Avicon: Modelo de sostenibilidad, crecimiento y rentabilidad

“Satisfacer las necesidades de las generaciones actuales, sin comprometer las necesidades de las generaciones futuras”. Esta es la definición de sostenibilidad, palabra de reciente creación pero seguramente de las más usadas en los últimos años. La sostenibilidad se basa en tres pilares, que son: protección medioambiental, crecimiento económico y desarrollo social. Resumiendo, la sostenibilidad debe satisfacer las necesidades de las generaciones actuales y futuras garantizando el equilibrio entre crecimiento económico, cuidado del medioambiente y bienestar social.

Los factores en los que se basa la protección del medio ambiente son los siguientes: evitar el cambio climático, velar por los recursos hídricos y el uso de la tierra y cuidar los flujos de fósforo y nitrógeno (eutrofización del suelo). Todos estos factores se engloban bajo el epígrafe 'Huella Ambiental', que podría definirse como el impacto humano en el medioambiente y desde 2018, tenemos definido para los fabricantes de piensos la metodología a utilizar para el cálculo de la huella ambiental y los planes de sostenibilidad que se deben de fijar en las fábricas a medio (año 2030) y largo plazo (año 2050). Esta huella puede ser cuantificada, valorada, medible en definitiva, y eso es lo importante para ponerse manos a la obra e ir obteniendo poco a poco resultados positivos. Vamos a estudiar cada uno de los parámetros que más influyen en la huella ambiental y como estamos tratando cada uno de ellos.

Eutrofización del suelo (eliminación de fósforo y nitrógeno)

El fósforo (por incorporación de fosfatos en los piensos) y el nitrógeno (debido a la metabolización de la proteína que aportamos en la alimentación) son dos elementos que se eliminan en las deyecciones de los animales y contaminan los suelos provocando la eutrofización, que es uno de los problemas más graves para las aguas con crecimientos de algas y plantas por el aumento de nutrientes (fósforo y nitrógeno) necesarios para la fotosíntesis, deteriorando las formas de vida acuática en ríos y lagos y disminuyendo la disponibilidad de agua potable con efecto sobre la salud humana.

Pues bien desde la fábrica estamos utilizando aditivos para disminuir la utilización a gran escala de fosfatos y compuestos nitrogenados en nuestros piensos. En cuanto al fósforo, utilizando fitasas de última generación y sobredosificando las mismas, de esta manera la utilización de fosfatos es mínima, ya que las fitasas utilizan el fitato no digestible que se encuentra en las materias primas (cereales fundamentalmente).

En cuanto al nitrógeno, trabajando con niveles más bajos de proteína, utilizando para ello todos los aminoácidos disponibles a nivel comercial, que cada vez son más. Esto nos permite trabajar con valores de proteína realmente bajos comparados con los utilizados no hace muchos años. En Rumiantes (sobre todo de producción de leche), también utilizamos aminoácidos con protección ruminal: metionina y lisina, que nos permite hacer raciones con hasta dos puntos menos de proteína y con resultados mejores en cuanto a cantidad y calidad de la leche producida. Otra de las ventajas de trabajar con proteínas más bajas es la menor dependencia de la soja (materia prima que por el lugar donde se produce es de las que más contaminan).

Otro punto a tener en cuenta es la nutrición de precisión que realizamos, tanto para cada etapa productiva, como para cada edad de los animales, ajustando los nutrientes que aportamos a las necesidades de nuestros animales, de esta manera los residuos contaminantes en las heces son los mínimos posibles.

Cambio climático. Huella de carbono: Gases de Efecto Invernadero (GEI)

• Metano (CH₄)

El metano (que al final se transforma en CO₂) y éste, son los gases responsables del efecto invernadero. El metano se genera fundamentalmente en la digestión del alimento en animales rumiantes. Para disminuir su producción estamos realizando cambios en las dietas de estos animales, favoreciendo la utilización de almidones y disminuyendo la utilización de fibras, trabajamos con dietas con relación forraje/concentrado más bajas y con menos nivel de FND (fibra neutro detergente) utilizando forrajes de más digestibilidad, además son dietas de alta eficiencia nutritiva por lo que aumenta la producción del ganado (leche y/o carne), consiguiendo de este modo un doble efecto que es disminuir la producción de metano total y además la producción por kg de leche/carne producido.

