Ecorresignados: quienes no quieren formar parte de la tendencia proambiental
De Europa, España no es el país que más destaca por su iniciativa verde. Entre quienes forman parte del colectivo eco y que apuestan por medidas que ayudan a preservar el medio ambiente se encuentran también aquellos que deciden no formar parte de él.
Aunque el mensaje 'eco' está en todos lados (campañas de reciclaje, productos hechos con compuestos orgánicos, packaging biodegradable, cero plásticos, etcétera y etcétera) muchas veces no somos conscientes o no pasamos realmente a la acción. Concretamente España no es el país que luce por ser más proambiental, frente a otros países como del Norte de Europa donde está demostrado que la población es mucho más consciente del impacto positivo que puede generar en nuestro planeta cada pequeño gesto que hagamos.
"La voluntad del consumidor está, pero la racionalidad de la compra impera (sobre la conciencia 'eco')"
Según apunta Neus Soler, profesora de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC, “en España, la conciencia medioambiental no está muy extendida, los consumidores no toman la iniciativa a la hora de emprender acciones, sino que, en realidad se adaptan a normativas (como el pago por las bolsas de plástico)”, afirma la profesora. A lo que Juan Carlos Gázquez-Abad, profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC, añade que “los ecorresignados son el grupo más habitual en España”. Los motivos son varios, pero los que destaca más Gázquez-Abad son los siguientes: El bajo interés institucional por adoptar medidas, la falta de propuestas del sector privado, la situación económica y la racionalidad del consumidor sumado a aspectos educativos y culturales. Sobre lo que el experto concluye que, “la voluntad del consumidor está, pero la racionalidad de la compra impera. Así, solo cuando las empresas puedan ofrecer productos eco a un precio asumible, la sociedad será, poco a poco, más ecoactiva".
De hecho, todavía a día de hoy, un 49 % de la población mundial se “ecorresigna”. Quiere decir que o no se preocupa, o no tiene interés simplemente en saber cómo se puede ser más sostenible. Según un reciente estudio realizado por Kantar Media, en Europa Occidental este colectivo supone el 37 % de los consumidores en total. Y se caracteriza por tener sus propias consideraciones para implicarse en la preservación del medioambiente.
Tras realizarse el estudio, se han considerado 4 tipos de consumidor ecológico: 1. el ecorresignado (el que considera que la responsabilidad ecológica no va con ellos); 2. el ecoactivo (solo el 16 % de los consumidores globales, según el estudio y son los que evitan la carne, las botellas y envases de plástico, y suelen ser activistas ecológicos, etc.); 3. los ecocreyentes (buscan medidas para reducir el impacto medioambiental con medidas varias pero con menos frecuencia que los ecoactivos) y por último, 4. los ecoconsiderados, que no ven el plástico como su “mayor preocupación”.