Entrevista a Jesús Marset, presidente de Marset Iluminación (Premio Nacional de Diseño 2015)
La empresa Marset Iluminación acaba de recibir el Premio Nacional de Diseño 2015 de la mano del Ministerio de Economía y Competitividad. La Asociación Española de Fabricantes de Iluminación, Anfalum, ha querido entrevistar a su presidente Jesús Marset, para conocer las claves de este reconocimiento y la visión que tiene esta empresa de la labor que viene realizando desde hace años la asociación.
Nuestra más sincera enhorabuena desde Anfalum por la obtención del Premio Nacional de Diseño 2015. ¿Cuáles son sus impresiones sobre este reconocimiento?
Es un premio que reconoce, sobre todo, una trayectoria, una regularidad en innovación y diseño, en definitiva, la calidad de nuestro trabajo. Somos conscientes que esto nos debe hacer más humildes que nunca aunque es cierto que desde fuera nos dicen que vamos por el buen camino. No debemos dejar de hacerlo con la misma insistencia y criterio. Tenemos claro que para seguir creciendo debemos mantener la excelencia y también disfrutar de los pequeños éxitos de cada día, y este premio es uno de ellos.
¿Cuáles son los valores por los que, a su juicio, le han dado este prestigioso premio a Marset?
En palabras del jurado que nos ha otorgado el premio, valoran de Marset que “sus diseños en el ámbito de la iluminación establecen un importante elemento estratégico empresarial y constituyen un eje transversal que une producto, comunicación y empresa, hasta alcanzar comportamientos sostenibles y responsables”, destacando también “el crecimiento excepcional de la entidad en los últimos años, su fuerte cuota de exportación y la calidad de sus diferentes colecciones”.
Háblenos de los momentos más importantes para Ud. de estos 73 años al servicio de la iluminación y el diseño…
Una empresa es un recorrido de luces y sombras. La oscuridad se hizo a raíz del desgraciado fallecimiento de mi hermano en el año 83 viajando a la feria de Madrid, donde inmediatamente recibimos el apoyo incondicional de todos los fabricantes. También hay luces y desde hace ya muchos años la incorporación de mis hijos Javier y Carlos a la dirección de la empresa ha sido una de ellas.
Nuestra vocación es hacerlo bien cada día, estando atentos a los cambios tecnológicos, pensando en las personas que van a utilizar nuestros productos. Somos conscientes que no vamos a salvar el mundo fabricando lámparas pero quizás lo podemos hacer un poco más interesante.
Marset es miembro de Anfalum desde prácticamente sus orígenes, ¿qué beneficios le ha aportado pertenecer a esta asociación y cuál es su nivel de satisfacción?
Anfalum, como patronal del sector, ejerce de lobby de los intereses de las empresas que lo conforman, participando en las decisiones normativas que nos afectan y dándolas a conocer entre los asociados. Tener voz y voto en la organización europea de los fabricantes y la posibilidad también de influir en los grandes eventos feriales del sector.
Creo que deberíamos plantearnos muy seriamente en Europa exigir elevar el nivel del producto de iluminación que se consume, implantando la necesidad de la aprobación de la normativa ENEC por parte de laboratorios oficiales. Sólo de esta forma nos garantizaremos una competencia leal y de calidad.
La eficiencia energética es un valor en alza desde hace años, pero ahora se habla también de otros conceptos más avanzados como el diseño eficiente, la ‘human centric lighting’ o el Internet de las Luces. ¿Qué productos ofrece Marset en estas nuevas líneas de innovación?
Efectivamente, trabajar con la luz implica un consumo de energía y desde siempre hemos sido sensibles a la eficiencia energética. Tratándose en nuestro caso de una empresa de iluminación decorativa, debemos siempre tratar de encontrar el equilibrio entre la estética, la funcionalidad y la calidad de la luz. En los últimos años nuestros equipos de diseño tienen muy interiorizado la utilización de la tecnología LED así como la compatibilidad con lo que nos ofrecen las tecnologías de internet para el control de las mismas.
Existen varios ejemplos en las últimas colecciones, como la Ginger o Polo, diseño de Joan Gaspar, o la FollowMe, de Inma Bermúdez, una lámpara portátil, de LED y con baterías recargables.
