Un cuarto de siglo que ha dado mucho de sí

“Yo he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia”. Parafraseando al replicante Roy Batty en la película Blade Runner, desde Grupo Aire Limpio, a punto de cumplir nuestro primer cuarto de siglo, hemos tenido la oportunidad de ver la increíble transformación que ha vivido el sector inmobiliario en esos años. Confiamos en que los logros alcanzados y los que están por venir, no se perderán, como lágrimas en la lluvia…

En los últimos años observamos en el sector inmobiliario un claro viraje hacia la calidad, entendida en un sentido muy concreto, con mayores exigencias por parte de los usuarios en las áreas de salud, tecnología, servicios, etc. Y como consecuencia de ello, los activos fijos sufren obsolescencias más rápidas que obligan necesariamente a invertir en bienes de capital –CAPEX-, si no se quiere perder el tren. Los activos refugio tradicionales compiten ahora con otros más innovadores, que deben estar también en el punto de mira.

Vivimos cambios profundos y parece claro que la irrupción de la sostenibilidad y la salud, con innovaciones significativas en diseño, construcción y gestión, unidas al impacto de la tecnología, ya no tendrán vuelta atrás.

Esta transformación será aún más evidente con la materialización de una serie de normativas y best practices que pronto serán una realidad. Por poner solo algunos ejemplos, estarían la inminente entrada en vigor de la EPBD de eficiencia energética, la aplicación de la Taxonomía europea, los criterios ESG, las exigencias de información...

Resumiendo, estos cambios ya forman parte del sector, y hay que afrontarlos si se quiere mantener el posicionamiento empresarial. El liderazgo estará en manos de aquellas compañías que se adelanten, tomando decisiones con celeridad.

En Grupo Aire Limpio, cuando iniciamos nuestra trayectoria hace 25 años, en 1999, ya vislumbrábamos estos cambios y apostamos por ellos. Ahora, viendo al sector inmerso en nuestra visión, estamos convencidos de que este nuevo paradigma permitirá importantes oportunidades, pero también exigirá nuevas capacidades, algunas intuidas y otras, insospechadas.

Aire Limpio nació en las postrimerías del siglo pasado, focalizada en la calidad del aire interior, con equipos de ventilación, purificación, filtración y monitorización CAI para los sistemas HVAC de los edificios. 25 años después, más de 500 edificios corporativos y más de 600 colegios se apoyan en nuestras tecnologías, no solo para mejorar la salud y la productividad de sus ocupantes, sino también para optimizar sus consumos energéticos y reducir emisiones. Nuestros sistemas monitorizan más de 3.000.000 de m² de oficinas y pronto verá la luz una nueva marca del grupo, Aura, centrada en la mejora de la monitorización y control de los elementos electromecánicos de los edificios.

También hemos reducido el riesgo de contagios en más de 600 entornos de aislamiento, y en más de 300 hospitales de toda España. Nuestra experiencia en el ámbito sanitario nos llevó a crear Ambisalud, primera empresa española certificada ISO 9.001 e ISO 14.001 por AENOR para la “inspección de calidad ambiental en interiores” centrada en edificios, quirófanos y salas de ambiente controlado en hospitales. Hoy, más de 10.000 inspecciones de calidad del aire en hospitales y edificios corporativos y comerciales nos avalan, y contamos con el respaldo de un laboratorio propio, Aire Interior S.L., que nos permite controlar internamente este tipo de análisis, mejorando así el servicio a nuestros clientes.

Ya en esta década, hemos apostado por otros servicios, imprescindibles a la hora de abordar las políticas empresariales de ESG, cuyo punto de partida fue la orientación medioambiental y de RSC del negocio.

Quizá uno de los más novedosos sea el realizado desde Commtech, el Commisioning, del que ya hemos realizado más de 1.250 proyectos en todo tipo de edificios, y que garantiza, por poner solo un ejemplo, que un área tan relevante como las instalaciones electromecánicas de los Centros de Proceso de Datos no sólo funcione y sea mantenida con la máxima eficiencia dictada por los requerimientos operativos de la propiedad, sino que también proporcione las más altas cotas de seguridad y fiabilidad, colaborando en el impulso de la transición digital.

Finalmente, facilitamos la gestión de certificaciones medioambientales de edificios a nuestros clientes, un área que ha evolucionado y ahora contempla el bienestar de los ocupantes en un sentido mucho más amplio. Un buen ejemplo son las certificaciones WELL, en las que nuestra filial ACSOS es la única PTO (Performance testing organization) de España, con 4 agentes acreditados. Fieles a las ventajas de este tipo de certificaciones, nuestras oficinas ya poseen la Well Performance Rating, que mide y valora el impacto directo de un espacio en la salud y el bienestar de sus ocupantes.

La formación continua y la innovación nos han permitido desarrollar nuevas tecnologías y soluciones para nuestros clientes, enfocadas en la mejora de la calidad del aire y la eficiencia energética. Colaboramos en proyectos de I+D con instituciones líderes para asegurar que nuestras prácticas y productos cumplan con los más altos estándares de calidad y eficiencia. Y llevamos más de 4.000.000 M€ invertidos en diferentes proyectos, desarrollados en colaboración con CIEMAT, CSIC, CDTI…

Nuestro compromiso actual es seguir liderando la industria con soluciones eficientes e innovadoras que mejoren el bienestar de las personas, la fiabilidad de las instalaciones y la descarbonización de los edificios, al menos, durante otros 25 años más.