El consumidor actual, más sensible al factor precio
El consumidor de hoy en día gasta menos, ahorra más, es más selectivo y prefiere los productos de proximidad (un 41,1% más que antes de la pandemia) y sostenibles (un 16,7% más). También está más atento al comportamiento ético de la empresa (un 18,7% más), según la tercera edición de “El impacto de Covid-19 en estados de ánimo, expectativas y hábitos de consumo”, realizado por EAE Business School, a finales del mes de noviembre y en diciembre.
“Esto es indicativo de un compromiso al respecto por contribuir a la recuperación de la economía nacional y una mayor sensibilidad al factor precio en la compra. Un 22,4% más de consumidores, que antes de la pandemia, comparan los precios antes de comprar, a diferencia de la época pre-Covid-19”, señala el autor del estudio y profesor de EAE Business School, Pablo Contreras.
Además, ahora los consumidores procuran informarse más que antes de la pandemia. Un 19,5% de consumidores dicen mirar más las etiquetas. “Esto sugiere un consumidor que tiende a ser más reflexivo y racional en la compra y que no compra tanto por confianza general en su marca habitual, y que, por ello, puede estar más dispuesto a cambiar de marca. También puede ser indicativo de un consumidor que busca un mayor nivel de validación de su elección y que está incluyendo criterios en su compra que antes no estaban presentes en su ecuación de valor, o lo estaban en menor medida”, explica Contreras.
La calidad superior supondría una disposición orientativa a pagar un 20,8% más, pero el segundo factor a considerar sería el que la empresa hubiera manifestado un comportamiento de colaboración y compromiso en algún aspecto relevante durante la crisis de la covid-19 (18,4%).
Los consumidores procuran informarse más que antes de la pandemia: un 19,5% de consumidores dicen mirar más las etiquetas
Por otro lado, el 41,4% de los consumidores ha visto afectada a la baja su capacidad económica y de gasto y un 47,9% ha disminuido su consumo. La intención de gasto ha disminuido en las actividades de ocio para el 68% de los encuestados, en hostelería (-68,9% de encuestados), en artículos de lujo o premium (-68,2%), en espectáculos (-64%), en moda y complementos (-57,7% de encuestados) y en vacaciones (-50% de encuestados). El presupuesto para la práctica de deporte ha disminuido, pero en menor medida en el 30,7% de los encuestados. El presupuesto que globalmente no sufre una disminución en número de personas es el de alimentación saludable, (+0,1%).
Auge del ecommerce y la tienda de proximidad
“En el nuevo escenario Covid-19, los puntos de venta minoristas de tipo presencial se han visto, en general, perjudicados en favor del canal de internet que ha experimentado un considerable aumento, tanto en los días más duros del confinamiento en los meses de marzo y abril, como con posterioridad, debido a la consolidación de nuevos comportamientos de compra en la población. Así, el canal de internet cuenta con un saldo favorable de compradores que lo hacen con más frecuencia de casi un 35% de consumidores. También el comercio de proximidad ha ganado en frecuencia de compra un 16% de consumidores”, explica el autor del estudio.
Los canales más perjudicados, que han visto reducida su frecuencia de compra son los centros comerciales, con una frecuencia menor en un 44,3%, los grandes almacenes que tienen un saldo neto de 40,8% menos de frecuencia de compradores, las tiendas en calles comerciales con una frecuencia menor en un 25% y los hipermercados que pierden en frecuencia un 22,3% de compradores. Se da una traslación clara a la compra online y a establecimientos más cercanos a los domicilios y de menor tamaño en general.
El canal de internet cuenta con un saldo favorable de compradores que lo hacen con más frecuencia de casi un 35% de consumidores. También el comercio de proximidad ha ganado en frecuencia de compra un 16% de consumidores
El canal de venta mayoritario en los productos de gran consumo es el supermercado, ya que lo prefieren para alimentación envasada el 58,8% de consumidores. También para los productos de alimentación frescos para un 44,8%, para los productos de higiene personal (48,7%), para los productos de droguería (39,9%) y las bebidas con alcohol (53,8%).
En el formato hipermercado, tienen un mayor peso en las preferencias la alimentación envasada (20%), bebidas alcohólicas (21,7%) higiene personal, 18,7%) y droguería (18,4%). Las tiendas de barrio destacan en alimentos frescos (24,8% de consumidores), droguería (12,9%) y ropa y calzado (10,8%). Grandes almacenes tienen un peso importante en muebles y electrodomésticos (16,3%) y juguetes, hobbies y bricolaje (9,9% de consumidores).
Internet es el canal de venta preferido para productos de electrónica (33,4%), juguetes hobby y bricolaje (25,2%). También tienen una gran presencia en ropa y calzado (17,7% de consumidores lo prefieren), muebles y electrodomésticos (14,7%).