Instalación fotovoltaica sobre una nave industrial
Con este tipo de instalaciones, el propietario de la nave se convierte en un generador de electricidad. La ley (RD 661/2007 de 27 de mayo) obliga a la empresa eléctrica local a comprar toda la producción a un precio tasado durante la vida útil de la instalación, lo cual permite obtener rentabilidades que pueden llegar hasta un 15 por ciento antes de impuestos sobre el capital propio invertido (los bancos suelen financiar hasta un 80 por ciento de la inversión).
Sin apenas gestión, el inversor aumenta la rentabilidad media de su activo y disminuye el riesgo cíclico inherente a la actividad inmobiliaria, con ingresos previsibles y constantes.
La vida útil de este tipo de instalaciones supera los 25 años, durante los cuales el mantenimiento es mínimo y la fiabilidad está garantizada por el propio fabricante de los módulos solares. Solariza trabaja solamente con primeras marcas, que elige específicamente, en función de cada proyecto.
Solariza Energía se ha especializado en instalaciones fotovoltaicas “llave en mano” sobre cubiertas de naves industriales y logísticas de tamaño mediano y grande, a partir de 750 m2 de superficie. La empresa está convencida de las ventajas de este tipo de energía, por tratarse de generación distribuida (electricidad producida en el mismo punto de consumo), evitando las pérdidas asociadas a su transporte.