Las provincias de Cádiz y Sevilla albergan este año casi 9.000 hectáreas de cultivo

En el terreno agronómico cabe destacar la autorización excepcional concedida por el Ministerio de Agricultura para el control de cásida a través de productos fitosanitarios formulados a base de Acetamiprid.

Azucarera iniciará la campaña remolachera en Andalucía mañana miércoles, 26 de mayo, en la que se espera recoger en torno a 540.000 toneladas de remolacha líquida hasta primeros de agosto, plazo estimado de finalización.

Este año se ha adelantado la apertura del arranque debido a la madurez de la raíz, y se espera alcanzar una riqueza media de 17,5 grados de polarización, según las últimas muestras realizadas. En cuanto a las toneladas tipo por hectárea se estiman de media 88 en regadío y 47 en secano.

"El cultivo de la remolacha en Andalucía se ha convertido en uno de los más rentables y atractivos para los agricultores del sur como demuestra la evolución de hectáreas que se han registrado en los últimos años", señalan desde Azucarera.

En esta campaña han sido 8.876 hectáreas las que se han sembrado, un 14% más que el año pasado, que ya se había incrementado un 20% respecto a 2019. Ha sido el cultivo de secano el que más ha crecido, mil hectáreas respecto al año pasado, situándose en esta campaña en 4.437 hectáreas, prácticamente igual que las sembradas en regadío, 4.439.

Cádiz y Sevilla son las dos provincias remolacheras por excelencia en el sur, concentrando 4.787 hectáreas la campiña gaditana, de las cuales 3.578 corresponden a secano y 1.209 a regadío, y el resto se ubican en la provincia de Sevilla, con 859 hectáreas de secano y 3.230 de regadío.

Azucarera tiene entre sus objetivos seguir incrementando la superficie contratada en el sur mediante una oferta de servicios y modelos de contratación diversificada y adaptada a las necesidades de los agricultores. Por esta razón, se está ejecutando una inversión en la fábrica de Guadalete de 7,5 millones de euros para mejorar la eficiencia energética y la sostenibilidad de la planta e incrementar la capacidad de molienda diaria.

Según ha informado ASAJA Sevilla, la Dirección General de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha autorizado de forma excepcional la comercialización y uso de productos fitosanitarios formulados a base de Acetamiprid 20% (SP) P/P contra el control de cásida o chinche de la remolacha azucarera (cassida vittata).

Esta autorización sólo es para las provincias de Sevilla y Cádiz y tendrá vigencia desde el 20 de mayo hasta el 7 de agosto de 2021, ambos inclusive.

La Cásida o chinche de la remolacha, Cassida vittata (Villers, 1789) (Coleóptera: Chrysomelidae), es la principal plaga que afecta a este cultivo en siembra otoñal, provocando una severa defoliación en aquellos casos en los que se dan condiciones favorables para su desarrollo y no se realiza un control eficaz de la misma, máxime cuando, por las mismas circunstancias de falta de eficacia de los actuales productos autorizados en el cultivo, se concentran los ataques de lixus y orugas defoliadoras al final del cultivo, lo que se traduce en importantes mermas de producción.

Para el control de esta plaga, solo se encuentran autorizados en el Registro Oficial de Productos y Material Fitosanitario (ROPMF) productos pertenecientes a la familia química de los piretroides, habiendo sido prohibidas recientemente sustancias activas como Clorpirifos, la cual presentaba mejor eficacia. Los piretroides presentan muy bajas eficacias, ya que las poblaciones están aumentando exponencialmente desde que Clorpirifos ha dejado de emplearse.

Por otra parte no se conocen enemigos naturales con capacidad de control sobre las poblaciones de cásida que puedan utilizarse como método de control biológico alternativo a la lucha química.

Por ello distintas Comunidades Autónomas, desde sus Direcciones Generales correspondientes, han solicitado esta autorización excepcional.