Acciona pone ‘a punto’ la tuneladora que construirá el Metro de Quito
Acciona, que construirá la Línea 1 de Metro de Quito (Ecuador), está acondicionando en su parque de maquinaria de Noblejas (Toledo) una de las tres tuneladoras que llevarán a cabo la construcción de la primera línea de metro de la capital ecuatoriana. Las otras dos tuneladoras serán acondicionadas y validadas en Alemania.
Se trata de una máquina de 9,3 metros de altura (el equivalente a un edificio de tres plantas) con un peso aproximado de 1.660 toneladas, capaz de avanzar bajo tierra a una velocidad media de entre 15 y 18 metros al día. La tuneladora excavará un tramo de 4 km, avanzando durante las 24 horas del día.
Los responsables de Acciona están llevando a cabo en Noblejas las pruebas de validación de la tuneladora para constatar su adecuación a variables como las condiciones geológicas del terreno (materiales, dureza...), la altitud y presión atmosférica de Quito, etc. Una vez realizadas las pruebas, la tuneladora se desmontará para ser trasladada en barco y montada de nuevo in situ en la boca del futuro túnel del Metro de Quito a finales de 2016 y comenzará a funcionar en 2017.
En total, tres tuneladoras llevarán a cabo la construcción de la Línea 1 de Metro de Quito, de 22 kilómetros de longitud y quince estaciones. Además de la tuneladora que está siendo acondicionada en Noblejas, otras dos serán validadas en Alemania y enviadas a Quito una vez concluidas las pruebas.
La excavación de túneles es uno de los retos más complejos de la ingeniería civil y puede acometerse con diversos métodos (mecánicos, TBM’s y convencionales mediante explosivos...), si bien, el empleo de tuneladoras (como la que se puede visitar en Noblejas), es el más rápido y seguro, ya que reduce hasta diez veces el tiempo de ejecución del túnel y reduce las molestias e incidencias para los vecinos (especialmente en túneles urbanos como los de metro), ya que evita cortes de tráfico, reduce ruidos...
Además, minimiza los riesgos para los trabajadores, ya que a medida que la parte frontal de la tuneladora va excavando el túnel, en la parte trasera del escudo se colocan las dovelas (piezas que forman la estructura interna del túnel), cada una de las cuales tiene un peso aproximado de hasta 5,1 toneladas. De esta manera, la obra se realiza sin que los trabajadores entren en contacto en ningún momento con la roca o la tierra viva, minimizándose el riesgo.
En el caso del metro de Quito, cada metro y medio de avance de la tuneladora se cubre con siete dovelas formando el anillo del túnel.
El Ayuntamiento de Quito ha adjudicado a Acciona la construcción del metro de la capital ecuatoriana, un proyecto estimado en 1.538 millones de dólares (unos 1.398 millones de euros). El contrato consiste en la construcción de la primera línea del metro, de 22 kilómetros de longitud y toda ella subterránea, además de la ejecución de trece estaciones, que se suman a las dos estaciones ya construidas anteriormente por Acciona (adjudicataria también del contrato de construcción de la primera fase del metro). Esta línea conectará de Norte a Sur la ciudad de Quito en un tiempo de viaje de algo más de media hora y contará con capacidad para transportar unos 400.000 viajeros al día.
El plazo de ejecución previsto es de 36 meses para las obras, más seis meses para integración de sistemas y puesta a punto.
Esta primera línea de metro constituye el primer elemento de un nuevo sistema de transporte público de Quito. El proyecto supondrá el ahorro de 50 Millones US$ al año en combustible por las mejoras en el transporte urbano, con la consiguiente reducción de 67.000 toneladas de CO2. La construcción del metro de Quito dará empleo a más de 2.300 personas, de las cuales, 100 trabajarán directamente en cada una de las tres tuneladoras que participarán en el proyecto.