El Gobierno británico aborda con las energéticas la crisis por el alza de los precios
Londres, 11 ago (EFE).- Los ministros británicos de Economía y de Empresa, Nadhim Zahawi y Kwasi Kwarteng, respectivamente, abordaron este jueves con los directivos de las grandes energéticas medidas para atajar el exorbitante incremento de los precios de la energía en el Reino Unido, que podrían superar los 5.000 euros al año por hogar.
Los ministros celebraron este encuentro en la residencia oficial de Downing Street, en momentos de una creciente inquietud de los consumidores por el esperado aumento de los precios a partir de este octubre, muy por encima del alza dispuesto el pasado abril.
La consultora Cornwall Insight avisó esta semana de que las facturas de la energía pueden llegar a partir de enero a 4.266 libras (5.050 euros), que es el precio máximo anual que las empresas energéticas están autorizadas a cobrar a cada hogar.
En octubre de 2021, el límite del precio energético estaba en 1.400 libras (1.666 euros) anuales, pero el pasado abril subió a 1.971 libras (2.345), mientras que se espera que este octubre el precio trepe a 3.358 libras (3.996 euros). El precio correspondiente a octubre será anunciado a finales de este mes de agosto.
Ante esta alza, que responde al incremento de la energía en todo el mundo por la guerra en Ucrania y la recuperación tras la pandemia, el Gobierno citó en Downing Street a los grandes directivos y, según los medios, se unió al final de la reunión el primer ministro en funciones, el conservador Boris Johnson.
En las conversaciones, según los medios, participaron Chris O’Shea, consejero delegado del propietario de British Gas, Centrica; el consejero delegado de Scottish Power, Keith Anderson, así como el directivo de la energética EDR en el Reino Unido, Simone Rossi.
Sin embargo, estuvieron ausentes las grandes empresas petroleras, como BP y Shell, que en la primera mitad del año generaron miles de millones de dólares en beneficios, debido sobre todo por el incremento de los precios del crudo a causa de la guerra en Ucrania.
Johnson pidió hoy a las compañías que ayuden a aliviar las presiones del costo de vida.
«Seguiremos instando al sector eléctrico a continuar trabajando en formas de aliviar las presiones del costo de vida e invertir más y más rápido en la seguridad energética británica», dijo el «premier» al término de la reunión.
Asimismo, la cartera del Tesoro informó de que Zahawi y las energéticas acordaron «trabajar en estrecha colaboración» durante las próximas semanas para garantizar que los consumidores, incluidos los más vulnerables, reciben apoyo frente al aumento de los costes.
EL GOBIERNO NO QUIERE ANUNCIAR MEDIDAS HASTA SEPTIEMBRE
El Gobierno no ha adelantado eventuales medidas para atajar la crisis e insiste en que éstas serán competencias de quien sustituya a Johnson (que dimitió en julio pero sigue en funciones) como líder del Partido Conservador y primer ministro a partir del próximo 5 de septiembre -Lis Truss o Rishi Sunak-.
Ninguno de los dos aspirantes a suceder a Johnson han querido adelantar medidas concretas, pero no las han descartado.
Según los expertos, una de las opciones del Gobierno es imponer un impuesto a las ganancias extraordinarias de las energéticas, teniendo en cuenta que han visto un incremento de sus beneficios por los altos precios del petróleo y el gas a nivel global.
La situación puede agravarse después de que el regulador Ofgem anunciase recientemente que las facturas se emitirán cada tres meses, en vez de cada seis meses, para evitar fuertes choques en los precios.
EL LABORISMO PIDE PRESUPUESTO DE EMERGENCIA
La oposición laborista ha pedido a las autoridades medidas para los más afectados. El ex primer ministro británico laborista Gordon Brown pidió el fin de semana a Johnson y a los dos líderes a sucederle -Truss o Sunak- que acuerden un inmediato presupuesto de emergencia para atajar el cada vez más elevado coste de la vida.
En un artículo publicado en el dominical «The Observer», Brown -primer ministro entre 2007 y 2010- alertó de que hay un riesgo de «condenar a millones de (personas) vulnerables y niños y pensionistas inocentes a un invierno de terrible pobreza».
La inflación interanual británica está en el 9,4 %, pero el Banco de Inglaterra avisó de que puede llegar al 13 % a fin de año por el incremento de los precios de la energía y que el país puede entrar en recesión en el último trimestre de 2023.
La ministra de Exteriores, Liz Truss, y el extitular de Economía Rishi Sunak son los dos candidatos al liderazgo del Partido Conservador, pero el ganador se conocerá el 5 de septiembre, una vez que voten los 160.000 afiliados a la formación. EFE
vg/ja/cs