El formador de botellas de Illig, una gran novedad en el mercado de termoconformado

Por primera vez se presentó a todo el público el recién desarrollado bottleformer BF 70. Botellas para yogures, zumos, bebidas vegetales e isotónicas pueden ser producidas por el sistema de termoconformado de una manera efectiva y con costes optimizados. La posibilidad de trabajar con entradas negativas implica un beneficio sustancial en diseño y funcionalidad en aplicaciones como mermeladas, productos untables y yogures de fruta.

La maquina establece un nuevo standard en el termoconformado en relación al diseño y facilidad de manejo. La máquina BF 70 concebida para la industria láctea, ofrece al usuario los beneficios de cortos tiempos de cambio de molde y equipamiento flexible para la producción de botellas de diferentes formas.

El complejo sistema de termoconformado requiere una perfecta sincronización entre máquina y molde. Esta es una condición esencial para una producción sin fisuras, especialmente en relación a los cortos tiempos de ciclo. Las entradas negativas de las botellas ha sido un reto considerable para los diseñadores de moldes y maquinaria. Botellas con este tipo de entrada negativa sólo se pueden fabricar utilizando moldes inferiores con piezas móviles.

Nuevos secuencias de procesos garantizan una absoluta uniformidad en la distribución del espesor de pared a pesar de la pequeña área original y elevada profundidad del diseño. Cuando se observan las botellas apenas se ve la diferencia entre las producidas por el proceso de soplado y las de termoconformado. Sin embargo, cuando se contempla el peso unitario, se puede constatar inmediatamente, que el peso de las botellas termoconformadas es solamente la mitad de las botellas sopladas.

El Bottleformer BF 70 trabaja a partir de bobina de material. Para facilitar la producción ventajosa, solamente se añade una estación de troquelado con flejes troquel para separar las botellas de la lámina. Como es bien conocido, el material es moldeado partiendo de la bobina de plástico, calentado y moldeado en la estación de moldeo. La lámina es preestirada mecánicamente y se moldea usando aire comprimido esterilizado. Las placas de calefacción por contacto calientan el material paso a paso durante varios ciclos para optimizar la temperatura del termoconformado. Solamente se calientan las superficies del material que será moldeado. Las almas no calefaccionadas minimizan la contracción de la lámina en dirección longitudinal y transversal. En caso de que la máquina se pare, las placas calefactores se retiran automáticamente para prevenir que el material se caliente demasiado.

Utilizando los moldes adecuados en combinación con un preformador de accionamiento por servomotor y ciclos especiales de control del aire de termoconformado, es incluso posible moldear botellas con la estabilidad requerida por el mercado (carga máxima), partiendo de lámina de 1.4 mm de espesor.

El concepto BF 70 se basa en la experiencia de termoconformado de vasos y máquinas para la industria láctea. Son ideas innovadoras en combinación con técnica probada. La máquina está íntegramente fabricada en acero inoxidable (V2A) y por tanto apropiada para vincularse directamente a máquinas ya existentes de llenado y cierre de las centrales lecheras.

La movilidad de los moldes y la zona de entrada de lámina posibilitan una salida ordenada de las botellas. Generalmente en dos hileras, en sentido transversal al sentido de avance de la máquina. Debido al espacio requerido para la apertura del molde, el área de termoconformado disponible puede ser utilizada hasta para 20 cavidades, dependiendo de la forma y diámetro de la botella.

Las botellas pueden ser decoradas, mediante un ‘sleeve’ que se acopla a la botella desde abajo o a continuación del proceso de llenado. Para una decoración posterior se emplea una etiqueta llamada ‘roll fed’ en lugar del ‘sleeve’. Es más económico, sin embargo, las botellas deben estar alineadas una detrás de otra (como en una máquina de etiquetas convencional) y no puede ser utilizado debido a los bajos valores de contracción (15 por ciento), en botellas entalladas.

Después del troquelado de las botellas, queda una red de desperdicio que puede ser molida y reciclada. Los importes de su reciclado reducen los costes de material. Las botellas son selladas con rondas de aluminio previamente torqueladas. Su diámetro es algo más grande que la boca del cuello de la botella.

La línea trabaja a una velocidad de 25 ciclos/minuto. 20 botellas por ciclo equivale a un total de aproximadamente 30.000 botellas/hora, similar a una línea convencional de llenado y sellado.

Otro beneficio de la botella termoconformada es su borde exterior, que facilita el sellado y ofrece una superficie de sellado plana, ofreciendo un cierre seguro de la botella.