Mujeres y jóvenes lideran el gasto en e-commerce
Redacción Interempresas
07/06/2024El e-commerce continúa su tendencia al alza en España, consolidando su posición tras el impulso inicial generado por la pandemia. Un reciente estudio realizado por BBVA Research y el Fondo Monetario Internacional (FMI), titulado “Comercio electrónico: un 'clic' no es igual para todos”, revela una notable heterogeneidad en el uso de esta modalidad de compra, diferenciada tanto por categorías de consumo como por grupos demográficos.
Los grandes impulsores del crecimiento del comercio electrónico son, según el estudio, las mujeres y los jóvenes. Estos colectivos muestran una mayor inclinación a realizar compras en línea en comparación con los hombres y los grupos de mayor edad. Este comportamiento se ha acentuado desde el periodo pandémico.
El estudio señala que el comercio electrónico ha registrado un crecimiento sostenido en los últimos años, convirtiéndose en el método preferido para adquirir una amplia gama de bienes y servicios. Esta tendencia, reflejo de un cambio en las preferencias hacia las soluciones digitales, es evidente en la mayoría de los países desarrollados, incluido España. Actualmente, el comercio electrónico representa aproximadamente el 10% del total de pagos por importe y entre el 12% y 14% en número de transacciones en el país.
La pandemia de COVID-19 aceleró temporalmente el comercio electrónico. Sin embargo, una vez levantadas las restricciones, la tendencia de crecimiento regresó a su curso normal. Así, aunque el COVID-19 impulsó un aumento a corto plazo, no provocó un cambio permanente en la tasa de crecimiento del comercio electrónico.
El uso del comercio electrónico varía entre diferentes colectivos de consumidores. Las mujeres incrementaron su uso del comercio electrónico, ampliando la brecha con los hombres a cuatro puntos porcentuales a principios de 2024, frente a dos puntos antes de la pandemia. Los jóvenes menores de 35 años también aumentaron su participación en el comercio electrónico, alcanzando una cuota del 23% del total de pagos. Los consumidores de 35 a 45 años siguieron una tendencia similar, aunque menos acentuada. En cambio, los mayores de 45 años experimentaron aumentos temporales durante la pandemia, pero retornaron a niveles anteriores al COVID-19 a comienzos de 2024.
En cuanto a las categorías de consumo, el estudio identifica tres grupos diferenciados. El primer grupo incluye categorías cuyo gasto en comercio electrónico se aceleró con la pandemia y se mantuvo posteriormente, como textil y calzado, ocio y cultura, mobiliario y equipamiento del hogar, y educación. El segundo grupo comprende categorías cuyo gasto crecía antes de la pandemia, sufrió caídas durante el confinamiento y recuperó la tendencia después, como transporte y gastos en finanzas y seguros. El tercer grupo abarca categorías que experimentaron un impulso temporal durante la pandemia, seguido de una fuerte caída y una reciente recuperación, como alimentos y bebidas, alcohol y tabaco, comunicaciones, y restaurantes y hoteles.
El estudio concluye que, aunque la pandemia impulsó significativamente el comercio electrónico, no todos los cambios de comportamiento fueron permanentes. “Teorías como el comportamiento compulsivo, el atesoramiento y el miedo sugieren que estos cambios fueron temporales”, explican los autores. “La mayoría de los consumidores ya estaban familiarizados con el comercio electrónico, limitando nuevos aprendizajes o cambios de comportamiento. No obstante, los nuevos usuarios, menos familiarizados con el comercio electrónico antes de la pandemia, han incrementado su uso en el periodo post-pandémico, corroborando la hipótesis de que los niveles de experiencia influyen en la permanencia de los comportamientos inducidos por la pandemia”.