Una de las etapas más críticas del proceso es la dosificación, donde la mezcla precisa de diversas materias primas, polímeros y aditivos es crucial
Nuevos dosificadores DGM Gravix de Moretto para la dosificación de plásticos
La integración de tecnologías avanzadas y soluciones de dosificación inteligentes desempeña un papel clave en la optimización del proceso de producción, permitiendo mayores niveles de eficiencia y calidad. El uso de sistemas de dosificación sofisticados contribuye significativamente al éxito general de la industria del plástico, garantizando la producción de productos acabados que cumplen las normas de calidad y rendimiento. En este contexto, la sinergia entre velocidad y precisión en la mezcla de componentes es esencial para garantizar un resultado óptimo tanto desde el punto de vista técnico como estético, minimizando al mismo tiempo los residuos de producción.
La gama de mezcladores DGM Gravix. De izquierda a derecha: DGM 100, DGM 200, DGM 400, DGM 600 y DGM 800.
Moretto ofrece una amplia y completa gama de soluciones de dosificación que incluye unidades de dosificación volumétrica y gravimétrica. Dentro de la categoría gravimétrica destaca DGM Gravix, que actualmente se encuentra en una nueva fase de desarrollo marcada por importantes innovaciones que elevan los estándares de precisión y versatilidad a nuevas cotas. Estas innovaciones están orientadas a garantizar un rendimiento de dosificación aún más preciso y fiable, reforzando el compromiso constante de Moretto de ofrecer soluciones que persigan la excelencia en la industria del plástico.
DGM Gravix es un mezclador gravimétrico por lotes diseñado para mezclar gránulos de plástico directamente en la inyectora para una eficiencia óptima. El alto nivel tecnológico, combinado con su rendimiento de calidad, ha permitido a DGM Gravix satisfacer perfectamente las necesidades de los transformadores, con más de 10.000 unidades vendidas desde su lanzamiento al mercado.
La dosificación representa una fase fundamental en la preparación de mezclas de 3 a 6 componentes, con el objetivo principal de obtener un producto final de calidad constante. A lo largo de este proceso, es esencial gestionar cuidadosamente diversos fenómenos. Normalmente, se emplean uno o dos materiales de base, junto con un colorante denominado masterbatch, que cumple una función estética para el producto. Además, pueden introducirse aditivos, a menudo en porcentajes menores, a veces tan bajos como unos pocos gramos.
Durante este proceso, un elemento crucial es el pesaje, que se realiza mediante células de carga que detectan y gestionan la constancia de la dosificación. Sin embargo, la señal de las células de pesaje suele estar sujeta a perturbaciones causadas por vibraciones, que pueden proceder de diversas fuentes. Estas vibraciones interfieren con la frecuencia generada por la onda sinusoidal del peso, introduciendo picos aleatorios que complican la interpretación de la señal.
La utilización de algoritmos avanzados de análisis y filtrado de señales es esencial para mantener la estabilidad en la gestión de la precisión del pesaje, aprovechando las capacidades de la tecnología digital. Este enfoque garantiza una precisión de dosificación constante, con una precisión de unos pocos gramos, incluso durante largos periodos de producción. Para desarrollar estos algoritmos, el departamento de Investigación y Desarrollo de la empresa incorporó un software de última generación que aprovecha el poder de la inteligencia artificial (IA).
Instalación de DGM Gravix en IMM.
En el corazón del restyling
Recientemente, Moretto ha introducido mejoras significativas en DGM Gravix mediante la introducción de soluciones técnicas, con el fin de optimizar su uso y aumentar su rendimiento gracias al desarrollo de la digitalización. Estos cambios refuerzan la calidad del producto, garantizando una fiabilidad extrema.
El diseño de la tolva ha sido completamente renovado para garantizar un flujo regular de gránulos, asegurando una precisión de dosificación constante. Esta característica se traduce en una mayor fiabilidad operativa y en la capacidad de mantener unos niveles de precisión muy elevados.
El armario eléctrico ha sido objeto de un meticuloso diseño para mejorar la ergonomía, la ingeniería y la accesibilidad de los dispositivos de control. Situado estratégicamente en la parte trasera, proporciona un cómodo acceso a todos los componentes esenciales de la máquina, incluidos los electrónicos, las células de pesaje y los neumáticos.
