El Gobierno regional dice que el impuesto especial sobre hidrocarburos no supone un incremento de los precios finales
La Comunidad de Madrid inicia el procedimiento para la implantación del tramo autonómico
Revista Estaciones de servicio09/07/2002
AMDPress.- El Consejo de Gobierno ha aprobado en la reunión del pasado 5 de julio solicitar informe al Consejo Económico y Social (CES) sobre el anteproyecto de Ley por el que se regula el tipo de gravamen autonómico del Impuesto sobre las Ventas Minoristas de Determinados Hidrocarburos, destinado exclusivamente a la mejora de la sanidad pública. De esta forma, la Comunidad de Madrid inicia el procedimiento previsto para ejercitar la capacidad normativa.
El impuesto, para el año 2002, consiste en una tarifa autonómica de un 1 céntimo de euro por litro para el caso de las gasolinas y los gasóleos de automoción. Para el supuesto de los gasóleos especiales y de calefacción la tarifa sería cinco veces menor, ya que sólo alcanzaría 0,2 céntimos de euro por litro.
En lo que respecta a los años 2003 y 2004, la Ley Estatal 21/2001 fija un sistema progresivo de aplicación de los tipos para limitar sus efectos. De esta forma, en el año 2003 las gasolinas y los gasóleos de uso general estarían gravadas con 1,7 céntimos de euro por litro, mientras que los gasóleos de usos especiales y de calefacción estarían gravados con 0,04 céntimos de euro por litro. Finalmente, en el año 2004 las gasolinas y los gasóleos de automoción se gravarían con 2,4 céntimos de euro por litro y 0,06 céntimos de euro por litro para el caso de los gasóleos especiales y de calefacción.
El Gobierno de la Comunidad afirma que en todo caso, la aprobación del gravamen autonómico no supondría un incremento de los precios finales del combustible, puesto que el mercado de los hidrocarburos está liberalizado y existe competencia entre los diversos agentes. Esta competencia permitiría la absorción del reducido incremento de la tarifa autonómica que se propone.
Además insiste en que la fiscalidad global de estos productos, tanto en nuestra región como en el resto de España, continuaría siendo una de las más bajas de Europa, aún con la aprobación del gravamen autonómico. De esta manera -continúa- la fiscalidad global de las gasolinas sobre el precio final representa en España el 65,7 %, frente al 70,3 % de la media europea.
La recaudación de este impuesto autonómico servirá para llevar a cabo los principales objetivos del Plan de Calidad Integral de la Sanidad, siendo algunos de estos los siguientes: reducir significativamente las listas de espera de la sanidad pública, construcción de hospitales en distintos puntos de la región, planes de rehabilitación y mejora de los hospitales y centros sanitarios ya existentes, libre elección de médico y centro e incremento de los medios materiales y humanos destinados a la atención primaria.
Con la finalidad de analizar los efectos que puede provocar en el sector del transporte el proyecto del Gobierno autonómico, el miércoles 10 de julio el consejero de Hacienda de la Comunidad de Madrid tiene previsto reunirse con la Federación de Organizaciones de Transportistas de la Región de Madrid (Fenadismer) , que agrupa a más de 5.400 empresas de transporte por carretera.
El impuesto, para el año 2002, consiste en una tarifa autonómica de un 1 céntimo de euro por litro para el caso de las gasolinas y los gasóleos de automoción. Para el supuesto de los gasóleos especiales y de calefacción la tarifa sería cinco veces menor, ya que sólo alcanzaría 0,2 céntimos de euro por litro.
En lo que respecta a los años 2003 y 2004, la Ley Estatal 21/2001 fija un sistema progresivo de aplicación de los tipos para limitar sus efectos. De esta forma, en el año 2003 las gasolinas y los gasóleos de uso general estarían gravadas con 1,7 céntimos de euro por litro, mientras que los gasóleos de usos especiales y de calefacción estarían gravados con 0,04 céntimos de euro por litro. Finalmente, en el año 2004 las gasolinas y los gasóleos de automoción se gravarían con 2,4 céntimos de euro por litro y 0,06 céntimos de euro por litro para el caso de los gasóleos especiales y de calefacción.
El Gobierno de la Comunidad afirma que en todo caso, la aprobación del gravamen autonómico no supondría un incremento de los precios finales del combustible, puesto que el mercado de los hidrocarburos está liberalizado y existe competencia entre los diversos agentes. Esta competencia permitiría la absorción del reducido incremento de la tarifa autonómica que se propone.
Además insiste en que la fiscalidad global de estos productos, tanto en nuestra región como en el resto de España, continuaría siendo una de las más bajas de Europa, aún con la aprobación del gravamen autonómico. De esta manera -continúa- la fiscalidad global de las gasolinas sobre el precio final representa en España el 65,7 %, frente al 70,3 % de la media europea.
La recaudación de este impuesto autonómico servirá para llevar a cabo los principales objetivos del Plan de Calidad Integral de la Sanidad, siendo algunos de estos los siguientes: reducir significativamente las listas de espera de la sanidad pública, construcción de hospitales en distintos puntos de la región, planes de rehabilitación y mejora de los hospitales y centros sanitarios ya existentes, libre elección de médico y centro e incremento de los medios materiales y humanos destinados a la atención primaria.
Con la finalidad de analizar los efectos que puede provocar en el sector del transporte el proyecto del Gobierno autonómico, el miércoles 10 de julio el consejero de Hacienda de la Comunidad de Madrid tiene previsto reunirse con la Federación de Organizaciones de Transportistas de la Región de Madrid (Fenadismer) , que agrupa a más de 5.400 empresas de transporte por carretera.