Hoy, los avances científicos se centran en conseguir coloraciones más naturales. Se trata de lograr productos con menos química en su composición, respetuosos con el medio ambiente, capaces de mejorar la calidad del cabello a la vez que consiguen colorear el cabello de forma duradera.
TENEMOS EN TINTURAS DE SÍNTESIS TRES COLORACIONES POSIBLES:
• Temporal o tono sobre tono de duración limitada por los lavados, con la que conseguimos brillo y color debido a que sus pigmentos se adhieren al exterior del cabello.
• Semipermanentes son colorantes que al mezclarse con un oxidante de bajos volúmenes permite cubrir los primeros cabellos blancos y en algunos casos aclarar hasta 1 tono, con un aporte brillo notorio
• Coloración clásica en la que la unión del oxidante y un álcali que puede ser amoniaco o, ahora más de moda que nunca, monoetalonamina (MEA) con el que penetramos en el interior de la fibra capilar para transformar el pigmento natural en un nuevo color, fijándolo de manera definitiva.
En el lado Bio, nos encontramos con colorantes provenientes de pigmentos vegetales-naturales, su máximo representante la henna. Estos pigmentos se depositan en la capa externa del cabello, sin penetrar en él, sumándose al tono base del cabello sin cambiarlo. Su duración es temporal, con lo que es incapaz de aclarar el cabello o mudar de manera drástica su color, pues carece de agentes químicos.
Así pues, el profesional dispone de una paleta de productos de coloración con los que proporcionar a cada cliente la personalización capilar que persigue. Más aún si le añadimos el otro componente que permite una personalización 100% real: “las mechas” y sus diferentes formas de aplicación.
ACABADOS A LA ÚLTIMA
Lograr que el color vibre es cuestión de conocimientos, habilidades y el ingrediente vital, la creatividad. A continuación, presentamos diferentes posibilidades de acabados para todas tus potenciales clientas.
Granny Hair “Color de anciana”. Es una decoloración global o parcial, según el deseo, se puede llevar al límite, amarillo muy claro o blanco, y luego apórtale el reflejo directo ceniza, o irisado ceniza que corresponda. Si se controla el tiempo, se obtendrá un gris humo. Para trabajar el matiz final con una mezcla de negro azul, apenas un gramo y 50 de un clear sin matiz y se obtiene un gris azul de lo más especial.
Rose Gold Hair. Como en el anterior, se decolora y luego se pigmenta con un par de grs. de un rubio oscuro rojo y 50 de clear, de este modo se logra un rosa palo que enamora.
Baby Lights. Se puede recuperar un clásico, recreándolo con mechas extra finas, cardando cada una de ellas antes de tejerla para conseguir una coloración que parecerá global sin serlo.
Tiger Eye. Inspirándonos en la piedra semi-preciosa, trasladamos sus tonalidades, ocres, doradas, cobrizas-rojizas, marrones y su espectacular brillo a melenas capeadas, donde conjugar sus diferentes tonos, consiguiendo un movimiento sorprendente.
Tie Dye Atar-teñir. En esta ocasión la inspiración surge de las camisetas que pusieron de moda los hippies y hoy trasladamos al cabello, con diferentes tonalidades fucsias, verdes, azules, o malvas, en tonos profundos o pastel, mezcladas entre sí o como color único.
Balayage. En mi opinión es la madre de todas las técnicas antes descritas. Con ella llegó la libertad de expresión, permitiendo que las manos se liberaran de la plata las manos enguantadas, una esponja, un rodillo (de pintor) una brosse (cepillo de limpiar uñas) y cualquier elemento que nos pueda servir para recrear lo que nuestra imaginación dé de sí.
Por Luis Miguel Vecina de Expertise Education