Cortina anuncia que tras abandonar el Consejo de BBVA se volcará en la gestión de Repsol YPF
Revista Estaciones de servicio23/04/2002
AMDPress.- Alfonso Cortina, presidente de Repsol YPF y hasta hace unos días consejero del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, reiteró ayer su compromiso con el grupo petrolero. He dimitido de mi puesto en el Consejo del BBVA para dedicarme en exclusiva a Repsol y volcarme en nuestra apuesta por el negocio gasístico y eléctrico, contestó a uno de los periodistas que le inquirió sobre si pensaba abandonar la presidencia de Repsol YPF tras las implicaciones en el caso BBVA.
El presidente declaró sentirse apoyado por los principales accionistas del grupo. Tanto por el BBVA, que en el comunicado de prensa en que el que informaba sobre el nombramiento del nuevo vicepresidente tras la salida de Emilio Ybarra, mostró su apoyo expreso a la ejecutiva de la petrolera; como por La Caixa que siempre nos ha honrado con su apoyo. La caja sigue interesada en incrementar su participación en Repsol, a pesar de que la acción de oro limita por encima del 10% sus derechos políticos hasta 2006.
La compañía decidió proponer a sus accionistas un dividendo bruto total correspondiente al ejercicio 2001, de 0,21 euros por acción, un 58% inferior al del año precedente. La caída del dividendo es consecuencia directo de la situación de incertidumbre que se vive en Argentina, así como -según palabras del presidente- de la prudencia con la que la compañía afronta el ejercicio 2002. Esta medida es temporal y tan pronto como se despejen las incertidumbres actuales podremos normalizar la retribución al accionista, aclaró Cortina.
Repsol YPF invertirá 3.200 millones de euros en 2002, 800 millones menos que lo inicialmente previsto. En cuanto a las desinversiones no estratégicas, la sociedad completará el programa proyectado. Por una parte, venderá el 18% de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) que se unirá al 18% enajenado en 2001, y por otra, la salida a bolsa del 65% de Enagás. Todo ello, según datos facilitados por el grupo, supondrá más de 2.500 millones de euros.
El presidente declaró sentirse apoyado por los principales accionistas del grupo. Tanto por el BBVA, que en el comunicado de prensa en que el que informaba sobre el nombramiento del nuevo vicepresidente tras la salida de Emilio Ybarra, mostró su apoyo expreso a la ejecutiva de la petrolera; como por La Caixa que siempre nos ha honrado con su apoyo. La caja sigue interesada en incrementar su participación en Repsol, a pesar de que la acción de oro limita por encima del 10% sus derechos políticos hasta 2006.
La compañía decidió proponer a sus accionistas un dividendo bruto total correspondiente al ejercicio 2001, de 0,21 euros por acción, un 58% inferior al del año precedente. La caída del dividendo es consecuencia directo de la situación de incertidumbre que se vive en Argentina, así como -según palabras del presidente- de la prudencia con la que la compañía afronta el ejercicio 2002. Esta medida es temporal y tan pronto como se despejen las incertidumbres actuales podremos normalizar la retribución al accionista, aclaró Cortina.
Repsol YPF invertirá 3.200 millones de euros en 2002, 800 millones menos que lo inicialmente previsto. En cuanto a las desinversiones no estratégicas, la sociedad completará el programa proyectado. Por una parte, venderá el 18% de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) que se unirá al 18% enajenado en 2001, y por otra, la salida a bolsa del 65% de Enagás. Todo ello, según datos facilitados por el grupo, supondrá más de 2.500 millones de euros.