Alimentación líquida: análisis económico comparado

Un sistema AL incluye siempre una ‘cocina’ para la preparación previa de la sopa a partir de las materias. En relación al sistema de alimentación en seco, podemos señalar algunas características diferenciales:

- En la granja se dispone de recursos para hacer la mezcla de las materias.

- Se puede incluir en la mezcla materias húmedas.

- Si se incluye pienso en la mezcla, éste no será granulado.

La implantación de los sistemas AL es muy baja en nuestro país (en relación al pienso seco convencional). Estimamos que no supera el 3% del pienso total consumido. En otros países del norte de Europa, el nivel de implantación es muy superior. El consumo de pienso preparado en la granja (mayoritariamente sopa), se mueve en porcentajes entre el 30 y el 60% en los principales países productores del norte de Europa (Dinamarca, Alemania, Francia y Holanda). Algunos factores favorecen este mayor nivel de implantación:

- La climatología que dificulta el secado de los cereales y favorece el consumo de cereales húmedos.

- La disponibilidad de cereales propios y/o cercanos a la granja, que hace menos atractiva la compra de pienso a la fábrica (con ahorro en transporte y otros gastos).

- La estructura y propiedad familiar de las granjas que favorece las inversiones requeridas por los sistemas AL.

- La disponibilidad de subproductos de la industria alimentaria y las facilidades de transporte (en Holanda mediante transporte fluvial).

- Otros (racionamiento de los animales en Italia, etc.).

Además de las ventajas medioambientales derivadas de reciclar los subproductos de la industria alimentaria.

Los inconvenientes serían los derivados de asumir en la granja el proceso de ‘producción’ del pienso (que de forma habitual asume la fábrica de pienso): mayores inversiones, aumento de la complejidad en la gestión del pienso (aprovisionamiento, formulación, producción, control calidad), necesidad de personal más capacitado, dependencia técnica del proveedor del sistema, etc.

La muestra utilizada para el análisis incluye un grupo de seis explotaciones que utilizan los dos sistemas de alimentación en cebo: sistema AL y pienso seco (AS):

- Explotaciones de 500 a 1.000 madres: promedio 800.

- Cebos de 1.000 a 5.000 plazas: promedio 3.500 – 4.000 plazas.

- Porcentaje de AL en cada explotación: del 20 al 80% (el resto pienso seco). Promedio 60% AL.

- Composición de la sopa muy diversa: desde únicamente materias convencionales hasta un porcentaje alto (más del 50%) de subproductos y maíz húmedo.

- Datos de 2010 y 2009.

- En cada explotación, el peso de entrada-salida de los animales en el cebo es similar en los dos sistemas de alimentación.

Esta muestra tiene la ventaja de analizar las dos opciones (AL y AS) en las mismas explotaciones (mismo entorno, gestión, etc.). Los inconvenientes de la muestra provienen del hecho que es una muestra relativamente pequeña.

Los resultados obtenidos se deben leer con las necesarias reservas, aunque creemos que señalan claramente algunas conclusiones.

- Crecimiento de los animales (gramos diarios).

- Índice de conversión del pienso consumido.

- Precio del pienso consumido.

- Porcentaje de mortalidad.

Para la valoración económica de las diferencias entre los dos sistemas, hemos usado los siguientes valores (fase de cebo):

- Costes fijos (e integración) 12 euros/cerdo.

- Coste pienso: 53 euros/cerdo (valor razonable con los precios del 2010).

- Valor cerdo de baja: 80 euros.

- Las diferencias entre los dos sistemas (AL y AS)

- La valoración económica de las diferencias, en euros/cerdo.

- Crecimiento: En la muestra analizada se observan valores muy diferente para las explotaciones, aunque excepto en un caso, siempre son favorables al sistema AL. El incremento de 40 gramos diarios en el crecimiento suponen una reducción de 7-8 días en el ciclo de cebo, con un valor de 0,7 euros/cerdo.

- Precio pienso: Se observan valores muy distintos en la muestra. Los precios más favorables a los sistemas AL se dan en las granjas que consumen mayor porcentaje de subproductos. En conjunto, la reducción del precio del pienso es de unos 10 euros/Tm, valorado en 2,4 euros/cerdo.

- Mortalidad: En todas las granjas (excepto una), la mortalidad es favorable en el sistema AL. Las diferencias están en torno a 0,5 - 1% en casi todas. La disminución en conjunto de 0,7 puntos en la mortalidad, supone una ventaja de 0,6 euros/cerdo.