La fotovoltaica y la competencia
La Comisión Europea puso de manifiesto en noviembre pasado que el principal problema de la política tarifaria en España es la falta de competencia que hace que los precios de la electricidad no reflejen la oferta más barata ni alienten la gestión de la demanda. Bruselas denunciaba cómo los pagos por capacidad distorsionan el mercado y que los consumidores europeos podrían ahorrar hasta 13.000 M€ al año si pudieran adoptar la tarifa más barata disponible.
Por Javier García Breva. Experto en energía y Presidente de la Fundación Renovables.
Sobre las previsiones que se hicieron en abril de 2012 por la CNE, mientras las primas de las renovables se han incrementado un 22% en todo el año y las de la fotovoltaica un 9%, el déficit de tarifa lo ha hecho en un 114%. A pesar de estos datos, desde instancias oficiales y del sector eléctrico se sigue pensando que la fotovoltaica es la responsable de todos los males.
La reciente discusión de la Vicepresidenta de la Comisión Europea, Neelie Kroes, con el Ministro Soria a causa de la eliminación de la independencia de los organismos reguladores que ha planteado el Gobierno español fusionando la CNE, CNC y CMT no augura nada bueno sobre la apertura a la competencia de nuestro mercado eléctrico. La crisis económica está afectando al sistema más de lo que se cuenta y el descenso de la demanda eléctrica y el mayor coste de las importaciones de gas y petróleo hace que el principal problema no sean las renovables y mucho menos la fotovoltaica. Pero mantener un sistema energético sin competencia exige eliminar cualquier competidor; y eso es lo que se está haciendo con las renovables y con el ahorro de energía. Preservar el mercado a los combustibles fósiles sacando del mismo a las renovables es la peor alternativa para el consumidor ya que se trata de la única fuente autóctona cuyo mayor consumo reduce el precio del pool eléctrico y evita importaciones energéticas; pero como bien dice Joseph Stiglitz, “con transparencia hay más competencia y con competencia se reducen los beneficios”.
Puede leer el artículo completo en la revista Tecnoenergía nº 112 del mes de marzo.