El binomio legislación y tecnología definirá la próxima década en el sector de los residuos
Ecoembes señala las dos bases sobre las que ha gravitado la correcta gestión de los residuos de envases a lo largo de la última década: las actualizaciones normativas y las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías. Pero todo ello requiere de la participación de la sociedad, desde las administraciones a las personas pasando por las empresas. Y en este terreno los resultados quedan avalados por las más de 1,6 millones de toneladas de envases de plástico, latas, briks y papel y cartón recicladas en 2022, “la cifra más alta desde que el reciclaje de envases llegara a las calles de nuestro país”.
Desde la sociedad liderada por su CEO, Rosa Trigo, se apunta que “en la última década se ha consolidado el reciclaje a lo largo de toda su cadena: desde el gesto de separar para reciclar realizado por los ciudadanos, cada vez más habitual, hasta hacer más eficientes las plantas de selección para recuperar el máximo de envases, sin olvidarnos del compromiso de las empresas por hacer sus envases más sostenibles a través del ecodiseño. Así, gracias a la colaboración de todos los agentes implicados, en 2022 se reciclaron más de 1,6 millones de toneladas de envases de plástico, latas, briks y papel y cartón, la cifra más alta desde que el reciclaje de envases llegara a las calles de nuestro país”.
No obstante, fuentes de Ecoembes subrayan que “esto no significa que este todo conseguido: aún tenemos enormes desafíos en materia de reducción, reutilización y reciclaje, pero en la última década hemos avanzado hacia un modelo de reciclaje en España mucho más participativo, eficiente y tecnificado”.
Sobre los principales hitos vividos en el sector en los últimos diez años, en Ecoembes señalan como principal novedad legislativa la entrada en vigor de la Ley de Residuos y el Real Decreto de Envases. “Con estas normas se impulsa la circularidad de los residuos, se adaptan los objetivos en materia de reducción, reutilización y reciclaje y se consolida la Responsabilidad Ampliada del Productos (RAP) como el modelo a través del que llevar a cabo los retos en separación y recogida selectiva que tenemos por delante”.
Colaboración con todos los actores implicados
“Desde Ecoembes hemos querido aportar nuestro conocimiento en el sector del reciclaje a una nueva realidad de la sociedad y, fruto de ello, nació hace unos años Reciclos, un Sistema de Devolución y Recompensa (SDR) que incorpora la tecnología móvil y los incentivos al proceso de reciclaje para fomentar este hábito entre la población. Además, hemos trabajado junto con las administraciones por hacer que el proceso de recogida, transporte y selección de envases sea cada vez más eficiente, para lo que la tecnología ha sido, una vez más, primordial, ayudando a optimizar el proceso a la vez que reduce las mermas que esta actividad industrial, como cualquier otra, tiene”, relatan las mismas fuentes.
“El binomio legislación y tecnología definirá la próxima década en el sector de los residuos, sobre todo porque no podemos pretender alcanzar los objetivos marcados sin hacer uso de los últimos avances tecnológicos”, subrayan desde Ecoembes.
En cuanto a la principal aportación de Ecoembes a la mejora en la gestión de residuos, “se ha centrado, fundamentalmente, en tres pilares: colaboración, compromiso e innovación. Si no hubiéramos apostado por estas líneas, es probable que no hubiéramos conseguido que el mensaje del reciclaje calara entre todos los agentes de la sociedad y, por tanto, no alcanzar las cifras de reciclado a las que hemos conseguido llegar entre todos”.
“En este sentido, desde Ecoembes hemos trabajado, junto con las administraciones públicas, en sensibilización ciudadana; también en el desarrollo de tecnología aplicada al proceso -para lo que creamos hace seis años TheCircularLab, un laboratorio de economía circular pionero en Europa-; así como en acompañar a las empresas en su objetivo por hacer más sostenibles los envases, algo que irá a más en los próximos años por los numerosos retos a los que estas tienen que hacer frente”, explican las mismas fuentes.
De cara a los próximos años, Ecoembes señala que “las empresas que ponen envases en el mercado tienen por delante unos objetivos muy retadores en materia de reducción, reutilización y reciclaje y que solo se conseguirán si hay un compromiso real por hacerlo. Un ejemplo de ello es la circularidad de los envases, una preocupación y ocupación creciente entre las empresas que supone, además, un ejemplo de innovación, eficiencia y compromiso para conseguir que sean cada vez más sostenibles. En este sentido, creemos que, para hacer frente a esta creciente necesidad, es primordial que haya una corresponsabilidad. Por eso, desde Ecoembes seguiremos estando del lado de las empresas, ofreciéndoles nuestro conocimiento, para ayudarles a avanzar en este camino que será de obligado tránsito para todos en los próximos años”.
Los retos establecidos por la más reciente normativa de aplicación en la gestión de residuos propician que “tengamos poco tiempo. Aún quedan muchas cosas por hacer y objetivos que cumplir, no solo porque la ley nos lo imponga, sino porque tengamos la convicción de su necesario cumplimiento. Las bases están puestas, los objetivos también. No serán fáciles de conseguir, eso sin duda, pero se lleva trabajando en ello desde los distintos ámbitos de la sociedad en los últimos años y eso nos anima a seguir empujando para hacer posible su consecución. Quizás no podamos llegar a todos ya, en el corto plazo, pero no nos falta la ambición ni el compromiso para hacerlo. Pasar de una economía lineal a una circular requiere de tiempo, esfuerzo y colaboración. Y eso es algo que todos tenemos muy asumido”.