THINK-LOCAL: Comunicación efectiva de la integración vertical como estímulo al consumo de productos primarios locales
El cooperativismo y la integración vertical (control y trazabilidad de todo el proceso productivo, del sector primario al consumidor final) constituye una alternativa de valor para las empresas del sector primario para hacer frente a la fragilidad del sector agrario, permitiéndoles posicionarse en diferentes mercados y ser más competitivas. Por ello, BonÀrea Corporación y el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) trabajan en un proyecto para estudiar qué percepción tienen los consumidores sobre la marca y sus espacios de compra.
BonÀrea Agrupa, grupo de la empresa Corporación Alimentaria de Guissona (CAGSA), realiza y controla toda la cadena alimentaria, del campo al plato. Para dar más valor a este hecho, forma parte del Grupo Operativo THINK LOCAL que se centra en la transmisión al consumidor final de los valores de una integración vertical ética y responsable que favorezca el consumo de productos locales y que aporte valor al origen del producto y la producción primaria.
BonÀrea y el IRTA realizan el estudio del comportamiento del consumidor desde un enfoque multidisciplinar, focalizado tanto en las bases cognitivas individuales como en las inconscientes con el objetivo de inducir cambios conativos a corto plazo, especialmente en la población menor de 30 años (generación Y o Millennial).
Este Grupo Operativo generará nuevo conocimiento sobre varios aspectos, algunos claramente explotables desde una perspectiva comercial, otros más relacionados con aspectos sociales e incluso algunos de interés para la propia administración.
Las principales aportaciones de este proyecto en el estado actual de la ciencia y del conocimiento serán:
- Descripción y análisis de los procesos de selección de alimentos tanto en los canales tradicionales como en los digitales desde una perspectiva holística multidisciplinar.
- Estimación y análisis de la coherencia entre lo que los individuos dicen que hacen, lo que piensan que hacen y lo que hacen en realidad, es decir una mejora en el conocimiento y comprensión del comportamiento alimentario individual.
- Análisis del papel real que la producción local juega en la selección y consumo de alimentos.
- Comprensión de los procesos racionales y emocionales que dirigen la elección de alimentos en general y de los productos locales en particular.
- Desarrollo de una metodología validada que permita diseñar estrategias de marketing más orientadas al
- consumidor final y por lo tanto más efectivas.
- Mayor conocimiento de los “Millennial”, de sus valores y de sus motivos y barreras a la hora de seleccionar y consumir alimentos.
- Análisis de la relación entre medidas explícitas (auto-reportadas) e implícitas (neurociencia) y de la utilidad de estas últimas para predecir el comportamiento del consumidor.
- Valoración de la eficacia de medidas observacionales como la etnografía a la hora de estudiar el comportamiento real del consumidor.
- Cómo determinar la imagen de una marca y de los valores que transmite tanto a compradores de la
- misma como no compradores.
- Guía para el diseño y la optimización de los espacios de compra tanto físicos como digitales y cómo ajustarlos a las necesidades y expectativas de sus usuarios para conseguir mejorar la experiencia de compra de forma global.
- Análisis detallado del impacto del turismo industrial en los resultados de una compañía.
El proyecto está financiado a través de la Operación 16.01.01 de Cooperación para la innovación del Programa de desarrollo rural de Cataluña 2014-2020 del Departament d'Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural de la Generalitat de Catalunya, así como por los Fondos Europeos Agrícolas de Desarrollo Rural (FEADER).