Grandes superficies aptas para forestar

La Argentina es un país con un alto potencial para la forestación. Su geografía extendida de norte a sur en más de 4.000 kilómetros, permite la implantación de diferentes especies.
Las precipitaciones abundantes y confiables, al igual que el clima y los distintos tipos de suelos ayudan a las forestaciones con un alto ritmo de crecimiento. A pesar de que la Argentina tiene 20 millones de hectáreas con buena aptitud forestal, hasta la fecha se plantaron cerca de un millón, las zonas de mayor importancia para la implantación de bosques son: la provincia de Misiones, el litoral del río Uruguay en Corrientes y Entre Ríos, la Patagonia y el Delta del Paraná.

Existen otras zonas interesantes para la actividad forestal ubicadas en Córdoba, Mendoza, Buenos Aires y el Noroeste, que pueden ser analizadas por los potenciales inversores forestales, ya que sus posibilidades resultan atractivas para los emprendimientos con fines particulares.
En la mayor parte de las regiones productivas la implantación forestal se realiza sin la necesidad de tareas de sistematización de suelos, desmontes u otras que encarecen los costos de plantación.
Existe información precisa sobre el potencial forestal de cada área productiva a través de mapas de aptitud de uso de los suelos.

La legislación argentina implementa un sistema de subsidios, no reintegrable, para la implantación y asimismo no impone restricciones ambientales que limiten la actividad forestal, que es considerada altamente beneficiosa para el ambiente.

En nuestro país hay una profunda conciencia tanto en el sector público como en el privado de las necesidades de preservar el ambiente. Por esta razón en los últimos años se ha promocionado la actividad forestal por considerarla beneficiosa para el medio ambiente, pero en general, al igual que en otros países, no se promocionan la deforestación de bosques nativos para futuras implantaciones.

Las condiciones de clima y el suelo permiten lograr en la Argentina altas tasas de crecimiento de los bosques implantados y reducidos turnos de corte, que se ubican entre los mejores del mundo. Los recursos humanos son sumamente satisfactorios para el desarrollo de la actividad forestal y la infraestructura general del país es adecuada para cualquier proyecto de desarrollo forestoindustrial. Se considera que los costos internos seguirán disminuyendo en el futuro.
El análisis económico es sumamente satisfactorio para la actividad forestal, en virtud del valor de la tierra, los costos de implantación y la posibilidad de venta o procesamiento de la madera con diferentes fines.

Por ello debe remarcarse que el sector forestal ofrece una de las mejores oportunidades de inversión en la Argentina, tanto por su potencial natural como por la facilidad para la coordinación vertical de los procesos productivos. Estos factores le otorgan al sistema forestal una alta competitividad.