Arkoslight lanza Rhino, su nuevo bañador de suelo
Rhino, diseñado por Rubén Saldaña, director de producto de Arkoslight, es un bañador de suelo que sobresale ligeramente de la pared y proyecta la luz oblicuamente, de manera limpia y directa. Con ello, rompe con dos dogmas de diseño en este tipo de luminarias: renuncia al empotramiento absoluto y evita dirigir el haz al exterior apoyándose en superficies de rebote. Esto le confiere la ventaja de ser una luminaria con una eficiencia lumínica destacable -entre sus alternativas- y la define desde el punto de vista estético.
Formalmente, Rhino es el resultado de una transición natural entre una forma circular en la pared que esconde la parte activa de la luminaria (equipo y disipación empotrados) y la lente que corona el conjunto óptico y determina la salida del haz de luz. Esta plasmación formal resulta en un diseño orgánico que, sin embargo, es la manera más pura, minimalista y sencilla de resolver la unión entre las dos geometrías fundamentales de esta pieza. Así pues, su apariencia no es gratuita sino estrictamente funcional, justificada y lógica. Con un perfil mínimo, y perfectamente integrado en el plano de la pared, Rhino sobresale levemente a modo de un volumen de estética plástica, que refiere imaginariamente a una presión desde el interior del muro.