Biocidas para pintura
Los formuladores se debaten entre las exigencias regulatorias, la mayor conciencia ecológica de la sociedad y la efectividad de sus productos
Es innegable que los biocidas son productos de los cuales no podemos prescindir. Su acción preservadora es necesaria en múltiples industrias, y la de la pintura es una de ellas. No obstante, de un tiempo a esta parte, y debido fundamentalmente a las cada vez más exigentes medidas regulatorias de la Unión Europea, muchas empresas han decidido abandonar su producción y su distribución, pues se hace cada vez más difícil cumplir con una normativa que, muchas veces, impide sacar al mercado productos que realmente sean eficaces. En Industria de la Pintura hemos sido testigos del abandono de la comercialización de estos productos por parte de varias firmas pero, al tratarse de algo imprescindible, aún quedan empresas que luchan por innovar y sacar al mercado biocidas eficaces y cada vez más respetuosos con el medio ambiente. Una de ellas es Thor, desde donde corroboran que “debido a la alta exigencia de la normativa que regula los productos biocidas, cada vez es más difícil y costoso el proceso de autorización de nuevas sustancias, por lo que la tendencia del mercado va hacia el uso de combinaciones de sustancias ya existentes”.
A las restricciones regulatorias se suma una sociedad cada vez más concienciada en cuanto a la protección de la salud y del planeta. En este contexto, los consumidores tienden a la búsqueda de los llamados productos “verdes” en muchos ámbitos de su día a día. “Sin embargo, en el sector de las pinturas, estudios de laboratorio demuestran que estos son poco o nada eficaces y, además, tienen un coste mucho más elevado”, apunta Vanessa López, Microbiology Lab. Manager de Thor Especialidades. A ello hay que añadir el incremento de los costes experimentado en general por todo tipo de materias primas, como consecuencia de la guerra de Ucrania, la inflación y, según afirma esta especialista, también ”de la menor demanda de producto para fabricar”.
In-can y en película seca
En película seca las moléculas más utilizadas son también isotiazolinonas como la octiltilisotiazolinona (OIT) o la dicloro-octiltilisotiazolinona (DCOIT), “pero también se utilizan el iodopropargilbutilcarbamato (IPBC), el diuron y la terbutrina. Las isotiazolinonas son moléculas con una amplia eficacia a dosis muy pequeñas y con un coste relativamente bajo”, continúa la responsable del Laboratorio de Microbiología de Thor, explicando también que “el IPBC es muy buen fungicida, pero actualmente su coste es elevado debido a su alta demanda para el área médica. Y, si hablamos de los dos alguicidas (el diuron y terbutrina), su principal ventaja es su eficacia frente a alternativas de menor eficacia y mayor coste”.
Producto: Thor AMME
Dentro de la gama Thor AMME, lo último que ha desarrollado esta firma son una serie de productos de protección en película desarrollados especialmente para evitar el nuevo etiquetado que afecta a la octilisotiazolinona (OIT) y a la dicloro-octilisotiazolinona (DCOIT) después de los cambios en el SCL de la 15ª ATP.
Las isotiazolinonas son moléculas con una amplia eficacia a dosis muy pequeñas y con un coste relativamente bajo