La bombona de butano vuelve a subir este martes un 5 % y llega a 18,63 euros
Madrid, 14 mar (EFE).- La bombona de butano de 12,5 kilogramos subirá a partir de mañana, martes, un 4,96 % sobre el precio máximo vigente y pasará a costar 18,63 euros por botella, según publica este lunes el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El incremento del precio en esta segunda revisión de 2022 se debe al fuerte ascenso de las cotizaciones de la materia prima, que ha sido de un 14,32 %, a lo que hay que añadir la depreciación del euro frente al dólar, que ha sido de un 0,27 %, que no han podido ser compensados totalmente por el descenso de los fletes (costes de transporte), que han bajado un 9,9 %.
Las subidas de la bombona están limitadas a un 5 % en el precio sin impuestos y, de no existir ese límite, el precio sin impuestos de la botella se habría incrementado un 7,15 %.
El precio del gas licuado del petróleo (GLP) envasado se calcula en función del coste de la materia prima (propano y butano) en los mercados internacionales, el coste de los fletes y la evolución del tipo de cambio euro-dólar.
La revisión del precio, al alza o a la baja, está limitada al 5 %, acumulándose el exceso o defecto de precio para su aplicación en posteriores revisiones.
El GLP envasado es una mezcla de hidrocarburos, principalmente compuesta de butano, que sirve como alternativa al gas natural para su consumo energético en envases a presión, especialmente en poblaciones o núcleos urbanos sin conexión a la red de gas natural.
Actualmente se consumen 68 millones de envases de GLP de distintas capacidades, de los cuales 53 millones se encuentran sujetos al precio máximo regulado (el 78 %).
El uso de este combustible está en retroceso y desde 2009 a 2018 el consumo de GLP envasado ha descendido un 20 %.
Por otro lado, mañana, martes, también entrará en vigor el nuevo precio máximo del gas licuado del petróleo (GLP) por canalización, que vuelve a subir tras hacerlo también en febrero.
El término variable de la tarifa de venta del GLP para usuarios finales, antes de impuestos, tendrá un valor de 110,4489 céntimos de euros por kilogramo, frente a los 101,3826 céntimos de euro de la revisión de febrero.