Cada euro invertido en la movilidad eléctrica en España genera 1,8 euros de PIB
Según el Estudio de Impacto Socioeconómico de la Movilidad Eléctrica en España, elaborado por Semsun Finanzas para Aedive, cada euro que se invierte en la electrificación de la movilidad en España genera 1,8 euros de PIB. Además, la electrificación y las redes para el desarrollo de la industria y los servicios de la movilidad eléctrica en España crearán más de 500.000 empleos y generarán más de 100.000 millones de euros de PIB.
El estudio analiza el impacto socioeconómico de la movilidad eléctrica en el país, destacando el efecto multiplicador que esta tiene sobre diversas ramas de la economía. El 90% de cada euro invertido tiene un significativo impacto expansivo en 22 sectores distintos, entre los que destacan la manufactura, los bienes de equipo, los servicios financieros, la construcción y las tecnologías de la información. Esta capacidad de tracción económica refuerza la importancia del sector eléctrico como motor de crecimiento, más allá del ámbito automovilístico, al abarcar otros sectores clave como la eficiencia energética.
El contexto en el que se desarrolla esta transformación está enmarcado por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030. Este plan establece una inversión anual de 6.000 millones de euros en electrificación y redes, lo que supone un total de 60.000 millones en una década. Gracias a estas inversiones, cada año se generan aproximadamente 11.000 millones de euros de PIB, el equivalente al 17,2% del PIB industrial de España. A su vez, esta inversión permite la creación de cerca de 55.000 empleos anuales, lo que representa casi el 2% del empleo industrial del país.
Aedive subraya que la movilidad eléctrica representa una de las mayores oportunidades industriales y tecnológicas de España. El ecosistema empresarial español está preparado para aprovechar este crecimiento, con un compromiso firme en la creación de empleo de alto valor añadido y una inversión significativa en innovación.
El informe destaca también algunos de los retos a los que se enfrenta el sector, como la necesidad de aumentar los incentivos desde la Administración Pública para fomentar la inversión en tecnologías innovadoras. Según el estudio, el 64% de las empresas del sector considera que los incentivos actuales no son suficientes para atraer inversiones privadas de alto impacto, lo que podría limitar el potencial de crecimiento del sector. Además, el 60% de las empresas encuestadas afirma que todavía están luchando por alcanzar una rentabilidad suficiente en sus inversiones en movilidad eléctrica.
En términos de innovación, el sector de la movilidad eléctrica en España ha mostrado un dinamismo superior al del resto de la economía. Las empresas dedicadas a esta actividad invierten un 3,3% de su facturación en I+D, una cifra notablemente superior a la media del 0,81% que invierte el conjunto del tejido empresarial español. En los últimos tres años, se han destinado cerca de 30 millones de euros a proyectos de I+D en este ámbito, lo que pone de manifiesto el carácter innovador de la movilidad eléctrica.
A pesar de los desafíos, el futuro de la movilidad eléctrica en España se percibe como prometedor. Siete de cada diez empresas del sector confían en que sus ingresos crecerán más de un 30% en los próximos tres años. Además, la mayor parte de las empresas entrevistadas considera que el sector experimentará un crecimiento intensivo en la próxima década, conviertiendo a la movilidad eléctrica en un motor tecnológico y económico para el país.
"Estamos, en suma, ante una de las oportunidades industriales, tecnológicas y de potencia económica más relevantes del país, con un ecosistema empresarial sólido, en crecimiento, comprometido con la inversión y el empleo de alto valor", concluye el informe.