Cirujanos maxilofaciales de Albacete realizan una reconstrucción maxilar completa gracias a la impresión 3D
Por primera vez, un hospital público castellano-manchego ha reconstruido un maxilar de forma completa, incluidos implantes dentales, utilizando tecnología que permite elaborar réplicas físicas en tres dimensiones tanto de la zona afectada del paciente como de la zona donante.
El Servicio de Cirugía Oral y Maxilofacial de la Gerencia de Atención Integrada de Albacete, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, realiza este tipo de trasplantes autólogos para reconstrucciones complejas desde hace 15 años, pero ha sido en los últimos años, con el desarrollo de la tecnología y la generalización de la impresión en tres dimensiones, cuando se pueden aplicar estos avances en casos seleccionados para conseguir mejores resultados funcionales y estéticos. Es el caso de la cirugía realizada en el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, una intervención que ha permitido tratar a una mujer de 23 años con una lesión expansiva a nivel maxilar superior derecho; una neoplasia benigna poco frecuente, de crecimiento lento que produce una importante destrucción ósea y alto índice de recaída. Previamente a la cirugía se realiza a la paciente un TC con un espesor de corte lo suficientemente fino para reconstruir tridimensionalmente esa imagen. Esa reconstrucción tridimensional es de gran ayuda en el momento de plantear la intervención quirúrgica, sobre todo en zonas con variabilidad anatómica y difícil acceso, como era el caso.
Una impresión en 3D de esta reconstrucción permitió a los profesionales obtener réplicas físicas exactas de la zona a extirpar así como de la zona donante. Para la realización de todos estos modelos tridimensionales, la planificación del caso, la confección de las férulas quirúrgicas y el material de osteosíntesis se contó con la colaboración de una empresa española, Maxilaria Surgery.
Tal y como destacan los cirujanos del servicio albaceteño, el modelo esterolitográfico abre un abanico de posibilidades enormes al clínico. “El hecho de tener una réplica exacta del paciente en la mano antes de pasar a quirófano facilita no sólo planificar mejor una intervención sino que ésta sea más precisa, más rápida e incluso con menor morbilidad. En cirugía oral y maxilofacial son frecuentes grandes extirpaciones de hueso y tejidos blandos, generalmente secundarias a procesos oncológicos y secuelas traumatológicas, que obligan a técnicas de reconstrucción complejas en la que es necesario coger tejido de otra zona donante del mismo paciente”, explica el doctor Ignacio Heras.