Sepor 2023 analiza a fondo los desafíos del sector porcino y bate récords de asistencia
Este año ha destacado el gran nivel de los expertos que han participado, científicos, técnicos y especialistas que han acudido a Lorca (Murcia) desde todos los rincones del país, e, incluso, del mundo. Durante estos días, según ha explicado Gil Jódar, “hemos acogido participantes de Italia, Portugal, Alemania y Holanda; y una notable presencia de países de Latinoamérica, encabezados por Chile y Argentina; también africanos de Guinea Ecuatorial, Congo y Camerún; y del continente asiático con integrantes de Irak o Kurdistán”.
Éxito del Simpósium Internacional de Porcinocultura
El Simpósium Internacional de Porcinocultura, con más de 800 inscritos, fue la jornada más solicitada, “confirmándose como la cita de referencia del sector porcino a nivel nacional, puesto que no hay ninguna otra de características similares”, apuntó Gil Jódar. Esta estuvo abierta a todos los participantes y se centró en los patógenos que afectan a las producciones y sobre los retos y desafíos ambientales del sector agropecuario.
En este sentido las autovacunas tuvieron un papel protagonista. Este sistema se ha consolidado en los últimos tiempos como una alternativa para poder tratar enfermedades para las que no existen vacunas comerciales. Según los diversos ponentes, mediante un proceso de investigación de las patologías existentes en cada explotación, las autovacunas pueden ser una gran solución para tratar las diversas enfermedades. En definitiva, las autovacunas constituyen una solución a medida que ayuda a completar el programa de vacunación habitual de una granja, especialmente en el caso del sector porcino.
Además, durante la tarde también se llevaron a cabo varias sesiones para estudiar los retos medioambientales que afronta el sector. ‘Valorización y acidificación de los purines, solución global para granja, balsa y campo’, ‘Valorización de residuos agroalimentarios para contribuir a la salud animal’, ‘Residuo cero. Un objetivo al alcance de las explotaciones ganaderas’ o ‘Compostaje de subproductos ganaderos como herramienta agrícola y ambiental’ han sido algunas de las sesiones en las que los asistentes han podido comprobar que los purines se pueden gestionar de forma correcta y en lugares cercanos a las explotaciones.
Una de las conclusiones de la jornada ha sido que valorizar los purines debe ser fácil y accesible, especialmente el nitrógeno, el fósforo y el potasio que se pueden extraer de los mismos. Dichos nutrientes deben servir para reducir el uso de fertilizantes sintéticos, para así reducir la huella de carbono y la huella hídrica.
I+Porc muestra la fuerza del porcino nacional
En este sentido, cabe destacar el papel de i+PORC como promotor de los avances científicos y tecnológicos en el mundo porcino. De hecho, los tres pilares estratégicos del trabajo de este clúster son: el fomento de la innovación y la sostenibilidad a partir de proyectos de I+D+i con socios del clúster, optando a ayudas públicas para la financiación de este tipo de cuestiones tratando de orientarlos a los retos que afronta el sector, como pueden ser la digitalización, la tecnificación, el bienestar animal o la sostenibilidad; la profesionalización del sector, aplicando planes de captación y retención del talento a través de los cual se realizan acciones formativas junto a entidades afines; y, por último, la mejora de la reputación del sector porcino español mediante acciones de comunicación. En definitiva, lo que pretende es ayudar a mejorar, de forma cooperativa, la competitividad de las empresas del sector porcino desde la innovación lo más colaborativa posible.
Esta asociación de empresas privada que recoge socios productores de ganado porcino, centros tecnológicos y proveedores de conocimiento, y colaboradores –resto de empresas que hacen posible la producción de ganado porcino– cuenta con cuatro empresas murcianas en su organización: Jisap, Cefusa, Agroporc y Porcisan, y la Universidad de Murcia será parte en breve como socio tecnológico, además de haber puesto proyectos en marcha con la Universidad Politécnica de Cartagena.
El porcino en la Región de Murcia
Durante la segunda jornada, la Organización Interprofesional del Porcino de Capa Blanca de España (Inteporc), aprovechaba para presentar su ‘Estudio sobre la implantación actual y futura del sector porcino de capa blanca en la Región de Murcia’. Al acto de presentación acudieron Sara Rubira, consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca; Juan Pedro Vera, director general de Producción Agrícola, Ganadera y Pesquera; Manuel García, presidente de Interporc; y Daniel Hernández, del departamento técnico de Interporc.
Este estudio, realizado entre 2011 y 2021, contiene un análisis de indicadores productivos, sociales y económicos de los diferentes eslabones de la cadena que han permitido la caracterización, evolución y proyección del “Sistema Agroalimentario Porcino” de la Región de Murcia, a lo largo de toda la cadena alimentaria sectorial.
En este sentido, cabe destacar que en los diez últimos años en la Región de Murcia se ha implantado una potente estructura básica de producción intensiva ganadera porcina de capa blanca junto con una fuerte estructura de industrialización de base porcina, ambas muy tecnificadas, profesionalizadas y altamente competitivas, a partir de las cuales se ha desarrollado un eficiente modelo de sistema agroalimentario de base porcina, generador de empleo y riqueza en la Región.
Entre los datos más reseñables que se desprenden del estudio podemos señalar:
- El sector porcino en la región exportó 147.000 toneladas de carne y elaborados cárnicos en 2022 por un valor de 430 millones de euros, generando así un saldo comercial positivo de 409 millones de euros.
- La contribución del sector porcino al PIB regional se sitúa entre el 2% y 2,5%.
- En base a estimaciones teóricas y aproximadas, podríamos decir que, sumando empleo directo, indirecto e inducido de producción e industria, en 2021 obtendríamos un total de unos 22.500 trabajadores, que sería el equivalente al 5% de todo el empleo del sector porcino español y cerca del 3,5% de todo el empleo de la Región de Murcia.
