El Miteco celebra la aprobación de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética
La vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, celebró el 13 de mayo la aprobación de la primera Ley de Cambio Climático y Transición Energética de España en el Congreso de los Diputados. El texto, “que llega en un momento clave para activar las palancas de recuperación económica, establece los objetivos para alcanzar la plena descarbonización de la economía antes de 2050”.
Para la vicepresidenta cuarta, la ley aprobada hoy por la Cámara Baja es un documento “imprescindible” que había sido postergado demasiado tiempo. “Marcamos un hito, un punto de partida desde el que mirar siempre hacia delante e ir a más, nunca a menos. Con esta ley se abordan retos complejos en un momento difícil para nuestra sociedad”.
Ribera destacó en el trabajo desarrollado por todos los grupos parlamentarios, que da muestras del grado de implicación e interés que la ley ha suscitado. Tras haber pasado por el Congreso y el Senado, “las enmiendas realizadas han enriquecido y reforzado el texto”, apuntaron fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en una nota de prensa. La Ley de Cambio Climático y Transición Energética contempla una primera revisión al alza de sus objetivos en 2023. En este sentido, Ribera emplazó a los grupos a “apoyar la ambición climática que persigue el Gobierno y a seguir trabajando en la suma de consensos”.
“Modernizar la economía”
Ribera señaló que “hace falta más ambición para atajar el camino hacia la plena descarbonización, sustituir los combustibles fósiles por energías renovables, modernizar la economía y transformar los modelos de producción y de consumo, adaptarse a los impactos climáticos y realizar estos cambios sin olvidar a ningún territorio ni a ninguna persona”.
En ese sentido, la vicepresidenta cuarta destacó que este proyecto “constituye un primer paso para articular el resto de políticas y medidas y orientar así el proceso de recuperación hacia un modelo de prosperidad duradero y respetuoso con los límites del planeta”, añadieron las mismas fuentes.
Objetivos más exigentes que los propuestos por la UE
Los objetivos de reducción de emisiones en sectores difusos (movilidad, usos térmicos en edificios, residuos o agricultura) incluidos en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética proponen una reducción del 39%, 13 puntos por encima de la meta del 26% fijada por la Unión Europea.
Asimismo, mientras la Unión Europea establece una penetración de renovables de entre un 38% y un 40% en el consumo final de energía para 2030, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima establece para España un 42%. En lo que respecta a eficiencia energética, Europa considera necesario un aumento de entre el 36 y el 37% para 2030, mientras que el objetivo español se sitúa en el 39,5%.