Sandvik Coromant pone en valor su experiencia en el Día Internacional de la Mujer
El Día Internacional de la Mujer (DIM) de este año tiene como lema ‘abrazar la equidad’, con el objetivo de ofrecer oportunidades justas para que todo el mundo tenga éxito. Como empresa que se compromete con su gente, Sandvik Coromant, el especializa el corte de metales destaca la experiencia de Helen Blomqvist, presidenta de Sandvik Coromant.
Una de las principales metas del Día Internacional de la Mujer es forjar culturas laborales integradoras en las que prosperen las carreras de las mujeres y se celebren sus logros. Este año, la campaña se centra en la equidad y en cómo el hecho de ofrecer las mismas oportunidades ya no es suficiente. Así pues, ¿cómo podemos alcanzar la equidad?
En Sandvik Coromant, el número de mujeres en puestos directivos funcionales es actualmente del 43%. Esta cifra es superior a la media estimada de la industria, que se sitúa en el 38%, según el Chartered Management Institute (CMI). Sin embargo, si nos fijamos en toda la industria de la fabricación, está claro que aún queda mucho por hacer para alcanzar realmente la equidad. Según un informe reciente del Manufacturing Institute, las mujeres tan solo representan el 29% de la mano de obra del sector. Curiosamente, el informe revela que el 63% de las mujeres que luchan por entrar en este sector se enfrentan a problemas derivados de la falta de flexibilidad del mismo y, casi la mitad, se ven disuadidas por cuestiones relacionadas con el cuidado de los hijos, frente a solo el 8% de los hombres.
Parece, por tanto, que las mujeres que desean triunfar en la industria de la fabricación todavía se enfrentan a retos que rara vez afectan a sus homólogos masculinos. Si la industria quiere alcanzar realmente la equidad, debe ser consciente de los prejuicios inconscientes a los que se enfrentan ciertos grupos y encontrar formas de gestionarlos. Pero primero, las empresas deben comprender que contratar de forma diversa no solo sirve para cumplir una cuota. De hecho, puede aportar beneficios empresariales reales y cuantificables.
Es hora de actuar
Según un informe del Wall Street Journal en el que se examina la diversidad y la inclusión entre las empresas del S&P 500, “las culturas diversas e inclusivas están proporcionando a las empresas una competitividad superior a la de sus homólogas”. Es más, un informe de McKinsey anterior a la pandemia, Delivering Through Diversity (Resultados gracias a la diversidad) mostraba que las empresas en el cuartil superior de sus clasificaciones por diversidad de género en sus equipos directivos tenían un 21% más de probabilidades de tener una rentabilidad superior a la media. En cuanto a la diversidad étnica y cultural, esa cifra se situó en el 33%.
A pesar de los esfuerzos por aumentar la diversidad, muchas empresas siguen sin hacer lo suficiente. En enero de 2023, Gartner publicó una encuesta en la que se detallaban los cinco principales retos a los que se enfrentan los líderes en materia de diversidad, equidad e inclusión (DEI). La encuesta concluye que más de la mitad de los líderes de DEI no asumen la responsabilidad de impulsar resultados diferentes, mientras que un tercio considera que no tiene poder para lograr un cambio real.
Está claro que las empresas deben hacer grandes esfuerzos para beneficiarse realmente de la diversidad de sus equipos. Una manera de fomentar un entorno laboral más equilibrado es promover las voces de quienes ya trabajan en la industria. Sandvik Coromant entrevistó a su presidenta, Helen Blomqvist.
La presidenta al habla
Tras empezar como ingeniera de investigación en Sandvik Coromant hace 20 años, puede afirmarse con toda seguridad que Helen Blomqvist ha ido subiendo de categoría con gran éxito dado su nombramiento como presidenta de la empresa en 2020. Son muchas las experiencias que han conformado la trayectoria de Helen como ingeniera; todo lo que ha conseguido ha constituido una oportunidad de aprendizaje. “Me gusta ver los comentarios como un regalo, no como críticas. Nunca dejo de aprender y todo el mundo en Sandvik Coromant puede enseñarme algo”, explicó.
“Para ofrecer oportunidades justas e iguales a todos los miembros de la organización, es importante que aprendamos de forma constante cómo podemos hacerlo mejor. En Sandvik Coromant, contamos con un sistema de feedback periódico en el que los empleados pueden expresar de forma anónima cómo se sienten en su puesto. En nuestra encuesta más reciente, hemos descubierto que el 82% de los encuestados sienten que pueden ser ellos mismos en el trabajo, mientras que el 83% afirma sentirse orgulloso de trabajar en Sandvik Coromant. Son buenas cifras, pero siempre se puede mejorar”.
Para Helen es importante que la cultura del aprendizaje alimente la curiosidad y estimule la innovación, y que ofrezca la oportunidad de desarrollar las propias capacidades y fomentar el desarrollo personal. “Una gran parte de la equidad consiste en ofrecer oportunidades de desarrollo y asegurarse de que todos se sientan seguros, exitosos y felices en el trabajo”, añade.
“Hubo una propuesta de los fundadores de Google conocida como la Regla del 20%, que siempre he admirado. El planteamiento consistía en que, durante una parte de la semana de un trabajador, éste podía dedicar su tiempo a un trabajo exploratorio, centrado en la creatividad y el aprendizaje que quedaba fuera de sus responsabilidades normales. Allí nació Google Mail (Gmail), entre otras muchas creaciones históricas.
A pesar de que no invierto tanto tiempo en otras actividades, intento predicar con el ejemplo y dedicar 90 minutos de mi tiempo cada semana a mi propio aprendizaje. Ya sea asistiendo a una sesión de formación o hablando con uno de nuestros expertos en productos, siempre hay algo nuevo que aprender. Naturalmente, fomentar esta cultura del aprendizaje no es la única manera de lograr la igualdad en el lugar de trabajo, y los hechos siempre hablarán más alto que las palabras. Sin embargo, ser capaz de crear ese espacio para el desarrollo, a un ritmo que sea flexible para cada persona y que juegue con sus propios puntos fuertes, desempeña un importante papel en la creación de una mano de obra más diversa”.
Los hechos hablan por sí solos: la industria debe hacer más para animar a las mujeres a entrar en el campo de la fabricación. Celebraciones como el Día Internacional de la Mujer desempeñan un papel clave a la hora de mostrar las opciones disponibles para las mujeres, que no deben verse frenadas por los estereotipos. No obstante, quizá lo más importante sea compartir las historias de mujeres de la industria que han superado obstáculos y han desarrollado verdaderas innovaciones industriales, lo que es clave para formar la próxima generación de héroes de la fabricación.