Anove presenta un informe sobre la aportación de la mejora vegetal en España
La Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (ANOVE) ha presentado un amplio informe titulado "Aportaciones de la mejora vegetal en España: consecuencias sociales, económicas y ambientales de la obtención vegetal", elaborado por el Instituto Cerdá. El estudio analiza el impacto social, ambiental y económico que ha generado el sector obtentor a lo largo de la cadena de valor en los últimos 30 años.
En este estudio se ha utilizado una metodología para cuantificar estas aportaciones en las fases de producción, transformación, distribución y consumo a través de indicadores. Según el informe, la mejora de semillas y plantas de vivero aporta a la economía española casi 1.000 millones de euros anuales. El sector obtentor ha hecho posible la creación de unos 428.000 empleos en el periodo 1990-2017, es decir, casi 16.000 puestos de trabajo anuales, tanto de forma directa como indirecta.
Por otro lado, la I+D+i que realiza el sector obtentor es imprescindible para el sector agrario. Según se desprende del informe, este trabajo ha permitido adaptar variedades a territorios donde antes no se cultivaban, ha mejorado la tolerancia a las condiciones climáticas extremas, ha aumentado la protección contra plagas y enfermedades y ha multiplicado el rendimiento de las explotaciones reduciendo los costes.
La directora general de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), Esperanza Orellana, ha participado en la jornada de presentación del informe y ha subrayado el papel insustituible que desempeña la mejora vegetal, desde el primer eslabón de la cadena, para alcanzar los retos de los sistemas alimentarios sostenibles. También ha valorado su contribución para poder cumplir con los objetivos del Pacto Verde Europeo y la estrategia “De la granja a la mesa”, y con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
La directora general ha detallado que el MAPA trabaja para desarrollar el marco normativo que favorezca las inversiones necesarias que permitan incrementar los rendimientos de las producciones, con el uso de menos insumos y sin incrementar las superficies de cultivo. Según ha recalcado, el objetivo es poner la innovación al servicio de la sostenibilidad agraria.
La mejora vegetal se presenta como una de las herramientas más potentes para conseguir estos objetivos, por lo que existe el firme compromiso de apoyar la regulación a nivel europeo de las nuevas técnicas de mejora genética, manteniendo siempre la seguridad de los alimentos de cara al consumidor final. Para la directora, la mejora vegetal y el empleo de las nuevas tecnologías en este terreno constituyen un gran beneficio para el conjunto de la sociedad.
De igual forma, Orellana ha destacado el papel de los organismos públicos de certificación de material vegetal de reproducción, que aseguran que las innovaciones varietales lleguen al agricultor con calidad.
Puede acceder al resumen ejecutivo del informe a través de este enlace