En opinión de Laura San Segundo, responsable de Gestión Energética de EDF Fenice Ibérica
“Los objetivos globales de descarbonización marcados para 2030 no resultan fáciles, pero sí alcanzables”
“El cambio climático requiere de una respuesta inmediata por parte de la sociedad y el tejido empresarial para poner freno a las consecuencias de este grave problema que afecta al planeta”. Esa fue una de las conclusiones de la mesa redonda ‘FIT FOR 55, el paquete de la UE que impulsará la acción climática’, organizada por Anese y COIIM y que tuvo lugar de forma telemática el pasado 14 de enero.
La responsable de Gestión Energética de EDF Fenice, Laura San Segundo, afirmó que en la actualidad “vivimos un momento de emergencia climática que ha comenzado a afrontarse a nivel global, con medidas que hacen frente al cambio climático y estrategias de descarbonización que están dando resultados”. San Segundo añadió que “estamos convencidos de que es posible alcanzar los objetivos de ‘Fit for 55’, aunque no resulten sencillos”.
Esta hoja de ruta europea sienta las bases para una transición hacia fuentes de energías renovables, con el objetivo de lograr una reducción del 55% en emisiones a nivel mundial, aunque los Estados integrantes de la Unión Europea tendrán un objetivo ponderado en función de su PIB.
En España, por ejemplo, este objetivo de reducción de emisiones está fijado en un 23% de su producto interior bruto, según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030. Con la modificación que introduce Fit for 55, este objetivo incluso se eleva para acelerar la transición hacia las energías más limpias.
La mesa redonda ‘FIT FOR 55, el paquete de la UE que impulsará la acción climática’, organizada por Anese y Coiim, tuvo lugar de forma telemática el 14 de enero.
Europa, principal impulsora de la lucha contra el cambio climático
Fuentes de EDF Fenice apuntaron en una nota de prensa que la agenda europea fija un horizonte temporal hasta 2050. Pero el nuevo régimen independiente de comercio de derechos de emisión para los edificios y el transporte por carretera “no entrará en vigor hasta 2026 y la prohibición de comercializar turismos o furgonetas con motores de combustión interna en la Unión Europea se ha fijado para 2035”.
Tal y como destacaron los participantes en el foro, la Unión Europea se ha convertido en el principal impulsor de medidas contra el cambio climático, con el objetivo de lograr la neutralidad climática, en su área de influencia y antes de 2050. Como paso intermedio, destaca el citado ‘Objetivo 55’ para reducir las emisiones en al menos un 55 % de aquí a 2030.
No obstante, el reto es global, ya que La Unión Europea es solo responsable del 8% de las actuales emisiones en todo el mundo, mientras que China Japón y Estados Unidos figuran como los principales emisores de CO2 a escala global.
En opinión de San Segundo el paquete de medidas ‘Objetivo 55’ “resulta más que conveniente y se ajusta a los objetivos climáticos acordados por el Consejo y el Parlamento Europeo. Pero para cumplir estos objetivos es necesario impulsar las acciones de ayudas mediante el incremento de las subvenciones a la eficiencia energética, estableciendo un vínculo muy fuerte con la digitalización. Una de las acciones más importantes para contribuir a estos objetivos es monitorizar los consumos y poder tomar decisiones en base a los datos, ya que lo que no se mide no se puede mejorar”.
La solución más eficiente, según San Segundo, pasa por “acelerar la transición hacia energías renovables y apostar por soluciones de eficiencia energética que permitan consolidar la independencia energética de otras fuentes de generación más caras y contaminantes”.
La experta de EDF Fenice también ha subrayado que “en los últimos años ha saltado la alarma en diferentes sectores debido a la tendencia ascendente del precio de CO2, siendo cada vez más los sectores afectados a corto plazo por el mercado de emisiones”. En este sentido, en la industria “se han logrado mejoras significativas en eficiencia energética”.
Este Foro de discusión, moderado por el director de Anese, Carlos Ballesteros, contó con la participación de César Franco, decano del COIIM; Oliverio Álvarez, socio de Deloitte; Cristina Rivero, responsable del área internacional de Aemener, y Jaime Segarra, presidente de la Comisión de Energía del COIIM. El evento fue clausurado por Manuel Ángel Soriano, interventor de Asociación de Ingenieros Industriales de Madrid (AIIM).