Primigea lamenta la dimisión de Natalia González
La Confederación Española de las Industrias de las Materias Primas Minerales (Primigea) ha lamentado en un comunicado la dimisión de la secretaria general de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía, Natalia González Hereza.
Desde Primigea han destacado su fructífera labor desarrollada, tanto en la secretaría general, como en su anterior función como directora general de Industria, Energía y Minas. Además, la Confederación espera que esta situación «no suponga la paralización de los planes y proyectos de verdadero interés tanto para la propia Comunidad Andaluza, como para el país», puestos en marcha durante su gestión.
Si bien el reciente nombramiento de Francisco Javier Ramírez, como director general de Industria, Energía y Minas, ha supuesto una decisión muy positiva que ha permitido cubrir un importante vacío dentro de la Junta de Andalucía. Primigea confía en que se nombre con inmediatez a un nuevo secretario general de Industria, Energía y Minas que dé continuidad e impulso a las acciones puestas en marcha por González Hereza.
El conjunto de la industria de Andalucía está a la espera de un gran plan industrial, imprescindible en el momento económico actual, que permita aprovechar su potencial como pilar de un crecimiento económico sostenible, con visión de medio-largo plazo, y que, a su vez, genere un impulso continuado del PIB, como base necesaria también para el bienestar social. En el actual escenario de retroceso de muchos de los indicadores económicos, es muy importante favorecer el desarrollo que traen consigo, tanto la industria ya establecida, como los nuevos y futuros proyectos, para sentar las bases que consoliden el principio esencial del desarrollo sostenible de esa Comunidad Autónoma.
Primigea defiende y manifiesta así el carácter de la industria extractiva de materias primas minerales como “madre de industrias”. Esta provee las materias primas imprescindibles para la mayoría de ellas y es generadora de empleo genuino y altamente cualificado, estando presente en todas las actividades humanas. Es una industria que trabaja por y para el progreso y en pro del planeta, un sector “estratégico y esencial”, pieza industrial necesaria para el porvenir y bienestar de nuestra sociedad, contribuyendo así a generar mejores realidades para todos.
Riqueza y empleo
Estas industrias juegan un papel clave como proveedores de sectores tan importantes como la metalurgia y siderurgia, la industria transformadora como automóviles, electrónica, industria química, generación, transporte y almacenamiento de energía, cemento, cales, yesos, cerámica, hormigón, mortero, ladrillos, vidrio, rocas ornamentales, áridos, fertilizantes y otros materiales para la construcción, para la alimentación y para el medio ambiente. En este sentido, el Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre «La minería no energética en Europa» (2009/C 27/19) dice que el 70 % de la industria europea depende directa o indirectamente de las actividades de la industria de materias primas minerales.
En conjunto, las cerca de 2.500 empresas de estas industrias y sus cerca de 3.000 explotaciones mineras generan 221.500 puestos de trabajo directos, según los datos de la Estadística Minera de España y del INE y cerca de 600.000 considerando los indirectos y los inducidos.
Esta industria abastece, entre otros, al sector de la construcción, con 1.281.400 trabajadores registrados, así como a los sectores de energía eléctrica (en particular la renovable), productos metálicos, hierro, acero, ferroaleaciones, industria química, etc., cuyo valor de producción es superior a los 50.000 millones de euros. Además emplean a otros 583.500 trabajadores, cuya competitividad y capacidad de generar riqueza y de contribuir al equilibrio de la balanza comercial depende del suministro de materias primas desde yacimientos nacionales.
