El compromiso de las empresas por alcanzar la sostenibilidad con el packaging flexible

La sostenibilidad aplicada al Packaging Flexible es un tema que preocupa e interesa al sector del packaging, por los beneficios potenciales del material y las posibilidades técnicas que aporta. Por ello, el Clúster del Packaging decidió organizar una jornada técnica específica el jueves 4 de junio, con profesionales expertos de empresas socias como Buergofol, Macsa id, Comexi y Nestlé, para que nos explicaran las últimas novedades sobre el Packaging Flexible y cómo lo están trabajando desde cada una de las empresas.

En primer lugar, Albert Negre, director general de Buergofol Ibérica, explicó los efectos positivos de utilizar un packaging sostenibles, en equilibrio con el crecimiento económico de la empresa, el cuidado del medio ambiente y bienestar social. Para ello, el Packaging Flexible ayuda a alcanzar esa sostenibilidad.

Buergofol es consciente de la responsabilidad que tienen como empresa, y como ciudadanos, de cuidar los residuos que generan, así como el impacto que provocan en el medio ambiente, pues así nos lo hicieron saber en su ponencia, donde se presentaron datos reales de los efectos y consecuencias del cambio climático. Y, ¿qué es lo que pueden hacer desde su posición? Reducir, Reciclar y Recuperar los envases, en sintonía con la Estrategia Europea de Reciclaje. Proponen impulsar normativas realistas sobre las necesidades actuales, ayudar a los países en vías de desarrollo dentro de lo posible y contribuir con una pedagogía adecuada al consumir sobre sostenibilidad.

A continuación, Judit Millà, responsable de Marketing en Macsa id, presentó las últimas novedades en tecnología láser para un Packaging Flexible inteligente, con el lanzamiento de Bidilase, el codificador más rápido del mundo. Es una solución disruptiva para embalaje flexible que permite marcajes de alta velocidad (1000mts/min), alta resolución (códigos fácilmente legibles en cualquier plataforma), precisos (en la posición inicialmente indicada) y únicos (con un código QR personal generado con un software que trabaja a una velocidad de 166 códigos/segundo).

Con esta tecnología verde se pueden producir envases de una mayor reciclabilidad, puesto que no incorporan ni etiquetas ni tintas, se graba la información con láser permanente. Esta información recogida en un código QR, permite obtener una mayor trazabilidad del producto para conocer su vida útil (producción, distribución, consumo y recuperación) y, por tanto, como mejorar el reciclado de este envase tras un análisis de este ciclo.

El tercer ponente fue Jordi Sahun, Chief Innovation & Technology Officer de Comexi, que nos explicó las diferentes alternativas existentes en cuestión de impresión sobre Packaging Flexible y quienes son los que alcanzan los parámetros de sostenibilidad deseados según Comexi, el cual fabrica bienes de equipo para la industria de la conversión del embalaje flexible.

Tras la comparativa de las diferentes metodologías de tecnologías de impresión, la tecnología adecuada para estructuras de valor en el envase flexible es la digital, más concretamente la inkjet, drop on demand con base de agua. El futuro es de la impresión digital, lo que supone un reto a nivel tecnológico y a nivel del modelo de negocio, pues tendrá que basarse en el servicio ofrecido. Hasta el momento se trabaja con máquinas con tecnologías hibridas, que aglutinan las ventajas de cada método y ayudan a reducir los costes de tiempo y fallos.

Por último, Santiago Olivares, Packaging Manager Iberian Region de Nestlé, expuso cómo Nestlé actúa para cumplir sus compromisos medioambientales, con decisiones de cambio económicamente eficientes para mantener una estabilidad empresarial.

Al tratarse de una empresa que se dedica a productos alimentarios, necesitan un envase que proteja el producto a la vez que conserva sus propiedades. Un envase inocuo, que no transmita nada al producto, y que a su vez sea sostenible y fácilmente reciclable o recuperable. Para ello, Santiago Olivares afirma que no hay materiales buenos o malos, si no que tienen que ser evaluados según el caso concreto y tras hacer un análisis del ciclo de vida. En este sentido, para el embalaje flexible Nestlé tienen una limitación de 5 colores para mejorar la reciclabilidad del envase, ya sea un embalaje primario o secundario, y utilizan diferentes tecnologías para alcanzar sus objetivos a corto y largo plazo.

Desde Nestlé trabajan con una lista de materiales que ayudan a la reciclabilidad y una guía de qué es reciclable y qué no, con recomendaciones de actuación como: utilizar el menor número de tintas posibles, no crear combinaciones complejas de materiales o eliminar aquellos plásticos que no sean reciclables. Apuestan por el desarrollo de nuevos envases teniendo en cuenta las tendencias futuras de sostenibilidad, por mejorar los sistemas de reciclaje adaptándose a las necesidades requeridas y enseñar a la sociedad cómo reciclar para aportar su granito de arena.

Para finalizar, se resolvieron las dudas de los asistentes sobre cuestiones técnicas de las soluciones planteadas por las empresas, sobre las tendencias futuras en la reciclabilidad de envases (como el packaging compostable o biodegradable) o los beneficios de ciertos materiales a nivel logístico, generando un interesante debate entre los diferentes expertos en la materia.