El móvil se convierte en monedero
El teléfono móvil no sólo se usa cada vez más para comprar, sino también para pagar, en sustitución de la tarjeta de crédito.
Puede parecer que los comercios y usuarios son de momento escasos, pero la consultora Gartner prevé que 2011 cierre con 141,1 millones de usuarios de sistemas de pago por móvil en todo el mundo, un 38,2% más que el año anterior. Estos usuarios harán compras por un total de 86.100 millones de dólares, un 75,9% más que en 2010.
Es más, aunque los consumidores seguirán prefiriendo de momento las tarjetas de crédito, según un estudio Royal Bank of Scotland junto con las consultoras Capgemini y Efma, el 15% de todos los pagos que no sean en efectivo o transferencias se harán por móvil en 2013. Además, Juniper Research estima que a mediados de la década uno de cada seis estadounidenses utilizará su móvil para realizar transacciones financieras.
Ya hay compañías que están lanzando sus sistemas de pago por móvil. Así por ejemplo, Visa ha desarrollado Paywave y Google ya ha lanzado Google Wallet, que permiten usar sólo el móvil para pagar.
Estos proyectos utilizan la tecnología de momento más extendida: la NFC (near field communications, comunicaciones entre campos cercanos), que permite que el móvil se comunique con un lector que tendrá cada tienda y que accederá a los datos de la cartera digital para comprobar fondos y límites. Así, Google Wallet puede asociarse a una tarjeta de crédito o incluso a vales regalo. Con sólo acercar el móvil a este aparato y después de introducir el código pin, la aplicación descontará el precio de los productos adquiridos.
Hay empresas que están optando por otros métodos: PayPal y Starbucks están desarrollando alternativas que se basan en la lectura de códigos de barras, sistema que tiene la ventaja de no necesitar nuevas terminales para cobros. El sistema de Starbucks sólo se usará en la cadena de cafeterías, pero PayPal está preparando soluciones para el comercio que incluirían la posibilidad de hacer pagos desde cualquier dispositivo y no sólo móviles, además de tarjetas de crédito propia y servicios de publicidad móvil basados en la geolocalización.
El caso español
En España (y después de varias pruebas piloto), las tres operadoras líderes de telefonía móvil, Telefónica, Vodafone y Orange, firmaron este año un acuerdo de colaboración para impulsar el desarrollo del NFC y favorecer así la máxima compatibilidad entre los sistemas.
Entre algunos proyectos que se han puesto en marcha, destaca el de Renfe con Vodafone: se está haciendo una prueba piloto con empleados para usar unos lectores de este tipo, y se espera que este sistema se haga accesible a todos los usuarios en los próximos meses. La Caixa también ha apostado por el NFC, y ha instalado cajeros automáticos -de momento en el distrito 22@ de Barcelona, en Sitges y en Palma- que permiten sacar dinero acercando el teléfono o la tarjeta de crédito, si incorpora esta tecnología. De hecho, tras esta iniciativa de la Caixa, España se ha convertido en el primer país del mundo con cajeros NFC.