Tratamientos de estética
El paso que falta en la rutina para domar la rosácea: la exfoliación física
Redacción Belleza Pro04/02/2025
La rosácea es una condición cutánea que sigue generando dudas, tanto entre clientes como entre profesionales de la estética. Aunque no tiene cura, su tratamiento puede optimizarse con una correcta rutina de cuidado. Una de las estrategias más efectivas para controlarla es la exfoliación física, un método muchas veces evitado en pieles sensibles, pero que, aplicado de manera adecuada, puede convertirse en un aliado clave para mejorar la textura y el equilibrio de la piel.
Comprendiendo la rosácea
La rosácea es una afección que se manifiesta con enrojecimiento, sensibilidad y la aparición de pequeñas pápulas en la piel del rostro. Según Estefanía Nieto, directora dermocosmética de Medik8, “las personas con rosácea tienen una piel hiperreactiva, donde factores como el clima, la alimentación o el estrés pueden desencadenar brotes. Además, hay otros dos elementos que agravan la condición: el exceso de grasa y la presencia del Demodex, un ácaro que coloniza la superficie cutánea”.
Estos factores generan un desequilibrio progresivo, haciendo que la piel se vuelva más intolerante, propensa a la deshidratación y al enrojecimiento constante.
¿Por qué la exfoliación física es clave en el manejo de la rosácea?
El principal problema del Demodex en la rosácea es su proliferación excesiva. Según Ana Yuste, directora dermocosmética de Rosalique, este microorganismo se alimenta de células muertas y residuos grasos, contribuyendo al deterioro de la barrera cutánea. La exfoliación física ayuda a reducir su presencia al eliminar su fuente de alimento, promoviendo un entorno más equilibrado para la piel.
Además, este tipo de exfoliación aporta beneficios adicionales:
- Estimula la microcirculación: al aplicar el exfoliante con un masaje suave, se activa la circulación sanguínea, lo que favorece la oxigenación de los tejidos y la regeneración celular.
- Regula la producción sebácea: como menciona Estefanía Nieto, “una piel con rosácea tiende a producir más sebo del que necesita, lo que contribuye a su desequilibrio. La exfoliación ayuda a regular esa acumulación de grasa, manteniendo la piel más estable”.
- Mejora la textura cutánea: reduce la acumulación de células muertas, aportando luminosidad y suavidad sin comprometer la función barrera.
Cómo exfoliar sin irritar
La clave para que la exfoliación física beneficie a la piel con rosácea está en la frecuencia y el tipo de exfoliante utilizado. Mireia Fernández, directora dermocosmética de Perricone MD, recomienda realizar este procedimiento dos o tres veces por semana, evitando la sobreexfoliación que podría provocar un efecto contrario.
Es importante optar por exfoliantes con partículas finas y redondeadas, que no generen microlesiones en la piel. Productos con ingredientes calmantes y reparadores ayudarán a complementar el tratamiento, minimizando la reactividad cutánea.
Productos recomendados para exfoliación en pieles con rosácea
Adzuki & Ragi Fantasy de Byoode
Exfoliante en polvo que combina microexfoliación física con exfoliación química suave mediante gluconolactona y ácido fítico.
Modo de uso: se mezcla con agua hasta formar una espuma ligera antes de aplicarlo sobre la piel.
Precio: 39 euros – Disponible en Amazon y Byoode.com.
Gentle Buffing Gelée de Omorovicza
Gel exfoliante con partículas naturales de AHA y lufa, junto con péptidos purificantes de moringa y extracto de algas rojas, para una exfoliación efectiva sin agresión.
Su textura refrescante revitaliza la piel y mejora la luminosidad.
Precio: 73 euros – Disponible en Purenichelab.com.
Complementos esenciales en la rutina del cliente con rosácea
La exfoliación debe ser parte de un protocolo integral de cuidado. Ana Yuste enfatiza la importancia de complementar con productos calmantes, hidratantes y con activos que neutralicen la rojez.
Rosalique Anti-Redness Miracle Formula 3 in 1
Fórmula con urea, alfa-bisabolol, pantenol y manteca de karité, enriquecida con micropartículas verdes que camuflan la rojez mientras hidratan y protegen la piel.
Protección SPF50 para prevenir el daño solar, uno de los principales desencadenantes de brotes de rosácea.
Precio: 34,95 euros – Disponible en Purenichelab.com.
La exfoliación física no debe ser descartada en el tratamiento de la rosácea, sino aplicada con un enfoque estratégico para potenciar sus beneficios sin comprometer la piel. Como profesional de la estética, recomendar productos adecuados y guiar a cada cliente en su uso correcto puede marcar una gran diferencia en la calidad y estabilidad de su piel.
