La prometedora industria de la fabricación aditiva
Virgilio García, presidente de Addimat
17/06/2024Informe del sector de la impresión 3D / fabricación aditiva 2024
Las tecnologías de fabricación aditiva continúan evolucionando y consolidándose en el panorama industrial de la fabricación avanzada.
El sector de la impresión 3D creció un 11% en el mundo el año pasado. Para España el 2023 ha sido también un buen año ya que, según los datos que manejamos en la Asociación Española de Tecnologías de Fabricación Aditiva y 3D (Addimat), el consumo de máquinas de fabricación aditiva aumentó en un 17,7% en nuestro país. Además, en tan solo dos años, hemos mejorado nuestro posicionamiento en el ranking referido a la base instalada de máquinas de fabricación aditiva en el mundo, pasando del 1,3% al 1,5% de cuota de mercado, según la consultora Wohlers Associates. A pesar de las buenas noticias, el sector en España sigue siendo pequeño en comparación con nuestros competidores europeos como Alemania, que acumula el 8,2% de la cuota de equipos instalados a nivel mundial. Esto nos indica que estamos avanzando bien, pero desde una etapa más temprana.
Las proyecciones futuras son prometedoras con un consenso entre los expertos en fabricación aditiva que anticipa un crecimiento medio anual del 14-16% para los próximos cinco años.
En los últimos años hemos visto como el sector se consolida y demuestra su aplicación industrial, despejando cualquier duda acerca de su viabilidad a largo plazo. Sectores como el del automóvil, aeronáutico, energía, y defensa, están haciendo apuestas de calado por esta tecnología, y siguen encontrando aplicaciones en las que realmente obtienen una ventaja competitiva. Esto lo he observado de primera mano cuando trabajaba para ArcelorMittal, o ahora desde mi nueva posición dentro del grupo Sicnova como CEO de la división Novaindef. De hecho, la creación de Noaindef viene traccionada por la creciente demanda que el grupo ha detectado en el ámbito de la defensa.
Si analizamos las estrategias de los países para posicionarse como líderes en este campo, hay que destacar a EE. UU. Además de ser pioneros en el desarrollo y adopción de tecnologías de fabricación aditiva, han sabido elevar esta ventaja y hacer que sea un tema estratégico para el país con iniciativas público-privadas como AM Forward.
Actualmente, en Addimat estamos trabajando también este aspecto en colaboración con otros países europeos a través de Cecimo, nuestra asociación europea. Queremos explorar junto con la Comisión Europea una estrategia común, que ayude a que Europa se consolide como referente en el ámbito de la fabricación aditiva y aprovechemos todo el potencial y las oportunidades que nos ofrece la impresión 3D. Debemos estar especialmente atentos a los desarrollos en China, cuyo crecimiento en el sector es muy notable. Europa debe actuar de manera coordinada para competir efectivamente en este campo emergente.
Hemos recorrido un gran camino; Addimat cumple 10 años en diciembre de este año. Sin duda, hoy contamos con un sector consolidado, formado por un ecosistema de 105 empresas en las que trabajamos cada día en la búsqueda de nuevas aplicaciones que ayuden a la industria a ser más competitiva. Con el apoyo de Addimat hemos estrechado relaciones y colaboramos para poder competir en el mercado global y abordar unidos los retos a los que nos enfrentamos con enorme ilusión.
Uno de los principales desafíos en los próximos años será el de contar con personas que quieran incorporarse a este apasionante sector. El crecimiento que prevemos traerá consigo a su vez el crecimiento de las empresas con la consiguiente generación de puestos de trabajo. Necesitaremos personas formadas en aspectos relacionados con el diseño para la impresión3D, el conocimiento de los distintos procesos de fabricación y la aplicabilidad de cada uno de ellos para cada caso, el manejo de máquinas de impresión 3D, etc. Toda esta dinámica de atracción de talento y estrategia formativa es precisamente uno de los pilares en los que Addimat trabaja en el seno de AFM Cluster y en estrecha colaboración con el IMH.
Estoy convencido de que los desafíos actuales nos van a traer grandes oportunidades para contribuir a la fábrica del futuro, en la que los procesos serán cada vez más eficientes y sostenibles, y donde, por supuesto, las impresoras 3D desempeñarán un papel protagonista.