Etiqueta ecológica para los productos cosméticos
La etiqueta ecológica de la UE que hasta ahora estaba limitada a los denominados "productos cosméticos "rinse off" ya se puede utilizar en todas las categorías de cosméticos. La Comisión Europea ha adoptado recientemente nuevos criterios que lo hacen posible. Algo que contribuirá a clarificar conceptos en el sector de la belleza como venían reclamando los profesionales del sector desde hace tiempo.
Nuevos criterios para la etiqueta ecológica de la UE
La Comisión Europea ha adoptado nuevos criterios para optar a la etiqueta ecológica de la Unión Europea para los productos cosméticos y productos para el cuidado de los animales. Como consecuencia, todos los productos cosméticos, tal como se definen en el Reglamento de la UE, ahora pueden solicitar esta etiqueta.
Con anterioridad, los requisitos previos para que los cosméticos obtuvieran la etiqueta ecológica de la UE cubrían una gama limitada de los denominados productos de "aclarado", como gel de baño, champú y acondicionador. El reglamento actualizado incluye todo tipo de cosméticos, también los "que no se aclaran" tales como cremas, aceites, lociones corporales, desodorantes y antitranspirantes, protectores solares, así como productos para el styling o de maquillaje.
El propósito de la etiqueta ecológica de la UE es ayudar a reducir el impacto ambiental de los productos en el agua, el suelo y la biodiversidad, contribuyendo a "una economía limpia y circular y un medio ambiente sin tóxicos".
Sustancias prohibidas
Los criterios de la etiqueta ecológica promueven productos con un impacto limitado en términos de ecotoxicidad y biodegradabilidad.
Se promueve minimizar el uso de los envases, que los materiales sean fácilmente reciclables e incluso la utilización de material reciclado, así como de los envases rellenables. También existen requisitos de suministro sostenible para algunos ingredientes como el aceite de palma, el aceite de palmiste y sus derivados.
Los nuevos requisitos establecen una prohibición total de las sustancias cancerígenas, mutágenas o tóxicas para la reproducción, de las sustancias calificadas por la Unión Europea como muy preocupantes, los nanomateriales, los identificados o sospechosos de tener propiedades de alteración endocrina, los ftalatos y las sustancias perfluoradas y polifluoradas, así como los microplásticos.
La etiqueta ecológica de la UE también establece reglas para garantizar que los envases se minimicen y / o sean fáciles de reciclar.
“Animo a las empresas a que soliciten la etiqueta ecológica de la UE y se beneficien de su prestigio. La etiqueta ecológica de la UE ayuda a orientar a los consumidores interesados en productos ecológicos certificados y fiables, y apoya la transición a una economía limpia y circular”, afirmó Virginijus Sinkevicius, comisionado de Medio Ambiente, Océanos y Pesca de la UE.
Diversas entidades independientes analizarán y evaluarán los productos y otorgarán estas etiquetas ecológicas. Seguramente, esta etiqueta contribuirá a llenar de contenido un concepto como la belleza limpia que continúa siendo una noción vaga para muchos consumidores.
Básicamente por belleza limpia se conoce todo aquel producto cosmética que carezca de ingredientes o sustancias consideradas potencialmente tóxicas o nocivas para las personas o para el medio ambiente y que han demostrado ser seguros y eficientes. No tienen porque ser productos ecológicos o "verde", pueden ser un cosmético que contenga sustancias sintéticas, pero que sea respetuoso con la salud de las personas y del medio ambiente.
Según la Oficina Europea de Medio Ambiente, la expansión de la etiqueta ecológica a nuevas categorías podría ayudar a clarificar conceptos en un mercado como el del sector cosmético donde proliferan productos con etiquetas o declaraciones medioambientales que resultan a menudo confusas para el consumidor porque cada una de ellas responde a criterios diferentes.
Información: UE
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