Fresadoras compactas de Wirtgen, máxima maniobrabilidad para trabajar en obras complejas
Wirtgen aúna ahora en la novísima clase compacta las ventajas de las fresadoras pequeñas, tales como la maniobrabilidad, el manejo por un solo operador y la flexibilidad, con el principio de carga frontal y la productividad de las fresadoras grandes. La W 150 CFi ha festejado en la reciente Bauma su estreno mundial como máquina más potente de esta clase.
Los clientes tienen a disposición no menos de ocho modelos de la clase compacta, con anchuras de fresado estándares entre 1,0 y 1,5 m y profundidades de fresado de hasta 330 mm. Empleando el Flexible Cutter System, incluso se consiguen anchuras de fresado entre 8 cm y 1,5 m. La serie completa de máquinas, de la que también forman parte la W 100 CF / W 100 CFi, W 120 CF / W 120 CFi, W 130 CF / W 130 CFi y la W 150 CF / W 150 CFi, convence por su alto rendimiento y su elevada rentabilidad.
Las aplicaciones clásicas de las fresadoras pequeñas, como el saneamiento parcial de carreteras, forman parte de su campo de aplicación al igual que el fresado de carreteras completas que, en realidad, es una especialidad de las fresadoras grandes. Por consiguiente, las fresadoras compactas de Wirtgen no solo son extraordinariamente flexibles, sino que, gracias a la concentración de las ventajas de la clase de fresadoras pequeñas y grandes, a la puesta en práctica de un sistema uniforme de manejo y, en particular, a la implementación de modernísimas tecnologías de control, la clase compacta de Wirtgen representa, sobre todo, el siguiente nivel de desarrollo en el sector de las fresadoras en frío.
Innovador sistema de control sienta nuevas bases
De forma análoga a la nueva generación de fresadoras pequeñas, Wirtgen también ha equipado las fresadoras compactas con muchas funciones adicionales y automáticas que están integradas tanto en el sistema de manejo uniforme como en varias funciones de control. El resultado es un manejo sencillo de las máquinas y procesos rápidos y precisos de fresado y nivelación.
Funciones automáticas de los componentes de la unidad de fresado
Entre otras innovaciones, el protegecantos ahora dispone de una posición flotante activa que garantiza que durante el desplazamiento sobre material suelto, como por ejemplo grava, el protegecantos se eleve en determinados intervalos para así evitar un descenso. El rascador situado en la compuerta trasera del tambor también está dotado de un nuevo equipamiento, que incluye un sensor que provoca que el rascador no se quede enganchado en los bordes. El rascador se eleva de forma automática. Un sensor de ultrasonido determina la distancia entre el rascador y el material fresado en la carga parcial, para así ajustar el ángulo de apertura ideal del rascador. De este modo, es posible depositar perfectamente el material detrás de la unidad, lo que incrementa el rendimiento, reduciendo, a la vez, el desgaste de la unidad, del tambor de fresado y de las picas.
Funciones automáticas de dirección y posicionamiento
La moderna tecnología de control de las fresadoras compactas de Wirtgen también convence a la hora de conducirlas. En la fresadora de un metro W 100 CFi, por ejemplo, se pliega la rueda de apoyo trasera derecha de forma automática sin necesidad de hacer descender el tambor de fresado ni de desbloquear manualmente ningún perno. Además de la ‘posición inicial’, el tren de orugas trasero derecho cuenta con la nueva posición ‘hacia fuera’ y ‘girado hacia dentro’. Si se gira ‘hacia fuera’, el tren se encuentra en el círculo de corte y permite colocar la máquina con facilidad en la vía de fresado derecha contigua.
Con la dirección táctil, el conductor dispone, además del volante, de un sistema de dirección sumamente sensible dispuesto en el reposabrazos multifuncional.
El trabajo eficiente incrementa la rentabilidad
Los procesos de trabajo, perfectamente adaptados entre sí, ahorran tiempo y dinero, lo que, no en último lugar, vale para la carga del material fresado. También en este caso, Wirtgen ofrece soluciones prácticas. Los ángulos de giro de la cinta de 60° hacia la izquierda y la derecha permiten cargar el material incluso en situaciones de obras difíciles, como por ejemplo, en glorietas o cruces. Para realizar la carga con suma precisión, el operador de la máquina puede hacer girar la cinta de carga a dos velocidades diferentes. Gracias a la modernísima tecnología de control, es posible mantener constante la velocidad de la cinta, incluso con regímenes de motor que varían.
La W 150 CFi de Wirtgen, una máquina de primerísima calidad
Con una potencia de 283 kW, la W 150 CFi es la fresadora en frío más potente de la clase de máquinas compactas. La máquina con carga frontal es ideal para obras mayores con espacio reducido, como por ejemplo, en los centros de las ciudades. Es ahí donde el concepto sofisticado de visibilidad, en combinación con los sistemas de cámaras, ayuda al operador a maniobrar la fresadora. A fin de ofrecer máxima tracción de las orugas, Wirtgen aprovecha en la clase de máquinas compactas, la concepción del tambor central de la generación de fresadoras grandes. La W°150°CFi dispone adicionalmente del control de tracción ISC para poder utilizar óptimamente las elevadas reservas de potencia de la W 150 CFi en carretera. Este control garantiza que las cuatro orugas marchen a velocidad constante y con alta tracción durante aplicaciones exigentes de fresado y que se consiga el máximo rendimiento de fresado.
Con un peso de servicio de 20,8 t, la W 150 CFi en la mayoría de los casos se puede transportar sin necesidad de un permiso especial de transporte. Esto constituye una enorme ventaja para poder realizar las aplicaciones de fresado de forma flexible y rápida.