Reparadores de puntas: el milagro embotellado
Condensando en pequeños frascos ingredientes altamente nutritivos, los reparadores de puntas son la quintaesencia del cosmético capilar por su efecto visible e instantáneo, que mejora ostensiblemente la apariencia del cabello, por muy maltrecho que se encuentre. Cuanto más largo es el cabello y más se alejan las puntas de la raíz, más desprotegida se encuentra la fibra capilar de las agresiones, y las puntas son la prueba más palpable del paso del tiempo: si no se cuidan adecuadamente, nutriéndolas y saneándolas periódicamente, acaban por abrirse y aparecer frágiles, quebradizas y con aspecto encrespado por una cutícula vieja que ya no queda bien cerrada. Ante esto, la tijera es la opción más lógica, pero también la más drástica, así que los reparadores de puntas se presentan como una atractiva opción cosmética que permite mantener la ansiada longitud sin pasar por el corte… por lo menos durante un tiempo. Los reparadores actúan alisando las escamas de la cutícula del cabello gracias a texturas emolientes y suavizantes, de modo que instantáneamente desaparece el encrespamiento de las puntas abiertas y la melena se ve renovada. Las siliconas volátiles son los ingredientes que más han revolucionado la cosmética en los últimos años, porque permiten un acabado suave y aterciopelado sin aportar peso ni grasa, y muy a menudo están presentes en los productos intensivos de reparación, porque rellenan y restauran la fibra capilar para devolverle un aspecto sano. Actualmente la cosmética profesional cuenta con un amplio abanico de opciones para solucionar esas puntas abiertas, de modo que el peluquero puede aconsejar a su clientela el mejor modo de lucir un cabello perfecto, por supuesto sin olvidar que la auténtica vía para una melena inolvidable es el cuidado diario y la visita periódica al salón.
Foto: Schwarzkopf Professional