5 errores que cometemos en la traducción de una página web
Según Hexagone, el 80% de los usuarios pierde la confianza en aquellos negocios que cometen errores en la traducción a otros idiomas de sus páginas web.
Hexagone ha elaborado un estudio del que se desprende que más del 80% de los e-commerce españoles no están preparados para otros idiomas (ni siquiera el inglés), y 3 de cada 4 pierden dinero por culpa de errores de traducción en sus páginas web. Asimismo, el estudio también apunta que el 80% de los usuarios pierde la confianza en aquellos negocios que presentan problemas de adaptación de sus páginas web a otros idiomas.
En esta línea, Hexagone ha analizado 400 comercios electrónicos y ha conseguido detectar 5 errores comunes que cometen los e-commerce españoles en la traducción de sus páginas web:
- Uso de traductores automáticos: El 90% de los comercios analizados utilizan este sistema, que a pesar de haber evolucionado mucho, todavía no es capaz de traducir frases hechas, expresiones o determinados tecnicismos.
- Solo traducen las fichas de producto: Otro error común es el de traducir tan solo las fichas técnicas de los productos, olvidándose de traducir otras páginas importantes de un portal como la del carrito de la compra o la de las condiciones de compra. Un 65% de las empresas analizadas comete este error.
- Traducir solo la web: Aunque es cierto que la página web es el canal más importante, las empresas no deben olvidar que también es necesario traducir otros recursos que facilitan la comunicación, como los newsletters, los mails automatizados, o la atención y servicio al cliente. Un 95% de las empresas comete este error.
- Cambios en la web: Otro error común entre los e-commerce españoles es olvidarse de la traducción de la web cuando se realizan actualizaciones de contenido importante, y el 43% de las empresas analizadas sufre este problema. Siempre que se añada nuevo contenido, éste debe estar adaptado en su versión internacional.
- Diseño: Las traducciones y adaptaciones a otros idiomas pueden afectar, algunas veces, el diseño de la página web. Por ejemplo, un párrafo o un botón pueden cambiar de tamaño por el simple hecho de estar escrito en un idioma u otro. Es importante revisar siempre este aspecto. El 15% de las empresas analizadas tiene problemas con el siseño.