La interfaz de usuario se ha mejorado con la introducción de una nueva vista táctil de 7 pulgadas, que incorpora un brazo articulado que optimiza la ergonomía durante el uso. La comunicación visual se ve facilitada por un conjunto de LED, iluminados en cuatro colores distintos, que indican claramente el estado operativo de la máquina.
Un elemento exclusivo del DGM Gravix siguen siendo los párpados dosificadores, que garantizan un alto nivel de dosificación gracias a un tiempo de reacción extremadamente rápido, comparable al de un parpadeo. Mantienen su fiabilidad y durabilidad mucho más allá de los 32 millones de operaciones. Esta estabilidad es única en la industria y esencial para la coherencia de las operaciones de dosificación.
El nuevo DGM 200 desarrollado específicamente para microdosificación y adecuado para aplicaciones médicas.
La tolva de pesaje, situada dentro del cuerpo del dosificador, está desprovista de restricciones mecánicas y conexiones a mangueras de aire comprimido y cilindros neumáticos, lo que representa una característica de diseño notable. Este diseño garantiza un pesaje sin perturbaciones externas, proporcionando valores reales de gran precisión. Junto con la tecnología digital, permite que la máquina funcione sin problemas incluso en condiciones extremas.
Además, el algoritmo que opera en el Sistema de Inmunidad a las Vibraciones (VIS) supera el reto de las vibraciones, permitiendo la instalación de la mezcladora directamente en la máquina de procesamiento, no sólo encima de una máquina de moldeo por inyección, sino también en una máquina de moldeo por soplado, sin ningún problema de precisión. Esto proporciona una flexibilidad sin precedentes al integrar el mezclador en el entorno de producción.
Existen docenas de casos de éxito en la sustitución de máquinas de la competencia gracias al uso de los mezcladores DGM GRAVIX de Moretto. Su rendimiento no deja lugar a dudas, demostrando su eficacia incluso en las situaciones más exigentes.
Con 9 modelos diferentes y nada menos que 76 opciones, la serie DGM Gravix se impone como la elección óptima para los profesionales de la industria del plástico. Una amplia gama satisface todas las necesidades, garantizando un alto nivel de rendimiento y versatilidad.
Rendimiento evolutivo
La función teach-in también facilita la instalación de la serie Gravix directamente sobre la máquina de procesamiento. La secuencia programable y grabable de las tolvas para cada receta añade una flexibilidad única para adaptarse a los cambiantes requisitos de producción, tanto con máquinas de moldeo por inyección como con otras máquinas, como por ejemplo una sopladora de botellas.
La gestión inteligente da la posibilidad de programar hasta 200 recetas, ofreciendo una versatilidad sin precedentes. La gestión de reafilado, con compensación maestra automática, demuestra atención al detalle y sostenibilidad.
Los mezcladores Gravix DGM no sólo garantizan la precisión de las mediciones, sino que también ofrecen una visión completa de la operación con totalizadores de mezcla y de componentes individuales, un mezclador temporizado para evitar desmezclas no deseadas y una interfaz táctil capacitiva de 7 pulgadas con programación basada en iconos para una gestión sencilla e intuitiva del sistema.
Interfaz de visualización táctil DGM Gravix.
La conectividad avanzada, con puerto Ethernet y RS485 para protocolo Modbus y conexión OPC UA, así como la preparación para el sistema de supervisión Mowis, totalmente desarrollado por Moretto, convierten a los mezcladores DGM Gravix en herramientas completas preparadas para los retos dinámicos de la industria moderna del plástico. Además, la compatibilidad con el sistema de transporte EXA de Moretto, capaz de manejar hasta seis receptores, subraya su compromiso con una integración perfecta en todos los aspectos del proceso de producción.
En conclusión, los mezcladores gravimétricos DGM Gravix de Moretto representan una evolución significativa en el mundo de la dosificación de plásticos.
Moretto está representado por MTP.
Instalación múltiple en IMM de mezcladores DGM Gravix dentro de una planta de producción.