Ciudad 2020, hacia un modelo de ciudad inteligente sostenible

Ciudad 2020 tiene como objetivo ser un proyecto referente de ‘smart cities’ en España, definiendo un nuevo modelo de ciudad inteligente que abarca las principales temáticas de interés en una ciudad: Energía y Eficiencia, Transporte y Movilidad, y Sostenibilidad Medioambiental. El Foro Greencities & Sostenibilidad, celebrado en Málaga los días 2 y 3 de octubre, acogió en su programa una jornada destinada a presentar las claves de este proyecto.

Ciudad 2020 es un proyecto de I+D cofinanciado por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (Cdti) y en el que participan grandes y medianas empresas, centros tecnológicos, universidades y, por supuesto, los ciudadanos. El proyecto arrancó el 1 de octubre de 2011, cuenta con un presupuesto de 16,3 millones de euros y tiene una duración de 39 meses.

El objetivo final es “crear ciudades por y para los ciudadanos, ” como señalaba Rodrigo Castiñeira, coordinador técnico de Ciudad 2020 (Indra), empleando para ello las tecnologías e infraestructuras necesarias para “vertebrar multitud de servicios orientados a una gestión más eficiente de los recursos y a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”.

En Ciudad 2020, como aseguran los promotores de este proyecto, el ciudadano juega un papel fundamental: por un lado como principal usuario de los servicios ofrecidos por la ciudad, y al mismo tiempo como ‘sensor proactivo’ de la ciudad, capaz de generar enormes cantidades de información al hacer uso de las infraestructuras de la ciudad así como de las plataformas de ‘social media’.

Todo ello encaminado a lograr los objetivos 20-20-20 de reducción de emisiones, producción de energía renovable y mejora de la eficiencia energética.

Haciendo uso de una plataforma ‘cloud’, que es la piedra angular, Ciudad 2020 diseña una arquitectura global que unifica la prestación de servicios de energía, transporte, sostenibilidad medioambiental y comportamiento ciudadano.

De cara a hacer uso de los servicios proporcionados por Ciudad 2020, el usuario utilizará el ‘Front-End’ de marco de referencia instalado en su dispositivo móvil, que hará las veces de interfaz de comunicación con la plataforma. Este ‘Front-End’ interactuará con el ‘Back-End’ del marco de referencia (o proxy) que será el encargado de proporcionar al usuario los servicios requeridos.

Así un usuario podrá acceder a servicios de dominio heterogéneos, ofrecidos por diversas entidades, usando un interfaz y unas credenciales de acceso único.

Del mismo modo pueden añadirse fácilmente nuevos dominios de aplicación con sus servicios asociados a la arquitectura federada haciendo uso de los interfaces de comunicación diseñados para el proyecto.

La plataforma ofrece una serie de facilitadores que aportan ciertas funcionalidades a los servicios, como pueden ser un visualizador para mostrar información sobre mapas o un geolocalizador que obtiene las coordenadas geográficas a partir de direcciones postales y viceversa.

Ciudad 2020 busca concebir y desarrollar nuevas soluciones basadas en los Sistemas Inteligentes de Transporte, que minimicen las emisiones contaminantes y eviten las congestiones de tráfico. El objetivo, como indicaba Leyre Merle, de Indra, no es crear nuevas infraestructuras sino “hacer un uso más eficiente de las ya existentes”.

Ciudad 2020 focaliza sus trabajos en diversas líneas de investigación: facilitar la intermodalidad, la gestión ecológica de la movilidad, la seguridad y la eficiencia en el transporte ante situaciones de emergencia y la promoción de un transporte de mercancías más eficiente. Para lograr todos estos objetivos este proyecto está profundizando en ámbitos como la visión artificial (tráfico, trayectorias de bicis y peatones, …), redes de sensores magnéticos (WSN) para la detección de ocupación de plazas de aparcamiento y uso de los teléfonos inteligentes para, entre otras cosas, facilitar el pago de los diferentes transportes y proporcionar rutas eficientes a partir de incidencias y eventos detectados (en buena parte por la información recopilada en las redes sociales).

Ciudad 2020 plantea un enfoque holístico para analizar el uso y la gestión de la energía en edificios y espacios públicos, que incluye muy especialmente a los ciudadanos, no sólo como habitantes de un municipio sino como parte activa de la gestión, considerándoles responsables de su propio consumo, fuente de información de gran valor y principal factor para establecer la calidad de servicio.

En este sentido, como resumía Bárbara Fernández, gerente de Proyectos de Innovación en Ferrovial, desde Ciudad 2020 se trabaja en varias líneas de investigación: sensores inteligentes inalámbricos de bajo consumo y fácil instalación; plataformas de visualización de datos monitorizados en infraestructuras; simulación online de instalaciones de alumbrado público y evaluación de consumo; regulación automática de la iluminación en edificios y espacios públicos en función de la ocupación; regulación automática de la climatización mediante el cálculo del confort térmico y modelado del consumo asociado a la meteorología; generador de recomendaciones sobre políticas de eficiencia energética adecuada al perfil del usuario y sus hábitos de vida (Recommender); recomendaciones sobre las modificaciones a incluir en una vivienda en función de los recursos disponibles para invertir (Optimizer); web para la evaluación del consumo energético y de agua en viviendas; y análisis semántico y de sentimiento a través de las redes sociales.

Desde Ciudad 2020 también se trabaja para “mejorar la calidad ambiental de las ciudades”, como manifestaba Rosa Martínez, responsable de desarrollo e ingeniería de sistemas hardware en Fagor Electrónica. El control medioambiental es la base de partida sobre el que trabaja el desarrollo de una ciudad inteligente sostenible, con la meta de lograr espacios más confortables y saludables.

Dentro del proyecto Ciudad 2020 se ha realizado una revisión de los procesos contaminantes de mayor relevancia, que permitan localizar focos de contaminación, disponiendo de las pautas y modelos adecuados que permitan controlar la concentración de compuestos contaminantes y monitorizar la inmisión o calidad del aire, en tiempo real.

Posteriormente, a través de densas redes de sensores heterogéneos se ha captado información relativa a los distintos agentes contaminantes, transmitiendo la misma en tiempo real hacia los centros de control para su monitorización y gestión. Asimismo se han generado modelos predictivos que contribuyan a detectar situaciones de riesgo asociadas al incremento de contaminantes.

Ciudad 2020 redefine el marco de interacción de los ciudadanos y el conjunto de activos, servicios e infraestructuras de la ciudad, y mediante un conjunto de tecnologías permite la gestión inteligente del contexto, las necesidades y exigencias de los ciudadanos y los elementos transversales de la convivencia y cohabitación urbana.

Ciudad 2020 logra este objetivo con la combinación óptima de tres factores esenciales, como explicaba Fernando Almarza, responsable técnico de proyectos de I+D+i en GFI Informática:

• Los datos, incluyendo no sólo la utilización de algoritmos inteligentes sino su propia obtención, provisión, combinación y acceso.
• El contexto, entendido como el ámbito que rodea al ciudadano al hacer uso de los servicios provistos.
• Los servicios, como la cara visible y la puerta de entrada del ciudadano a su ciudad inteligente.

El gestor de la ciudad integra en un sistema de provisión de servicios avanzados innovadoras herramientas para presentarlas, habilitarlas y gestionar el acceso.

El ciudadano tiene acceso a los servicios de forma ordenada, de acuerdo con las preferencias tanto del gestor como del propio ciudadano a través de una aplicación móvil.