Del mismo modo, estamos siguiendo los estudios que se están realizando con el aditivo 3-NOP (3-nitroxypropanol) que está consiguiendo sin pérdida de rendimiento alimenticio bajar hasta un 30% la producción de metano en la digestión de los rumiantes.

Y también mantenemos expectativas en los estudios sobre la producción y comercialización futura de algas del género Asparagopsis, que están demostrando ser compuestos antimetagénicos. Cómo antes decía, el metano que tiene una intensidad mucho más alta que el CO₂ como gas de efecto invernadero, al final de se transforma en CO₂ (tiene como una doble actividad), por lo tanto, es importantísimo disminuir su producción.

• CO₂

En cuanto a la huella de carbono por CO₂, en fábricas de pienso, lo que más peso tiene es el lugar de producción de las materias primas y en qué tierras se cultiva (muchas de ellas proceden de tierras de desforestación) y su transporte hasta la fábrica y el transporte del pienso desde la fábrica hasta la granja.

De este modo, lo que en Avicon estamos haciendo es favorecer los ingredientes de cercanía frente a los de importación. Utilizamos preferentemente materias primas de nuestra zona de ubicación e intentamos favorecer la reutilización (previa valoración nutricional) de coproductos de desecho humano, esto es lo que se denomina economía circular (bien directamente en nuestra fábrica, bien recomendando a nuestros socios el uso directo por ellos en las raciones que les aconsejamos).

Estamos intentando valorar como un nutriente más la huella de carbono que pueda tener cada ingrediente, en función de donde se produzca, del suelo donde se cultiva, del transporte que tiene, etc. dentro de los programas de formulación. Nos valdremos de la trazabilidad, junto con nuestros proveedores de materias primas, para poderlo llevar a cabo. No es una tarea fácil, pero poco a poco será posible y de esta forma poder cuantificar y medir, en definitiva, como antes decía, la huella ambiental.

Otras medidas (bienestar animal - reciclaje)

Avicon ya en el año 2022, decidió dar un paso importante, que fue la de prescindir del uso de antibióticos en sus piensos. Hoy somos una fábrica libre de antibióticos, que vela por la seguridad alimentaria (piensos con cero residuos de antibióticos), y por el bienestar animal. Nuestro departamento de I+D+I está contrastando continuamente todos los aditivos no antibióticos, la mayoría de ellos basados en la utilización de extractos de plantas de origen natural para combatir las patologías que antes se trataban con piensos medicados.

Disminuyendo la presencia de metales pesados (zinc, cobre, manganeso, cobalto etc. etc.) en la cadena alimentaria. En lugar de la habitual incorporación en forma mineral (inorgánica), estamos cambiando a incorporarlos en forma orgánica, de esta forma necesitamos añadirlos en menos porcentaje (su absorción es más alta) y por lo tanto su eliminación vía heces es menor, bajando la contaminación ambiental de los mismos. Disponemos de un sistema de recuperación del polvo y residuos generados en los procesos de fabricación, evitando que vallan al medio ambiente.Estamos empezando a utilizar los sacos con papel y plástico reciclado para disminuir los residuos al mínimo.

Como decía al principio, debemos proteger el medio ambiente, pero sin olvidar que esto es una empresa y debe tener una rentabilidad y un futuro. Desde Avicon, seguimos haciendo inversiones en I+D+I, en mejoras en los procesos de fabricación y en la eficiencia energética que nos permita ambas cosas, mejorar técnicamente y a la par aumentar la protección medioambiental. Por nuestra ubicación, somos una empresa que fija población en el medio rural, que tiene puestos de trabajo para hombres y mujeres en zonas donde el trabajo fuera del sector primario no es muy abundante.

Como resumen podemos decir que para lograr una producción animal sostenible, todos los eslabones de la cadena, fábrica de piensos, explotación animal y tratamientos de los residuos, deben optimizar la eficiencia en lo que a sostenibilidad se refiere. En la nuestra, que es la nutrición, tenemos que gestionar nuestro trabajo para mantener los rendimientos, los costes y el bienestar de nuestros animales de granja, disminuyendo la huella ambiental en nuestros productos y manteniendo el desarrollo de nuestra gente. En Avicon ya estamos a ello.