Más seguridad y protección de la salud para los trabajadores expuestos a la sílice libre
Unión de Mutuas acogió una jornada sobre la ‘Repercusión de la nueva consideración legal de la sílice libre’, organizada por la Generalitat Valenciana con la colaboración de las principales asociaciones empresariales representativas de los sectores cerámico, fritas y esmaltes, la actividad extractiva, y transporte de mercancías.
El acto se celebró en la sede de Unión de Mutuas, en Castellón, y congregó a más de 170 empresarios pertenecientes a ANFECC, Asociación Nacional de Fabricantes de Fritas, Esmaltes y Colores Cerámicos; Ascer, Asociación Española de Fabricantes de azulejos y pavimentos cerámicos; Arival, Asociación de Empresas de Áridos; Asebec, Asociación Española de Fabricantes de Maquinaria y Bienes de Equipo para la industria cerámica; y ACTM, Asociación de Transportes de Mercancías de Castellón.
En representación de la Generalitat Valenciana participaron el jefe de la Unidad Especializada en Seguridad y Salud Laboral de la Inspección de Trabajo de la Seguridad Social en Castellón, Alejandro Patuel y el jefe del Servicio de Organizaciones Saludables del Invassat, Juan José Puchau.
Asimismo se abordó la inclusión, en 2018, del polvo de la sílice cristalina como agente cancerígeno en el Cuadro de Enfermedades Profesionales y las importantes repercusiones y consecuencias prácticas que tiene para las empresas, con la adopción de implementación de nuevas medidas preventivas tanto de carácter técnico como de vigilancia de la salud de los trabajadores expuestos.
También por parte de todas las entidades empresariales se reconoción esfuerzo y la concienciación sobre los ambientes laborales donde puede inhalarse sílice y se mostraron a favor de aumentar el nivel de protección de la salud y seguridad de los trabajadores, reduciendo al máximo los riegos derivados de las exposiciones a este agente, y previniendo el riesgo de enfermedad profesional.
El jefe de la Inspección de Trabajo en Castellón remarcó que el empresario principal tiene que exigir, dentro de sus instalaciones, el máximo rigor preventivo a las empresas contratadas para el transporte de mercancías que pueden contener o generar sílice cristalina, independientemente de que lleven a cabo intervenciones de larga o corta duración”.