La patronal UNO analiza las nuevas soluciones en la distribución urbana de mercancías
5 de noviembre de 2012
Durante su ponencia, Zapata señaló que, si bien las administraciones locales tienen en su mano algunas soluciones, éstas son, en general, de tipo restrictivo y coercitivo, al limitar accesos, horarios o tipos de vehículos que pueden hacer un reparto urbano en determinadas zonas de la ciudad. Igualmente, mediante la regulación, como las ordenanzas de movilidad, carga y descarga y similares, las administraciones pueden buscar “ayudar” u ordenar, al menos, las tareas de reparto. Sin embargo, estas soluciones tienen consecuencias limitadas y, casi siempre, con importantes impactos en las productividades de reparto. A continuación, Zapata propuso un abanico de soluciones basadas en experiencias concretas de agentes de la cadena de suministro que pretenden mejorar los niveles de servicio, incrementar las productividades y reducir los costes e impactos medioambientales.
Estas soluciones incluyen las plataformas urbanas de distribución de mercancías, como las experimentadas en Barcelona, en el barrio de Sant Andreu o como la utilizada para dar servicio al barrio de Camas de Málaga, pero se trata de soluciones que encarecen la operación al añadir el coste de la doble manipulación y del espacio físico que ocupan en zonas, además, de coste inmobiliario alto.
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Por último, Zapata introdujo los diferentes vehículos de combustibles alternativos sobre los que los distintos operadores están haciendo pruebas de productividad y valoraciones de los costes de adquisición, explotación y mantenimiento: vehículos propulsados por gas natural vehicular, gas licuado del petróleo, biocombustibles y, especialmente, la familia eléctrica: vehículos de pila de hidrógeno o vehículos híbridos y eléctricos enchufables. Estos vehículos suponen mejoras significativas en cuanto a las emisiones de gases y partículas, pero su limitada disponibilidad comercial, alto precio y escasa presencia en el mercado hace que estén rodeados de incertidumbres sobre su uso continuado y las decisiones para un despliegue masivo de los mismos están pospuestas, de momento.