Málaga SmartCity: modelo de gestión energética urbana
15 de marzo de 2011
SmartCity es un proyecto pionero en España que plantea un nuevo modelo de gestión energética en las ciudades, para conseguir un aumento de la eficiencia energética, una reducción de las emisiones de CO2 y un aumento del consumo de energías renovables. El proyecto trata de dar una respuesta integral a los desafíos medioambientales involucrando al consumidor. Entre las novedades destaca la nueva generación de contadores inteligentes que promueven un consumo más sostenible.
Smart Grid
La red eléctrica tal y como la conocemos no ha evolucionado desde su concepción. Sin embargo, los requerimientos actuales respecto al ahorro energético y la integración de nuevos elementos en la red eléctrica, como el vehículo eléctrico o las energías renovables, requieren de la evolución de la red eléctrica tal y como la conocemos a día de hoy. La smart grid es esta evolución: la idea principal es controlar toda la red eléctrica desde la red de alta tensión (actualmente muy monitorizada), así como la de media y baja tensión, de la cual sólo se monitoriza el 20% aproximadamente. Esta concepción aporta una visión de la red eléctrica como una red flexible altamente automatizada y totalmente integrada, que incluye un control centralizado, diagnóstico, reparación y telegestión de contadores.
Málaga, la ciudad idónea
SmartCity, proyecto impulsado por un grupo de once empresas y liderado por Endesa, se desarrolla en Málaga, concretamente en la zona de la Playa de la Misericordia. Málaga ha sido elegida para el desarrollo de SmartCity porque reúne los requisitos necesarios para garantizar el éxito del proyecto: gran potencial de crecimiento, amplias capacidades tecnológicas, fuerte presencia de la Universidad y empresas, apoyo decidido de las administraciones públicas y excelentes infraestructuras eléctricas.
Las fuentes de energía renovable se integrarán de forma óptima en la red, acercando la generación al consumo a través de la instalación de paneles fotovoltaicos en edificios públicos, el uso de microgeneración eléctrica en algunos hoteles o instalación de sistemas microeólicos en la zona. Existen sistemas de almacenamiento energético en baterías, de manera que parte de la energía podrá ser consumida después en la climatización de edificios, el alumbrado público y el transporte eléctrico. Se potencia también el uso de coches eléctricos, con la instalación de postes de recarga y el envío de una pequeña flota de vehículos. Pero, sobre todo, se busca hacer partícipe en todo el proceso al usuario final.
Todos los clientes que participan en el proyecto cuentan con los nuevos contadores inteligentes para facilitar un consumo más sostenible. Además, la instalación de sistemas inteligentes y de sistemas avanzados de telecomunicaciones y telecontrol permite actuar en tiempo real y de forma automática sobre la red de distribución, haciendo posible una nueva gestión de la energía y potenciando la calidad del servicio. Después, se recogen los datos de consumo y de eficiencia para extraer conclusiones y exportar la experiencia a nuevas zonas urbanas, de manera que se pueda ir cambiando el modelo energético actual hacia un modelo más sostenible. El objetivo es conseguir un ahorro energético del 20%, así como la reducción de emisiones en más de 6.000 toneladas de CO2 al año en la zona del proyecto.
SmartCity cuenta con un presupuesto de 31 millones de euros financiados en parte por Fondos Feder gracias al apoyo de la Junta de Andalucía y el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial del Ministerio de Ciencia e Innovación. Endesa ha liderado un equipo formado por las empresas más destacadas del sector, que colaboran y respaldan este ambicioso plan: Enel, Acciona, IBM, Sadiel, Ormazábal, Neo Metrics, Isotrol, Telvent, Ingeteam y Greenpower. También se ha contado con la colaboración de varias universidades y centros de investigación nacionales y autonómicos, como el CDTI, Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial.
SmartCity se convertirá en un referente mundial en el desarrollo de tecnologías energéticas de vanguardia, compartiendo protagonismo con otras iniciativas ya operativas en Estocolmo, Dubái, Malta, Ohio y Colorado. El proyecto se enmarca dentro del Plan 20-20-20, diseñado por la UE, que establece objetivos para el año 2020 de aumento de la eficiencia energética en un 20%, reducción de las emisiones de CO2 en un 20% y aumento de las fuentes de energía renovables hasta un 20% en el mix energético.
El Ayuntamiento de Málaga, la Asociación de Promotores y Productores de Energías Renovables de Andalucía (Aprean) y Endesa, como líder del proyecto Smartcity Málaga, dieron la bienvenida a los participantes en la primera vuelta al mundo, en 80 días, en coches eléctricos, que pasó el pasado 18 de febrero por Málaga. Las autoridades y responsables que recibieron la caravana encabezada por su organizador el aventurero Louis Palmer, fueron la concejala de Sostenibilidad y Servicios y vicepresidenta de la Agencia Municipal de la Energía de Málaga, Teresa Porras, el presidente de Aprean, Mariano Barroso, y el director de Endesa en Málaga, Alfredo Rodríguez.
La carrera, integrada por tres vehículos eléctricos de equipos de Alemania, Australia y Suiza, se detuvo en el punto de recarga para automóviles eléctricos que el proyecto SmartCity Málaga, que lidera la compañía Endesa, mantiene en Avenida del Pacífico, 57 (frente a Diputación Provincial de Málaga).
La carrera continuó su camino de Granada y con destino a Ginebra (Suiza), donde se llegó el 24 de febrero, y que completó una carrera que tiene por objeto batir un récord mundial en defensa del uso de automóviles libres de emisiones contaminantes.
La prueba, denominada Zero Race, comenzó el 16 de agosto de 2010, en Ginebra frente al edificio de Naciones Unidas. El director de la gira y promotor de la carrera, Louis Palmer, manifestó que “en tiempos de crisis climática y energética, la carrera quiere mostrar que existen soluciones disponibles y fiables para detener el calentamiento global y ser independientes de los combustibles fósiles”.