Disponibilidad en los centros logísticos: cómo controlar una variable crítica para la viabilidad del modelo de negocio
La continuidad de procesos se ha convertido en un área de especial preocupación para todo tipo de empresas, por lo determinante que puede resultar un parón en la misma para cualquier negocio, que puede sufrir desde pérdidas económicas hasta materiales e incluso vitales.
¿Qué podría suponer una parada en una refinería? ¿Y que Madrid se quedara sin luz? En ocasiones resulta preferible no imaginárselo. Y es que el peligro real no reside tan solo en que tenga lugar un fallo en el funcionamiento de un sistema, sino en el tiempo que transcurre hasta que el sistema en cuestión vuelve a funcionar; segundos, minutos, horas o en ocasiones meses que pueden ser determinantes para el negocio.
Por ejemplo, actualmente con el 'boom' del comercio electrónico, la garantía de la disponibilidad en los centros logísticos y en el sector de la paquetería, ha pasado a ser una variable crítica para la viabilidad de un modelo de negocio que gestiona a nivel mundial varias decenas de millones de paquetes diariamente. Según los resultados obtenidos en el estudio 'Evolución y perspectivas de e-commerce para 2017', un tercio de los e-commerce espera crecer más de un 30% este año con respecto a 2016.
En este sentido, Amazon acaba de vivir uno de sus records históricos de pedidos diarios con motivo del Prime Day 2017 que tuvo lugar el pasado 11 de julio y donde se encargaron, por ejemplo, más de 3 millones de juguetes a nivel mundial (64.000 en España) y donde se llegó a entregar un pedido en Madrid en 21 minutos.
¿Cómo se lleva a cabo realmente la oferta de este tipo de prestaciones, que parecen casi mágicas? Eaton, proveedor tecnológico para este sector de productos y soluciones para gestión de energía, reitera que es esencial contar con una tecnología que, sencillamente, no falle, y que si sufre un accidente sea capaz de ser reparada en el menor tiempo posible; alineando así sus iniciativas de innovación tecnológica con los parámetros esenciales en la operación de una planta para garantizar la continuidad de un proceso. A este respecto, Eaton refresca una nomenclatura básica con la que toda compañía debe estar familiarizada.
Un MTBF alto 'Que no falle'
Las siglas MTBF hacen referencia a 'Mean Time Between Failures'. Esto es, literalmente, el tiempo medio que transcurre entre un fallo y otro. Cualquier compañía debe tratar de alcanzar con sus sistemas y maquinaria un MTBF tan alto como sea viable, para asegurar que su maquinaria va a estar el mayor tiempo posible funcionando sin problemas.
Un MTTR bajo 'Que se repare rápido'
En este caso las siglas MTTR corresponden a 'Mean Time to Repair/Recover', que hace referencia al tiempo de reparación medio del fallo ocurrido.
La importancia del diagnóstico
Un MTBF tan alto que sea prácticamente inexistente es la situación ideal a la que toda compañía debe aspirar. Sin embargo, los accidentes ocurren y los equipos pueden ser dañados de muy distintas maneras. Toda compañía debe estar preparada para hacer frente a una discontinuidad en la operación de la forma más ágil posible.
Para alcanzar un MTTR bajo, es decir, para lograr reparar el daño acontecido y reactivar el sistema lo más rápido posible, lo primero que toda compañía debe hacer es un diagnóstico de situación rápido y ajustado. ¿Qué máquina ha sufrido el fallo? ¿Qué componente se ha roto? ¿Dónde se encuentra exactamente este componente?
La importancia de la disponibilidad de cambio
Una vez localizado el problema, es preciso valorar la disponibilidad de cambio, es decir, con qué opciones de recambio cuenta la compañía. Cuanto menos 'único' y más 'común' sea el componente a recambiar, mejor, ya que esto garantizará una disponibilidad de recambio casi inmediata. En segundo lugar, los encargados de la tarea de recambio han de enfrentarse al hecho de cómo de difícil es cambiar el componente dañado por su repuesto. La elección de equipos y componentes que estén diseñados para facilitar esta tarea, es esencial a la hora de asegurar la continuidad de negocio.
La seguridad de máquinas y personas, ante todo
Eaton, que pone la seguridad de personas y máquinas en el centro de su filosofía, cuenta con la tecnología Rapid Link de accionamiento distribuido, que dispone de sofisticadas funciones de diagnóstico conectadas mediante comunicación digital al centro de control de la planta y que en caso de ocasionarse un problema permiten identificarlo de inmediato. Además, el concepto constructivo modular de alta estanqueidad de Rapid link, facilita la disponibilidad de un recambio ya que cuenta con un mínimo número de referencias de alta versatilidad fáciles de almacenar. Una vez conseguido el repuesto, la tarea del recambio en sí mismo es fácil e intuitiva ya que Rapid Link se conecta, en lugar de cablearse.
Jose Ignacio Ruiz, Sales Manager Industrial MOEM de Eaton, comenta: “La innovadora apuesta de Eaton se basa en los principios básicos a la hora de asegurar la continuidad de un proceso: asegurar la calidad de los sistemas y componentes para hacerlos lo más resistentes posibles a roturas y que, en caso de sufrirlas, tanto el diagnóstico como el recambio puedan ser llevados a cabo de forma ágil, sencilla e intuitiva. Decenas de miles de unidades funcionando en instalaciones críticas de todo el mundo, con los clientes más exigentes, hablan por sí mismas de lo diferencial de la propuesta que aporta Rapid Link a la tecnología de los accionamientos distribuidos”.