Además, durante la presentación no faltó una mirada al futuro, donde se destacó que, para poder seguir manteniendo su crecimiento sostenible –económico, medioambiental y social– el sector porcino debería fomentar la exportación de carne, la inversión en energías renovables, y la producción de productos de valor añadido, que serán claves para el óptimo funcionamiento del sector en años venideros.
A este respecto Manuel García, presidente de Interporc, afirmó que: “este estudio podría considerarse como un punto de partida para el posterior diseño e implantación de un modelo de producción porcina sostenible desde las perspectivas económica, social y medioambiental, a través de un Plan Estratégico específico para la Región, como el que ya se ha desarrollado desde la interprofesional en el conjunto de la nación”.
VI Sepor Commodities Exchange
Del mismo modo, Herrera hacía referencia a la situación geopolítica actual y a su influencia en el sector: “la invasión de Ucrania supuso un problema para el cereal, y ahora el conflicto de Israel puede tener repercusión en el precio del petróleo por lo que pueda pasar en los países árabes. En cualquier caso, el efecto no será tan prominente en el sector como en el caso de Ucrania. España es un referente en cuanto al éxito en la producción porcina, estamos captando producción que se está rebajando en otros países europeos, por lo que creo que tenemos un sector fuerte y resiliente, que podrá soportar los cambios que sobrevengan”. Por último, Herrera ponía en valor la importancia de Sepor como punto de encuentro para la divulgación y el intercambio de ideas entre expertos y profesionales de muy diferentes ámbitos.
La gravedad del PRRS
Con respecto a la enfermedad, Toledo apuntó: “este año en España faltan cinco millones de cerdos. Esta pérdida se ha producido por la entrada de virus, patógenos o virus muy virulentos de origen desconocido y que no se sabe de dónde han podido llegar a España. Independientemente del origen, lo que ha ocurrido es que esta enfermedad vírica, que ocasiona un mal funcionamiento del sistema inmune, genera infecciones bacterianas segundarias. Como no se pueden usar los antibióticos de manera indiscriminada, esto ha provocado una gran pérdida de producción y ha sido uno de los elementos distorsionadores del mercado, lo que ha provocado la subida del precio de la carne de cerdo de modo generalizado en toda Europa”.
Según el jefe de producción de Grupo Francés, “estos cerdos ‘desaparecidos’ son consecuencia tanto de los fallecidos por la enfermedad como de los que no han nacido debido a abortos de las madres, lo que ha provocado que haya menos lechones”.
En cuanto a los posibles tratamientos para el PRRS, Toledo indicó que en la actualidad se están desarrollando vacunas para la misma, aunque el virus presenta el problema de que, al ser de tipo ARN, al replicarse va mutando, lo que hace que, al cambiar, el virus no se parezca al virus vacunal, lo que reduce la efectividad de las mismas en gran medida. “En cualquier caso, la vacunación es una herramienta menor en este caso, por lo que los expertos han aconsejado el control del flujo de lechones y varias herramientas más para controlar la enfermedad”, concluyó Toledo.
La prevención, el arma contra la PPA
El Simpósium Internacional de Porcinocultura finalizó con la jornada especial para veterinarios bajo el título ‘Veterinario de explotación, uso de antimicrobianos y bioseguridad en las explotaciones ganaderas’, organizada por el Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de la Región de Murcia, la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Murcia, la Asociación de Veterinarios de Porcino de la Región de Murcia y la propia Sepor.
Durante la jornada destacó la ponencia realizada por Joaquín Vicente, investigador del Instituto de Investigación de Recursos Cinegéticos, entidad dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha (JCCM), con el título de ‘Bioseguridad en las explotaciones porcinas en relación con la fauna silvestre’.
Vicente ha presentado un enfoque novedoso con respecto a la peste porcina africana (PPA) para el sector del porcino intensivo. “La bioseguridad externa de las explotaciones no solo concierne a las explotaciones extensivas, sino también a las intensivas. Hay cierto riesgo para estas explotaciones intensivas por interacciones humanas con animales del exterior, y los programas de bioseguridad deben adaptarse para contemplar este riesgo. Hay un gran grado de exposición debido a los miles de ganaderías que existen. Con tener un caso de PPA en España se cerrarían los mercados de exportación de fuera de la UE. La diferencia entre tener un caso y no tenerlo es importantísima para el sector. Es vital que se tenga en cuenta la bioseguridad en todos sus aspectos”, ha explicado Vicente.
En concreto, la bioseguridad externa es la que se aplica para evitar que entren patógenos a las explotaciones, en el caso de los supuestos presentados por el investigador, a través de la fauna silvestre, especialmente en el caso del jabalí. Para evitar el contagio de la PPA a través de la fauna que rodea a las explotaciones, el investigador ha recomendado realizar la gestión de la población de los animales silvestres a través de extracciones, fomentando la caza. Y revisando los perímetros de las granjas, para asegurar que la bioseguridad no se haya visto comprometida.
“También se debe prestar mucha atención al personal, que en algunos casos puede tener contacto con productos contaminados, como pueden ser productos cárnicos que vengan del este de Europa. Si se permite el consumo de carne de cerdo en una explotación puede ser un riesgo. Además, que el personal esté en contacto con fauna externa, por ejemplo, en el caso de los cazadores, con una sola gota de sangre que porten en su ropa podría contagiar a la explotación”, ha afirmado Vicente.
Por último, con respecto al tratamiento de la PPA, el investigador ha señalado que en la actualidad se está trabajando a nivel preventivo a través de normativas y regulaciones, puesto que aún no hay cura para la misma. “De momento no hay vacunas que representen una solución real”, ha finalizado Vicente.