«Me gusta resolver problemas, es lo que siempre he hecho»

Trabajar en Kiruna, una ciudad minera sueca situada sobre el círculo polar ártico, impone requisitos especiales a un técnico. Un día, Anton Laitamaa está a mil metros bajo tierra y el siguiente, máquinas de servicio en el nuevo centro. Spirit lo ha seguido durante el desempeño de su trabajo diario.

Afuera, la nieve está cayendo, y la temporada ha comenzado para Anton Laitamaa. Sin embargo, pasará la mayor parte del día en el interior. Una máquina en el otro extremo del taller de Swecon en Kiruna requiere servicio. «Es un cargador de ruedas de tamaño mediano que se usa bajo tierra en la mina», ha explicado Anton.

Cuando las máquinas utilizadas en la mina de mineral de hierro de Lkab en Kiruna requieren reparaciones, el trabajo generalmente se lleva a cabo en el sitio. Solo los problemas particularmente complicados justifican el problema de transportar la maquinaria al taller.

Hoy es una de esas ocasiones.

«Los engranajes del cargador de ruedas han empezado a resbalar, así que voy a tener que reemplazar la caja de cambios. Primero, levantaré la vieja caja de cambios y luego levantaré la nueva en su lugar. Entonces tendré que probar y calibrar el nuevo equipo».

Mientras Anton pueda recordar, ha estado retocando o trabajando con máquinas. Incluso cuando era un niño que crecía en la zona del Valle de Torne, en el norte de Suecia, disfrutó desarmando cosas para ver cómo funcionaban.

«Cuando tenía 13 o 14 años me permitieron comprar un ciclomotor, pero mi madre me dijo que no podía sacarlo de nuestra propiedad. Pensé que eso era bastante aburrido, así que tomé el ciclomotor en pedazos. Por supuesto, esto le causó a mi madre un shock. Pero ella estaba más feliz cuando volví a armarlo «, ha recordado.

Anton ha estado trabajando como técnico de servicio para Swecon, el concesionario de Volvo CE en Suecia, desde hace casi diez años. Durante este tiempo, junto con otros dos técnicos suecos y en competencia con 425 equipos de todo el mundo, ha logrado traer a casa la medalla de bronce en la competencia Volvo CE Masters, el campeonato mundial interno de técnicos de la compañía.

Sin embargo, un día de trabajo normal es un poco más ordinario.

«Por mañana, me dirijo hacia aquí, me cambio y lavo el coche. Usted verifica los trabajos que tiene alineados, luego los empaca y se va «, ha declarado.

El ambiente a 150 km al norte del círculo polar ártico es algo especial. La mina ha sido la característica definitoria de Kiruna por más de 100 años. No importa dónde se encuentre en la ciudad, siempre se puede ver la silueta oscura de la montaña clásica llena de mineral, Kiirunavaara.

La minería ha estado bajo tierra durante muchas décadas, y en busca del codiciado mineral de hierro, Lkab se ha aventurado cada vez más profundamente en la roca madre. El nivel principal en el cual se extrae el mineral se encuentra a 1,365 metros bajo el nivel del suelo.

La instalación en Kiruna es la mina de hierro subterránea más grande del mundo. Debajo del suelo se encuentran kilómetro tras kilómetro de caminos.

«Desde donde estamos, es una ida y vuelta de 16 kilómetros a la mina. Pero si necesito ir a la clandestinidad, puede ser de 40 kilómetros ida y vuelta «, ha agregado Anton.

La mayoría de sus horas de trabajo se gastan en diferentes sitios de trabajo. La mina en Kiruna es naturalmente un destino frecuente, al igual que la mina en Svappavaara, a 50 kilómetros de distancia.

También son estas minas las que están en el centro del mayor cambio en la historia de Kiruna. Para poder expandir la mina, Lkab está moviendo toda la ciudad unos pocos kilómetros hacia el este. Debido a la mudanza en curso, también hay mucha actividad en la superficie. Muchas máquinas de construcción utilizadas en la construcción del nuevo centro de la ciudad son de Volvo CE, y en 2018 también se iniciará el trabajo en un nuevo tramo de carretera que forma parte de la Ruta Europea E 10.

«El trabajo es muy variado, y no hay dos días iguales», ha afirmado Anton. «No estoy estancado haciendo lo mismo todos los días. A veces te encuentras en la mina, a 1.365 metros bajo tierra. Al día siguiente, es posible que esté en el Centro Espacial de Esrange, donde hay máquinas de servicio.”

La cargadora de ruedas para una nueva caja de engranajes, sentada en el piso del taller, muestra signos claros de haber sido utilizada bajo tierra en la mina. El polvo blanco de la minería se puede ver en sus enormes ruedas.

«Y mira esto», anuncia Anton, señalando una mancha de óxido. «El agua es increíblemente agresiva bajo tierra, lo que significa que todo comienza a oxidarse muy rápidamente. Todo se desgasta más rápido».

Los vehículos que se utilizan en Kiruna están sujetos a niveles de tensión que los equipos de construcción en otros lugares no encuentran.

«El mineral es relativamente pesado. Coloca una carga significativa en las máquinas «, ha añadido Anton. Pero no es solo el entorno duro y particular al que están expuestas las máquinas en Kiruna. También están en uso por largos períodos de tiempo.

«En otro lugar, una máquina puede ser utilizada durante 6-7 horas al día. Aquí, están en camino durante dos, incluso tres turnos seguidos. Eso puede significar 18-20 horas de trabajo por día. Ciertamente los pone en tensión».

Aquí es donde Anton Laitamaa y sus colegas en Swecon entran en escena. Si las máquinas se mantienen durante más tiempo, requieren servicio y mantenimiento. «Paso mucho tiempo resolviendo problemas. Me gusta resolver problemas, es lo que siempre he hecho. Cuando arreglas un problema, te da un poco de zumbido «, ha anunciado Anton.

Volvo CE tiene una importante participación de mercado en lo que respecta a equipos de construcción en Kiruna. El proyecto de mudar la ciudad, junto con la construcción del nuevo centro y la nueva infraestructura, significa que los contratistas de otras partes de Suecia se dirigen a Kiruna para trabajar.

Para los técnicos de Swecon, supone un desafío cuando llegan nuevas máquinas a la ciudad. «Las máquinas son todas individuales, y conocemos las que ya están en Kiruna. Cuando aparecen nuevos, no los conocemos, y no sabemos cómo han funcionado en el pasado, así que tenemos que familiarizarnos con sus antecedentes», ha explicado Anton.

El cargador de ruedas en el que Anton está trabajando ahora es una de las máquinas que él conoce bien. Para montar la nueva caja de cambios, utiliza una grúa que baja la caja en la máquina. Después de las pruebas adecuadas, está listo para trabajar nuevamente, y Anton dirige su atención al siguiente problema que debe resolverse.

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