Cisma en el Consorcio con la salida de medio centenar de socios y el 25% de la leche de oveja

Medio centenar de ganaderos que comercializan unos 11 millones de litros de leche de oveja al año y que pertenecían hasta ahora al Consorcio de Promoción del Ovino han formalizado su baja de esa cooperativa de primer grado, que es la mayor de España de ovino de leche, para fundar una nueva.

Un total de 49 socios se han dado de baja entregando en la sede de la cooperativa en Villalpando (Zamora) el documento por el que formalizan su marcha y dejan al Consorcio Provincial del Ovino sin el 25% de la leche que comercializa y sin los 20.000 lechazos que venden anualmente estos ganaderos, según informó el que ha sido hasta hace unas semanas vicepresidente del Consorcio, Julio César González.

Este ganadero es uno de los que presentaron su baja. Según su versión, no será efectiva hasta dentro de un año, ya que por contrato los socios deben avisar con doce meses de antelación de su abandono del Consorcio y durante ese tiempo deben seguir obligatoriamente entregando la leche a la cooperativa. En cambio, la comercialización de lechazos ya la pueden realizar por su cuenta y para ello han creado la cooperativa Ovino Las Avutardas, que sigue el espíritu de la antigua Cooperativa Campo de Avutardas de Villafáfila (Zamora), que fue una de las que se unieron en 2016 para constituir el Consorcio de Promoción del Ovino. Los ganaderos que dejan el Consorcio pertenecían todos ellos a la antigua cooperativa de Villafáfila y han adoptado esa decisión descontentos por la gestión y la falta de transparencia.

González, como portavoz de los ganaderos que dejan el Consorcio, lamentó que la cooperativa Campo de Avutardas que fundaron sus padres aportara un millón de euros al Consorcio y bienes por valor de otro millón y medio de euros y ahora sus socios se queden sin nada por una gestión que ha considerado errónea, personalista y de la que existe “una falta de transparencia absoluta”.

De hecho, señaló que, ni siquiera cuando ocupaba la vicepresidencia, conocía el precio al que el Consorcio de Promoción del Ovino vendía la leche a la industria láctea, los gastos de salarios y desplazamientos del gerente y otros trabajadores de la cooperativa o las ventas de la quesería que el Consorcio ha abierto en Villalpando.

También se mostró crítico con uno de los nuevos proyectos en los que se ha embarcado el Consorcio, consistente en crear una explotación de 3.000 ovejas en Santa Eufemia del Arroyo (Valladolid) con una inversión de nueve millones de euros, al considerar que la inversión en esas instalaciones es excesiva y hacen la competencia a los propios ganaderos de ovino.

El Consorcio de Promoción del Ovino ha defendido la gestión de esta cooperativa, que es la mayor de ovino de leche de España, y que demuestra el “compromiso con todos sus ganaderos socios”, quienes además han respaldado con el 80% de los votos las cuentas anuales del último ejercicio.

Ante la petición de baja formulada por medio centenar de ganaderos, el consejo rector del Consorcio recuerda que toda la documentación de las cuentas de 2022 ha estado a disposición de los socios y todas las peticiones de información se han contestado “conveniente y fehacientemente”.

Resalta además que el Consorcio de Promoción del Ovino, que tiene su sede en Villalpando (Zamora) y del que forman parte 619 ganaderos, cerró el último ejercicio con una facturación de 91 millones de euros, el 15 % más que el ejercicio anterior y que mantiene siete centros de trabajo abiertos en el medio rural con 37 puestos de trabajo directos. Uno de los centros se ubica además en Villafáfila (Zamora), de cuyo entorno son la mayoría de los socios que han formalizado su marcha para constituir la cooperativa Ovino Las Avutardas.

Estos socios explicaron que pese a darse de baja deberán seguir entregando la leche al Consorcio aún durante un año y la cooperativa aclara que no existe un contrato vinculante de los socios, sino que son los estatutos del Consorcio los que establecen las obligaciones y conforme a ellos le corresponde al consejo rector “la calificación y los efectos de la baja”.

Sobre el intento previo de segregación amistosa de esos ganaderos, el consejo rector apunta que la solicitud de segregación se debería haber formalizado previamente por escrito y firmada por todos los solicitantes, sin que nunca se haya hecho así, y además quien debería decidir sobre ella es la asamblea general.

Respecto a la denuncia interpuesta por los socios descontentos en el Juzgado de lo Mercantil, el Consorcio de Promoción del Ovino resalta que el juzgado desestimó las medidas cautelares solicitadas para que se suspendieran las juntas preparatorias de la asamblea.

En cuanto a los contratos con la industria para la venta de la leche, el Consorcio de Promoción del Ovino señala que cumple con la Ley de la Cadena de Valor y que las producciones se contratan “mes a mes”.

Respecto a la granja de 3.000 ovejas y nueve millones de inversión proyectada en Santa Eufemia del Arroyo (Valladolid), el Consorcio de Promoción del Ovino aclara que su ejecución definitiva dependerá del plan estratégico que desarrolla alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.