Repsol obtuvo un beneficio neto ajustado de 1.240 millones de euros en el primer semestre
Durante los primeros seis meses del año, Repsol logró un beneficio neto ajustado de 1.240 millones de euros, cifra que es un 35% superior a los 922 millones de euros obtenidos en el mismo periodo de 2014. Fuentes de la compañía destacan que “este resultado, que mide específicamente la marcha de los negocios de la compañía, pone de manifiesto la fortaleza de su modelo integrado (upstream-downstream) y resulta especialmente significativo en el actual contexto de bajos precios del crudo”.
En cuanto al resultado neto ascendió a 1.053 millones de euros, cifra que es inferior a los 1.327 millones de euros del primer semestre del año anterior, en el que se incluyeron 616 millones de euros de resultados extraordinarios por la venta de negocios de GNL y de las acciones no expropiadas de YPF, por lo que si se excluyera este efecto, el beneficio neto habría superado al del año anterior.
Desde la compañía presidida por Antonio Brufau se pondera que “la calidad de los activos industriales y la eficiencia de los procesos en los negocios del dowstream han permitido a Repsol aprovechar la mejora de márgenes internacionales y compensar los resultados del upstream, afectados directamente por la fuerte caída de los precios internacionales del crudo y la interrupción de la producción en Libia”.
Upstream: aumento de la producción
Gracias a la integración de Talisman, la producción de Repsol alcanzó en junio una media de 660.000 barriles equivalentes de petróleo al día, un aumento del 86% frente a los 355.000 barriles equivalentes de petróleo al día producidos de media en 2014. La producción media durante el semestre ascendió a 440.000 barriles equivalentes de petróleo al día, contabilizándose los activos de la compañía canadiense desde el 8 de mayo.
El fuerte descenso de los precios internacionales perjudicó a los resultados logrados por el área de upstream, que obtuvo un resultado negativo de 238 millones de euros, en el que también influyó la interrupción de las actividades en Libia. Este resultado sería positivo, subrayan desde Repsol, “si se excluyese el coste de la actividad exploratoria que lleva a cabo la compañía, ya que sus activos en producción siguen generando beneficios en el actual nivel de precios del crudo”.
Downstream: liderazgo europeo en eficiencia
Por lo que respecta al resultado del negocio de downstream, aumentó un 115%, hasta alcanzar 973 millones de euros (calculado en base a la valoración de los inventarios a coste de reposición, CCS), un incremento que fue posible gracias al “mejor comportamiento de los negocios de refino, derivado de la eficiencia de las instalaciones y a los resultados del plan puesto en marcha para aumentar la competitividad del área química”.
El margen de refino de la compañía alcanzó un nuevo máximo histórico en el semestre (8,9 dólares por barril) con el que lidera el sector en Europa y supera notablemente los 3,5 dólares por barril del mismo periodo del ejercicio anterior. La alta utilización de las unidades de refino ha permitido alcanzar esta cifra, “que refleja la elevada eficiencia de la compañía a la hora de convertir el crudo en productos de alto valor añadido”. En concreto, las unidades de conversión operaron a un 102% de su capacidad.
El buen comportamiento del downstream durante el primer semestre del año ha permitido a la compañía revisar al alza su estimación de EBITDA anual para esta unidad de negocio, hasta cerca de 3.000 millones de euros.