SEG Automotive optimiza su producción de la mano de ZEISS

Gracias a la integración de dos soluciones de última generación de ZEISS, SEG Automotive ha logrado no solo optimizar su eficiencia, sino también garantizar que cada componente fabricado en su planta de Treto cumpla con las exigencias de calidad que requiere un mercado cada vez más competitivo y consciente de su impacto ambiental. Con esta perspectiva, la historia de SEG Automotive no es solo un caso de éxito empresarial, sino un reflejo del papel crucial que desempeñan las empresas automotrices en la construcción de un futuro sostenible.

El sector automotriz no solo está en el centro del cambio debido a su responsabilidad en la producción de vehículos menos contaminantes. También desempeña un papel clave como impulsor de la innovación tecnológica necesaria para alcanzar estos objetivos. La sostenibilidad de la movilidad del futuro depende en gran medida de que las empresas no solo adopten energías limpias, sino también tecnologías avanzadas que optimicen su producción, garanticen la máxima calidad y minimicen el desperdicio de materiales.

En este escenario, SEG Automotive se posiciona como un ejemplo de liderazgo. La compañía no solo contribuye al desarrollo de soluciones que hacen posible una movilidad más eficiente y sostenible, sino que ha implementado cambios internos que demuestran su compromiso con una industria automotriz más limpia y responsable. Con una amplia presencia global y una fuerte apuesta por la innovación, SEG Automotive está revolucionando el sector con componentes como motores de arranque y alternadores para hibridaciones de 48 voltios, así como motores eléctricos para vehículos eléctricos ligeros y bicicletas.

Pero, además de desarrollar productos más sostenibles, SEG Automotive entiende que la transición energética empieza en casa: mejorar la eficiencia de su producción y asegurar los más altos estándares de calidad es parte esencial de su misión. A través de estas tecnologías de última generación, SEG Automotive ha logrado no solo optimizar su eficiencia, sino también garantizar que cada componente fabricado en su planta de Treto, España, cumpla con las exigencias de calidad que requiere un mercado cada vez más competitivo y consciente de su impacto ambiental.

Aquí es donde entra en juego su alianza con ZEISS y la incorporación de herramientas tecnológicas como el Metrotom 1500 y el microscopio electrónico EVO, que han transformado por completo sus procesos de fabricación. La compañía necesitaba un cambio. Un avance que no solo mejorara los tiempos, sino que permitiera detectar, medir y analizar con precisión estructuras internas sin destruir las piezas.

En la planta de Treto, donde SEG Automotive fabrica inversores electrónicos y otros componentes críticos, los estándares de calidad no son solo una meta: son una necesidad. En el corazón de este proceso están los inversores electrónicos, piezas fundamentales en vehículos híbridos y eléctricos, cuya producción exige una precisión quirúrgica; en concreto, la complejidad del control de calidad trae consigo una serie de desafíos entre los que destacan:

• Inspeccionar componentes electrónicos y ensamblajes soldadura por soldadura, químico por químico, requiere un gran esfuerzo.
• Antes de la implementación de la tecnología de ZEISS, el equipo de calidad debía realizar secciones físicas y encapsular las muestras, un proceso manual de más de 8 horas por pieza. Lo que suponía una inversión de tiempo y recursos que comprometía la velocidad de respuesta ante desviaciones en la producción.

Por ello, a la hora de optimizar sus procesos productivos, decidieron apostar por la incorporación del Metrotom 1500, una máquina de tomografía computarizada avanzada, y del microscopio electrónico EVO de ZEISS, empresa tecnológica líder internacional en los sectores de la óptica y la optoelectrónica.

Mediante la incorporación del ZEISS Metrotom 1500, la tercera generación de este sistema de tomografía computarizada, SEG Automotive ha logrado reducir un proceso manual de 8 horas a menos de 2. Permitiendo que los técnicos puedan visualizar el interior de los componentes, medir uniones entre materiales como aluminio y cobre o plástico y metal, y analizar detalles microscópicos de soldaduras sin necesidad de cortar ni encapsular las piezas. Adicionalmente, su capacidad para inspeccionar y medir componentes SMDs (dispositivos de montaje superficial) ha supuesto un salto cualitativo para garantizar la fiabilidad de sus inversores electrónicos.

Por su parte, el análisis detallado con el microscopio EVO desempeña un papel clave en el análisis de químicos sellantes y materiales de interfaz térmica (TIMs), elementos cruciales en el rendimiento de sus productos electrónicos. Por lo que el equipo se ha convertido en una herramienta esencial para evaluar componentes externos, asegurando que cada pieza suministrada cumpliera con los estándares de calidad de SEG Automotive.

La implementación de estas tecnologías no solo mejoró los procesos, sino que permitió a SEG Automotive obtener resultados tangibles:

• Eficiencia: la reducción del tiempo de inspección liberó recursos y mejoró la capacidad de respuesta ante cualquier desviación en la producción.
• Precisión: la calidad de las imágenes y los datos obtenidos permitió un control más riguroso y fiable de sus componentes electrónicos.
• Confianza: los clientes de SEG Automotive reconocen el valor de trabajar con un proveedor que prioriza la calidad y la innovación tecnológica.

Gracias a este proyecto de actualización tecnológica, mientras el mercado global avanza hacia soluciones más sostenibles, SEG Automotive se mantiene en una posición de liderazgo en dicha transición. Aunque la demanda de coches eléctricos no ha alcanzado el nivel esperado, la compañía ve un crecimiento significativo en las hibridaciones ligeras y en la movilidad eléctrica ligera, con sus motores para bicicletas eléctricas y motocicletas ganando terreno en el mercado.

Por todo ello, la colaboración con ZEISS no se detiene aquí. SEG Automotive planea seguir perfeccionando el uso de sus equipos, avanzando en áreas como el análisis de TIMs bajo los módulos de potencia y ampliando el rango de aplicación del microscopio EVO. Es un ejemplo de cómo la cooperación entre empresas puede generar avances significativos en la industria automotriz.

El papel de la industria automotriz en la transición energética

La transición energética es uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo. A medida que el mundo se enfrenta a los efectos del cambio climático, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero se ha convertido en una prioridad global. En este contexto, el transporte, que representa aproximadamente el 25% de las emisiones de CO2 en Europa y el 30% en España, emerge como un sector crítico para cumplir los compromisos internacionales, como los establecidos en el Acuerdo de París o los objetivos climáticos de la Unión Europea. España se ha comprometido a alcanzar la neutralidad climática para 2050, lo que implica reducir sus emisiones totales en al menos un 23% para 2030 respecto a los niveles de 1990, según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). Sin embargo, los datos más recientes indican que el país aún enfrenta un considerable retraso en esta carrera: las ventas de vehículos eléctricos, una de las claves para reducir la huella de carbono del transporte, apenas alcanzaron el 5% del total de matriculaciones en 2023, muy lejos del objetivo del 40% fijado para 2030. A esto se suma la necesidad de abordar no solo el impacto ambiental del uso de los vehículos, sino también el de su fabricación. Según estimaciones de la Agencia Internacional de Energía (IEA), la producción de un coche eléctrico genera un 70% más de emisiones que la de un vehículo convencional, debido principalmente a la complejidad de las baterías y componentes electrónicos. Por ello, no basta con apostar por la electrificación del transporte; es fundamental que las empresas del sector automotriz sean capaces de fabricar vehículos de manera más eficiente y sostenible, reduciendo las emisiones y el consumo energético en cada etapa del proceso.