Los ganaderos se plantean ampliar la presión sobre las industrias lácteas del resto de España, tras el boicot en Galicia

A lo largo de la próxima semana, las organizaciones de agricultores y ganaderos se reunirán para analizar la viabilidad de intensificar la presión sobre algunas industrias lácteas del país, tras el boicot iniciado ayer por los ganaderos gallegos. Hasta ahora, los representantes del sector productor (Coag, Asaja, Upa y Cooperativas Agro-alimentarias) han acordado plantear primero esta posibilidad dentro de sus propias entidades antes de decidir algo de forma conjunta, tal y como han asegurado desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (Upa). En concreto, estas entidades ya asistieron a las reuniones de la Interprofesional Láctea (Inlac) y del Comité de Seguimiento del Sector Lácteo, en las que intervinieron junto a los productores, portavoces del gobierno como el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu. Por su parte, la interprofesional insistió en su intención de trabajar en el marco de la legislación actual a fin de consolidar la cohesión sectorial y abordar, en profundidad, las necesidades y decisiones a tomar ante estos u otros conflictos. En concreto, la Inlac instó al gobierno a tutelar las relaciones dentro del sector mediante un marco legislativo que otorgue la posibilidad de llegar a consensos, a la vez que exigió a la industria el aumento del precio en origen, en base a un contexto global de precios al alza. El Comité de Seguimiento del Acuerdo del Sector Lácteo, también hizo su aportación en base al conflicto. Así, el organismo presentó y valoró los últimos informes obtenidos de la base de datos de contratos del pasado mes de agosto. Las cifras muestran que bajo contrato se registró el 22% de la cuota disponible en los cuatro primeros meses de la campaña 2010/2011. Por parte de los industriales, asistieron los representantes de la Federación Nacional de Industrias Lácteas en su lugar, lo que se interpretó como un plantón.