La automoción española esprinta en la I+D+i
El sector de componentes para automoción, que facturó 29.723 millones de euros en 2014, invirtió en I+D+i un 15,3% más que el pasado año, alcanzando los 904,6 millones de euros y dando empleo directo a 196.582 personas, según Sernauto (Asociación Española de Fabricantes de Equipos y Componentes para Automoción).
El avance tecnológico del sector, en su conjunto, está basado en una relevante red de Centros Tecnológicos y Clústeres de Automoción. Entre las principales líneas de investigación en las que están trabajando las empresas españolas fabricantes de componentes están: los sistemas de propulsión y combustibles alternativos, tecnologías de seguridad y movilidad, nuevos materiales para disminuir el consumo y las emisiones contaminantes, etc.
El compromiso con la I+D+i de los fabricantes de componentes es muy estrecho, hasta el punto que los representados por Sernauto se han propuesto incrementar en 600 millones de euros la inversión en I+D del sector, hasta alcanzar un 4% de las ventas en 2020. Para ello han propuesto la creación de una entidad de colaboración público-privada, en la que se involucren las Administraciones Públicas y los fabricantes de componentes de vehículos, para definir las prioridades y estrategias de especialización a través de grandes proyectos de automoción como en Francia (Nouvelle France Industrielle), Alemania (Industrie 4.0) y Reino Unido (Catapult program: High value manufacturing y Automotive Council); una ventanilla única para la gestión eficiente de los recursos públicos disponibles y la eliminación de duplicidades administrativas; y el impulso de la movilidad del personal investigador entre empresas y organismos públicos de investigación. Todas las empresas del sector coinciden en que hacen falta ayudas financieras para el desarrollo de nuevos componentes, ya que la competencia en esta Industria es muy fuerte y lleva mucho tiempo y esfuerzo posicionar un nuevo producto.
En este sentido, el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), pone a disposición de las empresas del sector Automoción, líneas de financiación para los gastos derivados del desarrollo de proyectos de I+D y para la incorporación de activos innovadores al ámbito productivo. La ayuda será parcialmente reembolsable, con una cobertura financiera de hasta el 75% del presupuesto total aprobado, pudiendo alcanzar hasta el 85% con carácter excepcional. Serán subvencionables los gastos de personal, los costes de instrumental, material, de investigación contractual, conocimientos técnicos y patentes, gastos generales y otros gastos de funcionamiento.
El CDTI dispone también de dos modalidades de disposición anticipada en los proyectos de I+D: un anticipo del 25% de la ayuda concedida, con un límite de hasta 200.000 euros, sin exigencia de garantías adicionales, y un anticipo de un 50 ó 75% de la ayuda concedida, siempre que se aporten avales y sin garantías adicionales. La ayuda es incompatible con otras ayudas públicas destinadas al mismo proyecto, salvo con las ayudas de las Comunidades Autónomas con las que CDTI haya suscrito el correspondiente acuerdo de cofinanciación. En los proyectos cofinanciados con Feder la ayuda concedida es incompatible con otras ayudas públicas que tengan por objeto la financiación del proyecto.
El CDTI cuenta también con una Línea Directa de Innovación gestionada directamente y cofinanciada con Fondos Estructurales a través del Programa Operativo de Investigación, Desarrollo e Innovación por y para el beneficio de las empresas – Fondo tecnológico. Esta línea financia bajo el régimen de mínimos, proyectos de innovación tecnológica como: la incorporación y adaptación activa de tecnologías que supongan una innovación en la empresa, así como los procesos de adaptación y mejora de tecnologías a nuevos mercados; la aplicación del diseño industrial e ingeniería de producto y proceso para la mejora tecnológica, que impliquen una modernización tecnológica para la empresa y un salto tecnológico; por último, la aplicación de un método de producción o suministro nuevo o significativamente mejorado.
El CDTI pone a disposición del sector Automoción líneas de financiación para los gastos de proyectos de I+D+i. Foto: Seat.
La Comisión Europea considera que las ayudas que no superen 200.000 euros en términos de subvención en tres años fiscales, no falsean la competencia, y pueden ser concedidas por los Estados Miembros bajo el reglamento de mínimos. El presupuesto mínimo financiable es de 175.000 euros y el importe de la financiación de hasta el 75% del presupuesto financiable (fondos CDTI), pudiendo alcanzar el 85% si va cofinanciada con fondos Feder.
Las inversiones financiables abarcan desde la adquisición de activos fijos nuevos, costes de personal, materiales y consumibles, colaboraciones externas, gastos generales, costes de auditoría, etc. y deberán ser posteriores a la fecha de presentación del proyecto. El tipo de interés aplicado dependerá del origen de fondos asignado a la ayuda. Si son Fondos Feder, Euribor+0,2% para un período de amortización de 3 años; Fondos CDTI, Euribor+0,2% para un período de amortización de 3 años, o Euribor+1,2% para un período de amortización de 5 años; en el caso de desembolso de la ayuda, deberá presentarse una auditoría de gastos previa; en caso de anticipo de la ayuda concedida, del 25% hasta 300.000 euros, sin garantías adicionales, o hasta un 50 ó 75% mediante la presentación de avales. Para los proyectos con más de un 60% del presupuesto destinado a la adquisición de activos fijos, el anticipo básico será del 50% de la aportación CDTI aprobada, sin condiciones adicionales. Es imprescindible aportar una oferta vinculante o una factura pro-forma para acreditar la adquisición.
Carlos Bernardos, Manager de Financiación de la Innovación en Alma Consulting Group, ha comentado sobre las ayudas del CDTI al sector Automoción que: “dada la complejidad de estas ayudas, siempre es aconsejable contar con la labor experta de empresas de consultoría especializadas en la identificación, tramitación y justificación de sus procedimientos, permitiendo a las empresas concentrarse en el desempeño de sus proyectos e inversiones”.
Por último, el desarrollo de proyectos innovadores y con generación de conocimiento industrial, puede servir para obtener un importante ahorro fiscal mediante el incentivo del Patent Box, ya que la venta o cesión de conocimiento técnico permite un sustancial ahorro sobre sus ingresos relacionados, para lo que es necesario un buen asesoramiento y sentar unas bases sólidas para su aplicación y justificación frente a una posible inspección fiscal.